Nuevos resultados de la misión arqueológica en la ciudad egipcia de Oxirrinco
La reciente misión arqueológica en la antigua ciudad egipcia de Oxirrinco ha desvelado la historia de la columna de homenaje al emperador romano de Oriente Focas, ubicada en el yacimiento. Impulsada por la Universidad de Barcelona, la Sociedad Catalana de Egiptología (SCE), la Universidad de Montpellier, la Fundación Palarq y el Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña, la misión ha descubierto otros restos: distintas aulas funerarias directamente relacionadas con una pequeña iglesia y tumbas de fosa, y un muro circular de ladrillos cocidos cuya naturaleza y función todavía se desconocen. «No se pueden sacar conclusiones de esta estructura circular hasta que no acabe la excavación; pero en todo caso no es una construcción banal», explica el director de la misión, el profesor emérito de la UB y presidente de la SCE, Josep Padró.
La reciente misión arqueológica en la antigua ciudad egipcia de Oxirrinco ha desvelado la historia de la columna de homenaje al emperador romano de Oriente Focas, ubicada en el yacimiento. Impulsada por la Universidad de Barcelona, la Sociedad Catalana de Egiptología (SCE), la Universidad de Montpellier, la Fundación Palarq y el Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña, la misión ha descubierto otros restos: distintas aulas funerarias directamente relacionadas con una pequeña iglesia y tumbas de fosa, y un muro circular de ladrillos cocidos cuya naturaleza y función todavía se desconocen. «No se pueden sacar conclusiones de esta estructura circular hasta que no acabe la excavación; pero en todo caso no es una construcción banal», explica el director de la misión, el profesor emérito de la UB y presidente de la SCE, Josep Padró.
Originariamente, la llamada columna de Focas había formado parte de un tetrapilón, un tipo de monumento helenístico de planta cuadrada con columnas en cada extremo. La columna de Focas fue la única del conjunto que quedó en pie y, según los hallazgos recientes, se aprovechó para colocar sobre ella la base de un monumento, «verosímilmente, una estatua de Focas», explica Josep Padró. La columna se descubrió en 1914, y la reciente misión arqueológica la estudiará para determinar su procedencia y función.