El estado de bienestar español ya era de por si bastante precario, tanto en cobertura como en extensión, en lo que respecta al desarrollo de políticas familiares. Así, las medidas de contención del gasto público en este ámbito no han venido sino a agravar la ya delicada situación de protección de las familias españolas, con especial incidencia sobre aquellas modalidades familiares que presentan una más dificultades...