Un estudio sociológico ilustra un nuevo modelo de organización familiar en que tanto hombres como mujeres aumentan el tiempo dedicado a tareas domésticas

El estudio establece en 23,5 horas semanales la media del tiempo que las mujeres encuestadas dedican a tareas domésticas, cifra que es de 7,8 horas en el caso de los hombres.
El estudio establece en 23,5 horas semanales la media del tiempo que las mujeres encuestadas dedican a tareas domésticas, cifra que es de 7,8 horas en el caso de los hombres.
(24/07/2014)

Los investigadores del Departamento de Sociología y Análisis de las Organizaciones de la UB Albert Julià y Sandra Escapa han elaborado un estudio sobre la dedicación de las madres al trabajo doméstico a partir de una muestra de 1.926 familias. Entre las conclusiones destaca que existen dos tipos de relaciones de pareja en las que las mujeres están más cargadas de tareas domésticas: las que corresponden a modelos tradicionales en los que la madre no tiene un trabajo remunerado o el hombre es el sustentador principal de la familia y, en el otro extremo, parejas con un fuerte compromiso en las tareas domésticas por parte de los dos miembros. En este último caso, a menudo existe un proyecto familiar común basado en una importante implicación de ambos miembros de la pareja en las tareas domésticas y en las actividades con los hijos; es decir, los dos creen que el tiempo dedicado a estas tareas aporta beneficios cognitivos y emocionales, de forma que no se sigue una negociación basada en «lo que haga uno, no hace falta que lo haga el otro», sino que los dos hacen a la vez estos trabajos.

 

El estudio establece en 23,5 horas semanales la media del tiempo que las mujeres encuestadas dedican a tareas domésticas, cifra que es de 7,8 horas en el caso de los hombres.
El estudio establece en 23,5 horas semanales la media del tiempo que las mujeres encuestadas dedican a tareas domésticas, cifra que es de 7,8 horas en el caso de los hombres.
24/07/2014

Los investigadores del Departamento de Sociología y Análisis de las Organizaciones de la UB Albert Julià y Sandra Escapa han elaborado un estudio sobre la dedicación de las madres al trabajo doméstico a partir de una muestra de 1.926 familias. Entre las conclusiones destaca que existen dos tipos de relaciones de pareja en las que las mujeres están más cargadas de tareas domésticas: las que corresponden a modelos tradicionales en los que la madre no tiene un trabajo remunerado o el hombre es el sustentador principal de la familia y, en el otro extremo, parejas con un fuerte compromiso en las tareas domésticas por parte de los dos miembros. En este último caso, a menudo existe un proyecto familiar común basado en una importante implicación de ambos miembros de la pareja en las tareas domésticas y en las actividades con los hijos; es decir, los dos creen que el tiempo dedicado a estas tareas aporta beneficios cognitivos y emocionales, de forma que no se sigue una negociación basada en «lo que haga uno, no hace falta que lo haga el otro», sino que los dos hacen a la vez estos trabajos.

 

El estudio, publicado en la revista Papers, establece en 23,5 horas semanales la media del tiempo que las mujeres encuestadas dedican a tareas domésticas, cifra que es de 7,8 horas en el caso de los hombres. Uno de los resultados de la investigación es que una vez que el hombre dedica más de 10 horas semanales a las tareas domésticas, ello deja de corresponderse con una disminución de las horas por parte de la mujer. Bien al contrario: a partir de las 15 horas semanales de dedicación del padre, las de la madre superan las 23,5 horas de media que apunta el estudio. Así, tal como remarcan los autores de la investigación, «aunque los padres estén involucrados en las tareas domésticas, las madres siguen dedicándoles una proporción más elevada del tiempo».

Otros datos del estudio son que las madres que pasan más tiempo haciendo las tareas del hogar son las que no tienen un trabajo remunerado (alrededor de 35 horas por semana), seguidas por las que tienen menos ingresos, que dedican una media de 32 horas por semana. La mayor diferencia entre las horas que dedican a las tareas domésticas hombres y mujeres se encuentra en las familias tradicionales en las que solo el hombre tiene un trabajo remunerado. En estos casos, la dedicación al hogar de las mujeres es casi siete veces más elevada que la de los hombres. Cabe añadir que, cuando los dos miembros de la pareja tienen un trabajo remunerado, la media de horas de dedicación a las tareas domésticas del hombre es de 8,2 y la de la mujer, de 20,6. Incluso cuando la mujer es la sustentadora principal del hogar, ella dedica más tiempo al trabajo doméstico (20,1 horas frente a las 10,6 del hombre).

Albert Julià y Sandra Escapa han llevado a cabo esta investigación en el marco del Instituto de Infancia y Mundo Urbano (CIIMU), un consorcio formado por el Ayuntamiento de Barcelona, la Diputación de Barcelona, la UB, la UAB y la UOC. Los dos investigadores forman parte del Grupo de Investigación Analysis of Inequalities and New Social Risks (AINSR).