EL PERIÓDICO - EL BILLETE - 19/06/02

Injusticias históricas

  DR. VLADIMIR DE SEMIR

Director del Observatorio de la Comunicación Científica (Universitat Pompeu Fabra).

Resulta que fue un tal Meucci, y no Bell, el inventor del teléfono. A lo largo de la historia han sido muchos los grandes nombres recordados por méritos ajenos y muchos los descolgados de la notoriedad injustamente. Un ejemplo conocido, el de Alexander Fleming y la penicilina. El verdadero mérito de este antibiótico no se debe precisamente a Fleming, quien parece que no concedió gran importancia al hallazgo, sino a Howard Florey.

Otro caso: Watson y Crick serán siempre recordados como los autores de la descripción de la doble hélice del ADN. Pero lo que no se suele reconocer es que éstos poco hubieran podido hacer sin los trabajos previos de Rosalind Franklin. La historia, curiosamente, tuvo que olvidarse de la mujer.


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Última actualización: 19/06/02