La adquisición de libros electrónicos en las bibliotecas universitarias: datos de un estudio reciente

Versión para impresiónVersión para impresión

José Luis Herrera Morillas
Facultad de Ciencias de la Documentación y la Comunicación
Universidad de Extremadura


Novak, John; Ohler, L. Angie; Day, Annette (2020). Ebook collection development in academic libraries: examining preference, management, and purchasing patterns. [Middletown]: Choice. 58 p. Disponible en: <https://static.od-cdn.com/Choice-Incorporating_Ebooks_into_Collection_Development.pdf>. [Consulta: 21/07/2021]. 


Choice, una unidad editorial de la Asociación de Bibliotecas Universitarias y de Investigación (ACRL), realiza este estudio que suscribe OverDrive Professional, una división de OverDrive. El estudio se basa en una encuesta que tiene por objetivo conocer el estado actual de los libros electrónicos en las bibliotecas académicas, especialmente las tendencias sobre la adquisición, también los beneficios, las limitaciones y los obstáculos del uso de libros electrónicos dentro de la comunidad académica y sus bibliotecas. 

La encuesta fue realizada entre marzo y abril de 2020. Se envió a 8.412 miembros de la lista de contactos de audiencia de Choice. De un total de 8.412 destinatarios, la encuesta se cerró con 253 respuestas viables. Los destinatarios del envío fueron bibliotecas y los cuestionarios fueron completados por personal cualificado de los centros bibliotecarios. De tal modo que los datos aportados por los cuestionarios proporcionan información sobre lo que las bibliotecas perciben como factores importantes en la adquisición y el uso de libros electrónicos. Para obtener más utilidad y comprensión de estos resultados, los autores del informe recomiendan una encuesta complementaria destinada a los usuarios. 
Por otro lado, los autores explican que como la encuesta se llevó a cabo justo cuando estalló la pandemia del COVID-19 y la educación superior se vio obligada a cambiar al modelo en línea, se vio necesario llevar a cabo una breve encuesta de seguimiento, a fines de junio de 2020, con nuevas preguntas y con el propósito de medir los posibles efectos de la pandemia en las prácticas de adquisición de libros electrónicos. 

El estudio recogido en el informe refleja que los libros electrónicos constituyen una parte importante de la colección monográfica de cualquier biblioteca, y que las instituciones encuestadas han aumentado el gasto en este tipo de libros en los últimos años (82 % de las bibliotecas), aportando la siguiente información:

  • El 98 % afirma haber ofrecido a sus usuarios libros electrónicos.
     
  • Más del 50 % cree que los usuarios son neutrales sobre el tipo de soporte (electrónico o impreso).
     
  • Las cuatro ventajas principales de los libros electrónicos identificadas por las instituciones están todas relacionadas con el usuario: 
     
    • Acceso desde cualquier lugar.
       
    • Acceso en cualquier momento.
       
    • Mejora de la educación a distancia/en línea. 
       
    • Posibilidad de acceso multiusuario.
       
  • Algunos desafíos e inquietudes: 
     
    • Los libros electrónicos generalmente cuestan más que los impresos. 
       
    • Son necesarios conocimientos y habilidades para gestionar las complejidades de la adquisición a través de los múltiples métodos de adquisición.
       
  • Otros beneficios:
     
    • Pueden suponer un ahorro económico a largo plazo.
       
    • Implican un ahorro de espacio físico y de los gastos de mantenimiento asociados a la colección impresa (deterioro, pérdidas, recuento, etc.)
       
  • La gestión de múltiples plataformas y proveedores, así como los múltiples métodos de adquisición disponibles suponen una frustración; pero su uso y administración son necesarios para proporcionar todo el contenido relevante a sus usuarios de la manera más rentable disponible.
     
  • Las bibliotecas esperan hacer crecer sus colecciones de libros electrónicos y aumentar sus gastos en este formato en el futuro.
     
  • Las bibliotecas están comprando los mismos tipos de contenido en formato de libro electrónico que lo hacían en forma impresa, centrándose en la relevancia del contenido y no en el formato. El contenido supera cualquier otra preocupación de las bibliotecas en torno a las decisiones de compra.
     
  • Los usuarios son relativamente capaces de encontrar y utilizar libros electrónicos con éxito, sólo a veces necesitan ayuda, y se concluye que los usuarios de bibliotecas se sienten cómodos con el uso de diferentes plataformas para el contenido.
     
  • Las bibliotecas y los usuarios han integrado completamente los libros electrónicos en sus flujos de trabajo y prácticas, superando las posibles frustraciones y desafíos del nuevo formato.

Este informe se engloba, desde el punto de vista bibliotecario, en el marco de la colección que, tradicionalmente, ha sido uno de los ejes en torno al cual gira el trabajo bibliotecario: la colección va antes que el personal, los servicios y las instalaciones. La colección es un componente vivo que necesita crecer, mantenerse y conservarse. De ello se encarga el desarrollo de colecciones, que abarca el establecimiento de los principios y objetivos generales en torno a los cuales se va a ir construyendo la colección. Las bibliotecas en general, y las académicas especialmente, deben prestar atención al desarrollo de colecciones, y para ello es recomendable redactar un documento que plasme la política de desarrollo de colecciones, pues las bibliotecas académicas son objeto de numerosos retos. Los motivos los encontramos en las innovaciones tecnológicas y en los cambios de los modelos de enseñanza, aprendizaje e investigación. El aumento de los recursos en formato electrónico y el triunfo creciente del acceso abierto hacen imprescindible contar con un programa de desarrollo de colecciones que oriente a los profesionales de las bibliotecas y también que informe a los usuarios sobre los aspectos esenciales de las colecciones.

Además, el panorama al que se alude en el informe evidencia la necesidad de realizar un seguimiento frecuente y actualización de los objetivos, las estrategias y los procedimientos de trabajo sobre la colección, para dar respuesta a las necesidades actuales de los usuarios.

En el desarrollo de colecciones se engloba una de las tareas a la que se hace mención destacada en este informe: la adquisición, que tradicionalmente ha sido una de las actividades principales de las bibliotecas académicas. Se concibe como una tarea que se debe hacer según unos criterios y directrices establecidos.

La lectura del informe pone de manifiesto la importancia del desarrollo de colecciones, en este caso centrado en los libros electrónicos y se desprende cómo las bibliotecas dependen de su política general de desarrollo de colecciones para guiar las decisiones de adquisiciones, que en nuestros días deben abarcar y concretar los aspectos relacionados con la recopilación de libros electrónicos. En este contexto, el informe es significativo por aportar datos recientes que muestran el modo en que, en las bibliotecas analizadas, los libros electrónicos se han integrado con éxito en las actividades y flujos de trabajo de las colecciones generales, lo que significa que los presupuestos de libros electrónicos son parte de los presupuestos generales de las colecciones, y de la política de desarrollo de colecciones.

Otro aspecto que se debe destacar del informe es la mención a la pandemia del COVID-19. Hasta este momento, la convivencia de la colección impresa y electrónica en las bibliotecas académicas ha llevado a los autores a defender el concepto de biblioteca híbrida, pero como se menciona en el informe queda por ver qué efectos a largo plazo, si los hay, tendrá la pandemia del COVID-19 en el papel que van a jugar los libros electrónicos en la colección de las bibliotecas académicas.