Tras el movimiento de las placas tectónicas para estudiar la biodiversidad en el Mediterráneo

Leticia Bidegaray-Batista y Miquel A. Arnedo, autores del trabajo investigador.
Leticia Bidegaray-Batista y Miquel A. Arnedo, autores del trabajo investigador.
(25/01/2012)

 Hace unos treinta millones de años, la cuenca del Mediterráneo occidental se abría por la colisión tectónica de las placas africana y euroasiática. Este episodio geológico, descrito en la bibliografía científica, fue el punto de partida de la diversificación de un grupo de arañas endémicas del Mediterráneo occidental, tal y como demuestra un nuevo estudio firmado por los expertos Miquel A. Arnedo y Leticia Bidegaray-Batista, del Departamento de Biología Animal de la UB y el Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio).

 

Leticia Bidegaray-Batista y Miquel A. Arnedo, autores del trabajo investigador.
Leticia Bidegaray-Batista y Miquel A. Arnedo, autores del trabajo investigador.
25/01/2012

 Hace unos treinta millones de años, la cuenca del Mediterráneo occidental se abría por la colisión tectónica de las placas africana y euroasiática. Este episodio geológico, descrito en la bibliografía científica, fue el punto de partida de la diversificación de un grupo de arañas endémicas del Mediterráneo occidental, tal y como demuestra un nuevo estudio firmado por los expertos Miquel A. Arnedo y Leticia Bidegaray-Batista, del Departamento de Biología Animal de la UB y el Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio).

 

Este artículo, publicado en la revista BMC Evolutionary Biology, se centra en el estudio del género Parachtes, un grupo de arañas del suelo, de hábitos nocturnos y que durante el día se refugian bajo las piedras, entre la hojarasca o en la corteza de los árboles. Son unas cazadoras activas que persiguen a sus presas y que utilizan la seda solo para elaborar capullos donde protegerse. Este grupo, endémico del Mediterráneo occidental, incluye alrededor de una docena de especies que se encuentran en las islas Baleares, Córcega, Cerdeña y Sicilia, y en las penínsulas ibérica e itálica. Tal y como comenta Miquel A. Arnedo, director del Laboratorio de Artrópodos, Sistemática y Evolución de la UB, «este es el primer trabajo científico que demuestra que este importante proceso tectónico en el Mediterráneo tuvo un impacto relevante sobre la diversificación de la fauna local».

 
Revisando hipótesis sobre la geología en el Mediterráneo
 
Según la opinión de la experta Leticia Bidegaray-Batista, primera autora del artículo, «hasta ahora se había asumido la idea de que este proceso geológico originó la diversificación de grupos faunísticos que son endémicos del Mediterráneo occidental. Ahora bien, ningún estudio científico lo había confirmado. Con este trabajo, demostramos por primera vez que la distribución del género Parachtes va unida a los procesos tectónicos que se produjeron hace más de 25 millones de años en el Mediterráneo».
 
El mundo de las arañas ofrece un modelo de estudio de los procesos biológicos y evolutivos, y en este caso, permite revisar hipótesis todavía no contrastadas en un contexto temporal bien estudiado por la geología. Con técnicas de filogenia molecular para estudiar genes (tres nucleares y cinco mitocondriales), y utilizando puntos de calibrado externos (biogeográficos y a partir de fósiles), los expertos han confirmado que el origen de la diversificación de las arañas coincide en el marco temporal con este episodio de remodelación geológica del Mediterráneo, un área especialmente activa de la corteza terrestre durante el oligoceno.
 
Tras el movimiento de las placas tectónicas
 
«Probablemente, el ancestro del género Parachtes —explica Miquel A. Arnedo— llegó a la península Ibérica procedente de Oriente Medio a través de Europa. A partir de este punto, en el Mediterráneo se puede seguir la diversificación de los linajes mediante el movimiento de placas, como si fuera una cinta transportadora. También nos ha sorprendido el marco temporal de la separación detectada entre Córcega y Cerdeña: según el estudio, hubo una diferenciación bastante temprana de los linajes, a pesar de la proximidad geográfica de ambas islas».
 
Determinar los factores que han generado la biodiversidad es clave para identificar y entender la riqueza del patrimonio natural del Mediterráneo, una región biogeográfica en la que abundan los endemismos. Tal y como afirma Leticia Bidegaray-Batista, «la distribución del género Parachtes en el Mediterráneo nos planteaba varias hipótesis explicativas. En este caso concreto, el factor generador de estas especies ha sido la dinámica tectónica del Mediterráneo».
 
El trabajo publicado también aporta información sobre la tasa de sustitución de los marcadores genéticos utilizados habitualmente en filogenia, que permite establecer inferencias temporales mediante relojes moleculares. Las conclusiones se contraponen a otros estudios filogenéticos sobre la dinámica de la diversificación biológica en el Mediterráneo, en que se asocia el proceso de población de la mayoría de la fauna de las islas con la crisis salina del messiniense, un episodio espectacular de cambio oceánico que provocó la desecación del Mediterráneo al final del mioceno.
 
 
Más información:
 
Bidegaray-Batista, L.; Arnedo, M. A. «Gone with the plate: the opening of the Western Mediterranean basin drove the diversification of ground-dweller spiders». BMC Evolutionary Biology, octubre de 2011, 11, doi:10.1186/1471-2148-11-317.