Encuentro de científicos y gestores para evaluar el estado ecológico de los ríos temporales

El proyecto europeo LIFE TRivers está liderado por investigadores del Departamento de Ecología de la UB.
El proyecto europeo LIFE TRivers está liderado por investigadores del Departamento de Ecología de la UB.
Investigación
(03/02/2016)

Los ríos temporales son aquellos con interrupciones recurrentes de su caudal, que incluso llega a secarse en determinadas épocas del año. A pesar de ser muy comunes en la cuenca del Mediterráneo y tener un gran valor para la conservación de la biodiversidad, es muy difícil establecer el estado ecológico de este tipo de ríos; ya que gran parte de las herramientas de análisis están pensadas para los ríos permanentes.

El proyecto europeo LIFE TRivers, financiado por la Unión Europea, liderado por la UB, y en el que participan el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC), la Agencia Catalana del Agua (ACA) y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), tiene como meta aportar herramientas para diagnosticar correctamente el estado ecológico de los ríos temporales y mejorar su gestión de acuerdo con los objetivos de la Directiva marco del agua (DMA) de la Unión Europea. Para ello, se ha desarrollado el software TREHS (Temporary Rivers Ecological and Hydrological Status). Gestores y expertos involucrados en la gestión fluvial han podido ensayar por primera vez esta herramienta durante la segunda reunión del proyecto, que tuvo lugar el 28 de enero en la sede central de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), en Murcia.

 

El proyecto europeo LIFE TRivers está liderado por investigadores del Departamento de Ecología de la UB.
El proyecto europeo LIFE TRivers está liderado por investigadores del Departamento de Ecología de la UB.
Investigación
03/02/2016

Los ríos temporales son aquellos con interrupciones recurrentes de su caudal, que incluso llega a secarse en determinadas épocas del año. A pesar de ser muy comunes en la cuenca del Mediterráneo y tener un gran valor para la conservación de la biodiversidad, es muy difícil establecer el estado ecológico de este tipo de ríos; ya que gran parte de las herramientas de análisis están pensadas para los ríos permanentes.

El proyecto europeo LIFE TRivers, financiado por la Unión Europea, liderado por la UB, y en el que participan el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC), la Agencia Catalana del Agua (ACA) y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), tiene como meta aportar herramientas para diagnosticar correctamente el estado ecológico de los ríos temporales y mejorar su gestión de acuerdo con los objetivos de la Directiva marco del agua (DMA) de la Unión Europea. Para ello, se ha desarrollado el software TREHS (Temporary Rivers Ecological and Hydrological Status). Gestores y expertos involucrados en la gestión fluvial han podido ensayar por primera vez esta herramienta durante la segunda reunión del proyecto, que tuvo lugar el 28 de enero en la sede central de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), en Murcia.

 

Determinar si un río es temporal de manera natural

Los ríos temporales pasan por diferentes etapas que transitan desde el flujo abundante de la primavera hasta llegar a secarse completamente, pasando por las pozas de agua desconectadas. Esta variabilidad hace muy difícil caracterizar el estado ecológico con las metodologías habituales. «Uno de los problemas más importantes es saber en qué momento se debe muestrear; ya que el caudal de agua es intermitente dependiendo de la época del año, la meteorología y también los efectos de la intervención humana», explica Narcís Prat, catedrático del Departamento de Ecología, director del Grupo de Investigación Freshwater Ecology and Management (FEM) de la UB y coordinador del proyecto TRivers.

Para ayudar a describir la evolución de las características hidrológicas de cada río en función del tiempo y determinar de ese modo la probabilidad de que se encuentre seco en diferentes momentos del año, TREHS incorpora los datos históricos disponibles sobre los caudales de cada río, así como datos de simulaciones a partir de modelos de escorrentía de agua. Además, permite obtener o completar esta información a partir de entrevistas con vecinos. «Estas estadísticas nos permitirán determinar el estado hidrológico del río, saber si es temporal de forma natural o no, y ayudar en la selección del calendario de muestreo más adecuado al régimen temporal y también en la interpretación de los las muestras biológicas», explica Francesc Gallart, investigador del IDAEA-CSIC.

En este sentido, durante la reunión también se presentaron los resultados de los muestreos de campo realizados en 2015, tanto los datos hidrológicos como los resultados preliminares de los datos biológicos. «Los datos indican una clara disminución de la calidad biológica a partir del momento en que el río deja de fluir y solamente quedan pozas», explica Núria Cid, investigadora posdoctoral del Departamento de Ecología de la UB.

Durante la jornada, también se presentó una aproximación para la evaluación del estado de los ríos temporales efímeros (ramblas que están sin agua la mayor parte del año), a cargo de Teodoro Estrela, jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica de la CHJ.

 

Taller y visita sobre el terreno

Representantes de la Confederación Hidrográfica del Segura, la Confederación Hidrográfica del Júcar, la Agencia Catalana del Agua, la Universidad de Murcia, la Fundación Nueva Cultura del Agua y la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente, entre otras instituciones, han participado en una jornada que ha sido muy práctica. Los participantes han podido utilizar la última versión de la herramienta TREHS, analizar sus propios datos de ríos temporales y resolver las dudas sobre el funcionamiento del software. Además, los participantes pudieron visitar el día anterior una de las masas de agua temporales de la provincia de Murcia: el río Chícamo, declarado recientemente reserva fluvial, y que se ve afectado por detracciones del riego que lo hacen desaparecer durante su recorrido.

Según los participantes, la jornada fue muy satisfactoria y sirvió para iluminar las problemáticas que encuentran los gestores a la hora de definir objetivos medioambientales y evaluar el estado ecológico de los ríos temporales. «Todavía están muy poco reconocidos; pero por su interés ecológico se deberían valorar más, proteger y gestionar adecuadamente», concluye Núria Cid.