La Universidad de Barcelona supera el millar de solicitudes de patentes

Imagen de un laboratorio.
Imagen de un laboratorio.
Investigación
(20/03/2018)

En 1989 la Universidad de Barcelona comenzó a gestionar —primero a través del Centro de Patentes, y más adelante junto con la Fundación Bosch i Gimpera— la protección por patente de los resultados de la investigación llevada a cabo en la Universidad. La primera patente de la UB se solició el mismo 1989 bajo el nombre «Reactor nuclear electroquímico híbrido basado en la fusión fría híbrida (H,D) en una matriz sólida», que corresponde a la patente española n.º ES2015732.

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20/03/2018

En 1989 la Universidad de Barcelona comenzó a gestionar —primero a través del Centro de Patentes, y más adelante junto con la Fundación Bosch i Gimpera— la protección por patente de los resultados de la investigación llevada a cabo en la Universidad. La primera patente de la UB se solició el mismo 1989 bajo el nombre «Reactor nuclear electroquímico híbrido basado en la fusión fría híbrida (H,D) en una matriz sólida», que corresponde a la patente española n.º ES2015732.

El pasado mes de enero se superó el millar de solicitudes de patentes presentadas —ya se han gestionado 1.013—, siempre con la Universidad de Barcelona como solicitante o como cosolicitante. El ejercicio 2017 se cerró con doce solicitudes de patentes europeas.

Durante estos 29 años se han firmado 123 acuerdos de licencias, que han permitido acercar al mercado un gran número de tecnologías de la Universidad de Barcelona, ​​como por ejemplo Coolinside, un dispositivo quirúrgico que reduce las pérdidas de sangre durante las operaciones de cáncer hepático y que se utiliza ya en más de una treintena de hospitales. Por otra parte, la licencia de tecnologías también ha permitido crear veintidós spin-offs participadas por la UB y surgidas a partir de proyectos de investigación de la Universidad, como Enlighting Technologies SL, Bluephage SL y DBGen SL, esta última constituida el pasado mes de febrero.

Solo desde 2004, la licencia de tecnologías ha originado para la Universidad de Barcelona un retorno de más de 2,8 millones de euros.