Hallazgo en el Garraf de los restos de un elefante de 100.000 años de antigüedad

Los resots son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio .
Los resots son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio .
(06/08/2012)

Las excavaciones arqueológicas en la cueva del Rinoceront de Castelldefels, dirigidas por investigadores del Grupo de Investigación del Cuaternario-SERP (Seminario de Estudios e Investigaciones Prehistóricas) de la Universidad de Barcelona, han descubierto parte del esqueleto de un elefante joven, aproximadamente menor de 7 años. Estos restos, que tienen unos 100.000 años de antigüedad, son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio (orden de mamíferos que comprende los elefantes y los mamuts). Se trata de un hallazgo excepcional puesto que los restos completos de elefantes en cuevas son escasas en Cataluña.

Los resots son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio .
Los resots son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio .
06/08/2012

Las excavaciones arqueológicas en la cueva del Rinoceront de Castelldefels, dirigidas por investigadores del Grupo de Investigación del Cuaternario-SERP (Seminario de Estudios e Investigaciones Prehistóricas) de la Universidad de Barcelona, han descubierto parte del esqueleto de un elefante joven, aproximadamente menor de 7 años. Estos restos, que tienen unos 100.000 años de antigüedad, son los primeros que se encuentran en el macizo del Garraf de un esqueleto prácticamente completo de proboscidio (orden de mamíferos que comprende los elefantes y los mamuts). Se trata de un hallazgo excepcional puesto que los restos completos de elefantes en cuevas son escasas en Cataluña.

Hasta ahora, en esta zona —en torrentes y en el río Llobregat—se habían localizado partes aisladas del esqueleto, como por ejemplo las defensas, especialmente de mamut lanudo, que cronológicamente es más moderno. El hallazgo de este elefante, más antiguo que el mamut lanudo, evidencia que los elefantes vivían en la costa central catalana con anterioridad a la llegada del mamut, propio de periodos fríos. Los restos de este elefante, junto con otras especies, como por ejemplo numerosos restos de tortuga mediterránea (Testudo hermanni) —localizadas también en la cueva del Rinoceront—, ponen de manifiesto que en la costa central catalana las condiciones climáticas de hace 100.000 años eran cálidas.
De momento se han documentado las dos extremidades posteriores completas (fémur, tibia, huesos del tarso y falanges), así como la pelvis y la columna vertebral en conexión anatómica. Los trabajos en curso sólo han permitido excavar una parte de la superficie donde se encuentra este elefante. Los investigadores suponen que probablemente el resto del individuo está completo, pero no será hasta la próxima campaña arqueológica cuando se podrá excavar en su totalidad.

 

La cueva del Rinoceront es un yacimiento paleolítico con una larga secuencia cronológica que abraza desde los 200.000 hasta los 80.000 años aC. En la cuenca mediterránea son muy escasos los yacimientos de este periodo con una secuencia estratigráfica tan completa y, de momento, podemos decir que es el único en Cataluña de estas características.
En este yacimiento hay una gran cantidad de restos de fauna en un excelente estado de preservación. La fauna representada es característica de periodos cálidos (interglaciares). Además, se han recuperado varios restos líticos que sitúan en este yacimiento la presencia humana más antigua del área del macizo del Garraf.

 
Actualmente la cavidad se encuentra seccionada verticalmente debido al último frente de explotación de la cantera de ca nʼAymerich de Castelldefels. La extracción masiva de piedra calcárea ha desfigurado enormemente el relevo original y ha destruido la mayor parte de la cueva del Rinoceront, así como la entrada originaria. Por este motivo actualmente se accede a la cavidad por un andamio que permite desarrollar los trabajos arqueológicos.

 
Los restos recuperados hasta ahora en la cueva del Rinoceront hacen pensar que gran parte del yacimiento debía de funcionar como una madriguera de carnívoros, los cuales utilizaron la cavidad como refugio donde traían sus presas. Paralelamente, la presencia, más esporádica, de neandertales ha sido verificada en los niveles superiores de la cavidad.

 

Las excavaciones arqueológicas están encabezadas por los investigadores Joan Daura y Montse Sanz, miembros del Grupo de Investigación del Cuaternario-SERP de la UB, que dirige el catedrático de Prehistoria Josep M. Fullola. Las excavaciones están sufragadas por el Ayuntamiento de Castelldefels y el Servicio de Arqueología y Paleontología de la Generalitat de Cataluña, junto con otras entidades y empresas, como por ejemplo el Grupo de Investigaciones Históricas de Castelldefels (GREHIC), el Grupo Soteras y la Asociación de vecinos y vecinas independientes de Castelldefels (AAVVIC).