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01-04-2022

«Evitemos la pesca fantasma»: más de cien extracciones de aparejos de pesca perdidos en el litoral catalán

Los investigadores Bernat Hereu y Júlia Ortega, de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (UB-IRBio) de la UB.

En el litoral catalán se han llevado a cabo 102 extracciones de artes de pesca perdidas en los fondos marinos desde 2009, momento en el que se hizo la primera retirada de aparejos de este tipo. Fue en el Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Baix Ter, bajo el asesoramiento científico de expertos de la Facultad de Biología y el Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la UB.

Un 75 % de las extracciones se han hecho desde que, en 2017, se publicó el primer protocolo elaborado en Cataluña para retirar las redes y las artes de pesca deportivas y artesanales enrocadas en los fondos marinos, impulsado por la UB y la Dirección General de Política Marítima y Pesca Sostenible de la Generalitat de Cataluña (DGPMPS). Estas son algunas de las conclusiones del informe sobre el proyecto «Evitemos la pesca fantasma», presentado el 31 de marzo en el Museo del Mediterráneo (Torroella de Montgrí, Girona) y dirigido por los expertos Bernat Hereu y Júlia Ortega, del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales de la UB y el IRBio, con el apoyo de la DGPMPS. Este proyecto científico ha sido decisivo para valorar el impacto que las artes de pesca perdidas han tenido en los ecosistemas marinos litorales de Cataluña, así como la dimensión y la tipología de los aparejos perdidos en los fondos marinos.

Pesca fantasma: trampas para la vida marina

Cada año se vierten al Mediterráneo cerca de 3.000 toneladas de residuos, y alrededor del 10 % son artes de pesca perdidas o abandonadas en los fondos marinos. «Los aparejos de pesca enrocados en los fondos marinos pueden capturar organismos durante años —es el fenómeno de la pesca fantasma— y tienen un impacto medioambiental que se suma a los efectos negativos en la biodiversidad marina de la contaminación, el cambio climático, la pesca, las especies invasoras y la sobrefrecuentación», detalla el profesor Bernat Hereu, coordinador científico del proyecto y miembro del Grupo de Investigación de Biología de la Conservación en Ecosistemas Marinos (MedRecover). Además de amenazar la vida marina, los aparejos abandonados también suponen un riesgo potencial para las embarcaciones, el tráfico marítimo y las personas que realizan actividades acuáticas.

El nuevo informe destaca las consecuencias de la pesca fantasma en especies marinas de elevado interés comercial y ecológico, como la langosta, el santiaguito, el mero, el dentón, el cabracho, la sepia, el coral rojo y las gorgonias roja y blanca. En concreto, se han identificado un total de 88 especies perjudicadas, entre las cuales hay 55 atrapadas (pesca fantasma) y 35 afectadas por la erosión del bentos. También se han encontrado 50 especies que han utilizado el arte como sustrato para crecer. La mayoría de artes retiradas se encontraron en sustratos rocosos con coralígeno (60 %) y cerca del 50 % de las artes recuperadas eran trasmallos, probablemente porque se trabajaba en profundidades inferiores a los 30 metros.

La mayoría de avisos sobre la presencia de artes abandonadas proviene del sector de la inmersión, lo que explicaría parte de los resultados obtenidos en estas campañas (por ejemplo, las zonas en las que se han encontrado los aparejos, las profundidades, los hábitats, etc.).

La meteorología adversa y las malas prácticas ligadas a la pesca ilegal son las causas principales de la pérdida de las artes de pesca en el medio marino. Para reducir esta problemática, resultan decisivos el actual Protocolo para la detección y extracción de aparejos de pesca perdidos en el Mediterráneo, redactado en el marco del proyecto, y la labor preventiva desarrollada de oficio por la inspección pesquera de la DGPMPS. Ambas iniciativas son indispensables para hacer de la pesca una actividad más sostenible.

Científicos, gestores, pescadores y ciudadanía

El proyecto «Evitemos la pesca fantasma», impulsado en 2015 por expertos de la UB-IRBio para preservar los valores ecológicos de los fondos marinos, ha tenido la colaboración de científicos, pescadores, agentes locales y Administración (agentes forestales, Mossos, buzos profesionales).

Gracias al seguimiento científico, la DGPMPS ha analizado toda la experiencia y la información acumulada sobre la problemática de la pesca fantasma en las costas catalanas. Como resultado, se ha actualizado el protocolo para retirar las redes y las artes de pesca y se ha elaborado una primera valoración del impacto de los utensilios abandonados en el litoral de Cataluña. Esta actualización del protocolo será un incentivo para que los actores implicados aborden de manera coordinada esta problemática que afecta negativamente a los ecosistemas marinos, a los pescadores y al conjunto de la sociedad.

Proyectos como «Evitemos la pesca fantasma» muestran la importancia de una coordinación interdisciplinaria de diversos sectores: «Este proyecto fue iniciado por la Universidad de Barcelona con el apoyo de la administración pesquera autonómica, pero para que funcione es imprescindible la colaboración de la ciudadanía —especialmente, la de quienes realizan actividades en el mar, como los submarinistas— y del sector pesquero», concluyen los expertos Bernat Hereu y Júlia Ortega.

 

Vídeo de la UBTv