Scripta Nova  Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales.
Universidad de Barcelona [ISSN 1138-9788] 
Nº 45 (45), 1 de agosto de 1999
 

IBEROAMÉRICA ANTE LOS RETOS DEL SIGLO  XXI.
Número extraordinario dedicado al I Coloquio Internacional de Geocrítica (Actas del Coloquio)

INTERACCIÓN RURAL-URBANA Y EL ORDENAMIENTO PARTICIPATIVO DEL TERRITORIO. EL VALLE DEL MOMBOY, TRUJILLO, VENEZUELA.

Tadeo Salcedo M.
Universidad de Los Andes
Trujillo, Venezuela. 


Resumen

Presentando el caso del Valle del Momboy en Los Andes Venezolanos, se analiza la interacción rural-urbana como una relación principalmente unidireccional, de aprovechamiento del campo por la ciudad. Se sugiere un enfoque de planificación participativa que incorpore a la población en la ordenación del territorio, como primer paso hacia un desarrollo mas equilibrado.

Abstract

This is a first approach to the analysis of the urban-rural interaction in Venezuela, by considering the case of Valle del Momboy in the state of Trujillo. The economical elites from the cities take advantage of the peasantry, exploiting their resources and causing poverty among them. To overcome this situation a participatory planning of the territory is suggested. 


"Simultáneamente estamos frente anuncios de una clausura radical; y por ende leemos acerca del postulado <<fin de la historia>>, o el <<fin de lo social>>. Y en sentido inverso en una reacción sintomática a las argumentaciones sobre los ocasos, nos impulsan a creer en nuevos comienzos o afirmaciones novedosas. En una crítica yuxtaposición sobre el <<final de la historia>>, se discute que estamos viviendo el <<comienzo de la geografía>>, el surgimiento de un nuevo globalismo en las relaciones humanas, o una nueva era para la democracia"

David Slater
Los estudios geográficos de ocupación del espacio en el contexto de Europa occidental muestran que la ciudad actúa como un dinamizador del medio rural. La ciudad impulsa el desarrollo económico, político y social(1). En Venezuela, el impacto de la ciudad sobre el medio rural se muestra con contradicciones como veremos en el ejemplo que se analiza en este trabajo.

Como quiera que sea, la urbanización es un proceso creciente en todo el planeta, pero anárquico y generador de muchos problemas sociales en las regiones que se denominan mundo subdesarrollado o en desarrollo, regiones que optamos por llamar periféricas.

En Venezuela, este proceso de urbanización es de los más rápidos de América Latina. Según el Banco Mundial, para 1997 solo 8 por ciento de la población es considerada rural(2). El número total de pobladores del país (23 millones) no ha dado para conformar gigantescos aglomerados humanos como los de Méjico o Brasil, pero Caracas con sus 4 millones de habitantes presenta fuertes contrastes de injusticia social en su definición urbanística.

Por otro lado, Venezuela presenta una exagerada concentración de la población y de sus actividades económicas. En los estados centro-norte costeros se encuentra el 40 por ciento de la población, el 70 por ciento de los establecimientos industriales y las tres cuartas partes del empleo manufacturero. En ellos se genera más de la mitad del valor agregado en las diferentes actividades productivas, se acumula casi cincuenta por ciento del capital fijo y se genera más del 60 por ciento de la producción bruta no petrolera. Todo esto, en un espacio menor del 2 por ciento del territorio nacional(3).
 

El estado y la planificación.
 

La relación del estado venezolano y la sociedad está cargada de patrimonialismo, autoritarismo y exclusión, tal como lo ha señalado Fleury (1998) para el conjunto de América Latina. En efecto, la exclusión es una consecuencia del autoritarismo y el patrimonialismo, ejercicios estos últimos que se asientan muy bien en sociedades que no han superado el síndrome del colonizado.

La planificación, centralizada y burocrática (Planes de la Nación, de los cuales se han realizado nueve) se elabora quinquenalmente, pero carece de continuidad y sobre todo de consulta regional. Allí comienza la exclusión social. Estos planes de la nación, han supeditado sus objetivos al objetivo primordial del gobierno: estructurar la red que le permita la permanencia en el poder a través del control del voto, pues aún este acto que se muestra como posibilidad de participación, es objeto de coacción y manipulación desde quienes tienen el poder.

Boisier (1997) apunta que ningún país federal latinoamericano dispone de una política regional, materia que debe fundamentarse en el ordenamiento territorial, descentralización, fomento y coherencia inter-regional.

Esta situación, obliga a encontrar maneras para lograr la participación de la población en la búsqueda de solución a sus problemas. Sobre la participación, en el diagnóstico y la planificación, viene desarrollándose un trabajo en distintos países que van confirmando su importancia en la búsqueda del desarrollo democrático(4).

Es primordial la ordenación del territorio que permita un acceso mas equilibrado a los recursos. El ordenamiento del territorio debe partir de los problemas que los pobladores consideran de primera importancia. Se requiere de un diagnóstico participativo para orientar las acciones. Esto permite iniciar los contactos con la población, respondiendo a sus intereses, y por esta vía, de manera paralela ir definiendo los elementos de ordenación. Se trata de estimular el potencial de desarrollo endógeno de la población para tomar iniciativas en lo político. Y lo mas importante, fortalecer la visión endógena del desarrollo, tomando de lo global con sentido crítico, ya que el planteamiento de mercado y la competitividad están asociados a la esclavitud de la deuda externa, como bien lo ha demostrado Schatan (1998). Otra consideración importante sobre la ordenación del territorio es la realizada por Molinero (1990), quien señala que en el medio rural, la ordenación territorial, debe tomar el carácter de ordenación rural y constituirse en un instrumento de defensa y protección de los intereses de las comunidades locales.
 

La región andina.
 

La región andina ha sido considerada como la de mayor población rural ( 25 % según OCEI, 1981) y con una alta tasa de emigración hacia las ciudades. A principios de los sesenta, emigraban 52 personas por día(5). Este proceso emigratorio ha disminuido debido a varios factores que están dinamizando la región. En los sesenta y setenta, el estado desarrolla los sistemas de riego, carreteras escuelas y servicios de salud. Estos avances impulsan la horticultura que venia dando pequeños pasos desde 1950. Y a partir de 1980, se inicia la actividad turística y un proceso de urbanización que responde en parte al crecimiento de las ciudades principales: Mérida, San Cristobal, Valera, así como al desarrollo de residencias secundarias.
 

El Valle del Momboy, Trujillo.
 

El Momboy es una subcuenca del río Motatán, que a su vez forma parte de la cuenca del lago de Maracaibo. El Motatán y el Momboy están integrados a la cordillera andina, en el occidente de Venezuela. El paisaje dominante del Momboy es el montañoso, con valles muy estrechos y laderas abruptas. A lo largo y en el fondo del valle se han instalado doce pequeños poblados que agrupan un poco mas de 8000 habitantes, siendo La Puerta y Mendoza los mas grandes en población y ocupación del territorio. Estos poblados establecen su ligazón con Valera, la ciudad metropolitana del estado Truijillo.

Momboy es una microregión con una actividad agropecuaria muy antigua. Desde los aborígenes timotocuicas, con sus cultivos de maíz, papa (Solanum tuberosum) y otros tubérculos a los cultivos de plantación (café y caña) a las microparcelas de cultivos hortícolas intensivos.

La cuenca del río Momboy está definida por un cauce de 24 Km de largo y una superficie de 14.706 hectáreas. Posee una apreciable variación ecológica, debido a la gran diferencia altitudinal entre sus dos extremos: 400-3500 m.

A principios de siglo XX, el sistema comercial agrícola dominante fue el café, que compartía el espacio con la agricultura tradicional de subsistencia (maíz, arvejas, trigo y animales en pequeñas cantidades). En los años veinte el café sufrió una crisis de sobreproducción y baja de precios lo que desestimula el cultivo del grano y conduce al cambio progresivo hacia la caña de azúcar. La caña conquista todo el valle y mantiene ese predominio hasta mediados de los años sesenta. La caña de azúcar conformó un sistema de gran sustentabilidad ecológica, pero descuidó los aspectos socioeconómicos. En efecto, la caña es un cultivo conservador del suelo, no usa plaguicidas, requiere bajas dosis de fertilizantes y genera su semilla. Pero, el sistema no avanzó técnicamente, para hacer las labores menos duras, tanto en el campo como en el procesamiento de la caña para la producción de la panela (azúcar no refinado que se solidifica en forma de panelas). En la década del 50, un inmigrante alemán introduce el cultivo de hortalizas, el cual tomará auge con los sistemas de riego que desarrolla el estado en las décadas de los sesenta y setenta. En 1980, quedaban cuatro unidades de producción de caña. En este momento queda una sola. La cañicultura ha sido desplazada por el empuje competitivo de las hortalizas y el urbanismo.

La unidades de producción hortícolas (UPH) que dominan ahora el valle del Momboy, son muy pequeñas. Las treinta UPH encuestadas en 1980 tenían en promedio 2,50 ha (rango 0,5-15 ha). Las UPH están sometidas a un manejo muy intensivo, con un mínimo de tres cultivos por año, alto uso de plaguicidas y fertilizantes, abonos orgánicos y riego. La mayoría de las labores se realizan manualmente, con la excepción de la preparación de tierra, actividad que se realiza tanto con bueyes como con tractor. La administración y manejo se rige por un sistema de medianería, donde el dueño de la tierra cubre los costos de producción con la excepción de la mano de obra que la pone el medianero. Los beneficios son divididos proporcionalmente. No existe organización formal o informal para la adquisición de insumos, mercadeo u otros fines.

Después de 18 años (1980-1998), no se registran grandes cambios en cuanto al manejo de las UPH. Los rendimientos agronómicos se mantienen y no hay problemas fuerte de plagas y/o enfermedades. La erosión ha disminuido en las UPH, en el fondo del valle. No así, en las que están ubicadas en las laderas. La erosión es un problema fuerte de todas las laderas . Los plaguicidas causan envenenamientos agudos, pero son considerados imprescindibles para mantener los rendimientos.

Casi toda la cuenca ha sido deforestada. Sólo queda un 4 por ciento de bosque primario. La mayoría de microvertientes tienen un área protectora de bosque secundario relativamente consolidado, lo que ha garantizado el régimen de escorrentía del río y la provisión de agua para riego y consumo humano doméstico.

En una primera aproximación podemos señalar que la estrategia de vida fundamental es la agricultura. Es la actividad económica mas importante, expresada en primer lugar por la horticultura seguida de la producción pecuaria y cañicultura, estos últimos sistemas en vías de desaparecer para ser sustituidos por las hortalizas y el urbanismo. En segundo plano, hay una actividad turística, que ha crecido paulatinamente desde 1980.
 

El desarrollo urbano y las residencias secundarias.
 

A finales de los setenta se desarrolla la primera "urbanización privada" de residencias secundarias (chalets estilo suizo), que ocupa aproximadamente dos hectáreas al sur del pueblo de La Puerta, el poblado principal del valle. Esta urbanización será morada secundaria de gente proveniente, principalmente de Maracaibo, la ciudad petrolera, por excelencia del occidente del país, y a 200 Km de distancia del La Puerta. Se genera malestar en la población nativa porque el conjunto residencial es aislado mediante un muro y portón con guardia, del resto del pueblo. Por otro lado, de Maracaibo también llega gente hasta el pueblo de La Puerta, que le compra a los pobladores mas pobres sus viviendas para convertirlas en residencias secundarias.

Ante un segundo proyecto que se inició a principio de 1980, de residencias secundarias y conjunto hotelero, que plantea ocupar 60 hectáreas, se desata un proceso de resistencia, sobre todo de el Frente de Defensa de La Puerta, una organización ecologista, de las que surgieron en esos años y que por estar de moda lograron bastante eco en los medios de comunicación. Pero, finalmente el proyecto se quedó en los inicios de su primera etapa, debido a la crisis financiero-monetaria de 1983, cuando se inicia la devaluación del bolivar, la moneda venezolana. Ese año el dólar que equivalía a 4,30 bolivares subió a 7,30 Actualmente un dólar vale 580 bolivares.

Luego, el proceso de urbanización continuó a través de proyectos menores o individuales y con una interacción mas abierta con los pobladores. Pues la compra de terrenos para el desarrollo de viviendas ha significado ingresos sustanciales para los agricultores, quienes también han mejorado sus viviendas o construido nuevas. Los proyectos mencionados en el párrafo anterior, sólo generaron para el pueblo puestos de trabajo en el área de servicios, labores éstas de muy baja remuneración.
 

El turismo.
 

La Puerta y los pueblos cercanos son típicos pueblos andinos, de tipología "colonial", aire bucólico, pobladores amables y clima muy agradable. Estas características, además de encontrarse ubicados en la vía hacia Mérida, atractivo turístico de primera importancia en la región andina, les han convertido en un destino turístico nacional.

Este nacimiento y expansión del turismo ha dado lugar a la creación de hoteles y restaurantes ha generado puestos de trabajo. En el lado negativo, ese ambiente de calma que van buscando los turistas se ve perturbado por la afluencia de vehículos y personas que causan contaminación sónica del medio, donde todavía no existen normativas ni organización para enfrentar situaciones de conflicto.

Entre los problemas mas importantes que se ha generado con el moderado crecimiento económico de La Puerta estan los siguientes:
 

1.) El de vivienda, debido a que el turismo y la construcción ha atraído a trabajadores de estas actividades, que perciben bajos salarios, son trabajadores temporales y se han ubicado a la orilla de las carreteras, en áreas de riesgo, conformando asentamientos informales de viviendas precarias (ranchos o chabolas). Contamos 200 ranchos, construidos desde 1980, lo que da una población aproximada de 1000 personas; esto es 20 % de la población de La Puerta.

2.) Alza del precio de la tierra, tanto para fines agrícolas como de vivienda.

3.) Conflicto por el uso del agua, durante los días de mayor afluencia de los usuarios de las residencias secundarias. Pero, esto es debido a un sistema deficiente de captación, distribución y administración del líquido.
 

Conclusión
 

Encontramos un proceso de urbanización y crecimiento del turismo de una zona rural, que ha mantenido una buena productividad agrícola durante los últimos 18 años. Estos procesos, han significado cierta mejora socioeconómica los poblados del valle del Momboy. Pero, al mismo tiempo se han generado y han crecido los asentamientos informales, donde se encuentra un número importante de población con problemas de servicios básicos y baja calidad de vida en general. En una sociedad, donde el Estado no cumple el papel regulador de procesos sociales, quienes tienen poder económico se apropian de los recursos y derechos de los pobladores mas pobres. Los habitantes que han vendido sus casas han sido desplazados del poblado, pasando a formar parte de los asentamientos informales, pues no están en capacidad económica de adquirir o construir una vivienda nueva.

Creemos posible inducir a la población a buscar solución a los problemas fundamentales de la cuenca, elaborando un ordenamiento participativo del territorio, como primer paso hacia una gestión y desarrollo de sus recursos. Es necesario lograr la participación de todos los actores sociales e institucionales del valle ( alcaldías, juntas parroquiales, escuelas, iglesia, gobierno nacional y estadal). Ningún sector debe estar excluido, a fin de potenciar los recursos y evitar aminorar lads resitencias. Los distintos sectores de la población deben sentirse reconocidos como miembros en igualdad de derechos dentro de la comunidad.
 

Notas
 

1. Según Garcia et al. (1995), la ciudad cumple una doble función, por un lado concentra los consumidores de los productos del medio rural y por el otro, produce los insumos industriales requeridos en la producción agrícola y en el equipamiento del campo.

2. Aunque la distinción entre lo rural y lo urbano es sujeto de controversia, ya que se usan distintos indicadores para definirlas. En muchos casos, lo que aparece como rural bajo una clasificación, puede ser urbano al ser visto con otros criterios (WBA, 1997).

3. El Movimiento Quinta República (MVR) es el partido que acaba de ganar las elecciones presidenciales venezolanas en diciembre de 1998. Propone en su programa iniciar un proceso de desconcentración de la población y de las actividades económicas (MVR, 1998).

4. Con frecuencia se tiende a considerar el tema de la participación ciudadana como un círculo vicioso. Un estado autoritario se implanta, donde no existe participación y a su vez, el estado autoritario impide la participación. Nos encontramos aquí, como en otros casos, con problemas sociales que tienen su origen en la imposición de instituciones sobre conglomerados sociales, cuyas cosmogonías no son tomadas en cuenta para tal efecto. Los trabajos de estos autores rompen con esa visión de un conocimiento superior que va en rescate de los "oprimidos. Establecen en cambio, una relación horizontal que permite el entendimiento. La participación se logra en la medida en que el otro es reconocido en su cultura (Valarezo, 1995; León 1995 ; Some y McSweeney, 1997; Borrini-Feyerabend, 1997).

5. En estos años, la agricultura que había decaído y las oportunidades de trabajo que se abrían en el sector de servicios de las ciudades, actuaron como móviles principales de la emigración (Vivas 1992).
 

Bibliografia
 

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