El proyecto de constitución de la Unión Europea se concibió como una marcha por etapas. La primera tendría como objetivo la constitución de una comunidad económica, la segunda la construcción de una unión política. Sirva de ejemplo la declaración de Schuman ante la Asamblea Nacional francesa del año 1950.

El primer paso fue la creación de la Comunidad del Carbón y del Acero (París, 1951), seguido por el EURATOM, Comunidad de la energía atómica. En 1957 se creaba la Comunidad Económica Europea. Las tres comunidades que formaron posteriormente la Unión Europea.

Así, El Tratado constitutivo (1957) de la Comunidad Económica Europea, respondiendo estrictamente a su denominación, establecía los objetivos económicos de dicha comunidad:

1. Un mercado común
   
   
2. Un intento de aproximar la políticas económicas de los estados miembros
   
   
3. La supresión de los derechos de aduana y el establecimiento de la libre circulación de mercancías
   
   
4. El establecimiento de aranceles y de políticas comerciales comunes respecto a terceros estados

Ninguna referencia pues a una comunidad política, ni a una Europa de los ciudadanos. En el Tratado de 1957 los sujetos del derecho eran los Estados Miembros, no los ciudadanos ni los individuos.