III Congreso Internacional de sociología de la AVS (23-25 de enero):
“Treballadores de la Cura a Espanya: Invisibilitat i Estratègies en el Context de la Pandèmia”Anna Morero Beltrán, Rosa Ortiz Monera, Maria Antònia Carbonero Gamundí, Lara Borin Campoli.
Esta comunicación presenta parte de los resultados del análisis cualitativo realizado en el marco del proyecto I+D «La Reorganización Social del Cuidado durante la Pandemia», financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación (PID2020-118801RB-I00). El objetivo del proyecto es profundizar en la comprensión de la organización social del cuidado durante la pandemia en España. Se llevaron a cabo un total de veintinueve entrevistas en profundidad con mujeres que tenían responsabilidades de cuidado durante este período, así como ocho grupos de discusión con organizaciones de la sociedad civil. Los resultados que presentamos se centran en el impacto de la pandemia en las mujeres que trabajaban en el sector del cuidado. Nuestro análisis se basa en siete entrevistas con trabajadoras del cuidado y domésticas, así como en las aportaciones de los grupos de discusión. Sus testimonios revelan que, aunque la pandemia era un momento potencial para reconocer la vulnerabilidad de la sociedad y la importancia crítica del trabajo de cuidado, las empleadas del sector del cuidado se sentían desvaloradas e ignoradas, sin ser inicialmente reconocidas como trabajadoras esenciales. Además no recibieron el mismo nivel de reconocimiento social que otros sectores. También resaltamos cómo la precariedad y la explotación que sufrieron las mujeres de este sector se agravaron durante la pandemia. Utilizando un enfoque interseccional, mostramos que la desvalorización y precarización de este trabajo no sólo están vinculadas al género, sino también a factores como el origen, la etnia y el estatus migratorio. En ese contexto, el apoyo comunitario jugó un papel crucial en la asistencia al sector.
“Redes de apoyo mutuo durante la Covid19: mediación y amortiguación de las desigualdades de género y classe” Clara Camps, Ignasi Bernat i Elisabet Almeda
Las redes de apoyo mutuo han funcionado como mediadoras del aumento de las desigualdades de género y clase causadas a raíz de la Covid19. Ante las estrategias desplegadas por parte del Estado para hacer frente a la crisis basada básicamente en las medidas de confinamiento, a los ERTO’s, y a una ausencia temporal de la función reproductora social del Estado (escuelas, servicios sociales, casales de la gente grande, etc.) se produce una rehogarización de los trabajos de cuidados. Esta reclusión forzada en el hogar a raíz de los confinamientos pone de nuevo en el centro a la familia nuclear como garante de la reproducción social. A pesar de las transformaciones familiares de las últimas décadas, nos encontramos con un fuerte repunte y auge de la división sexual del trabajo, de las desigualdades de género y de la violencia machista. En este marco, las clases sociales que no pueden resolver sus necesidades a través de la rehogarización por su posición dentro de un mercado de trabajo precario e informal son las que necesitarán más de las redes de apoyo mutuo, de las instituciones religiosas y de la ayuda de la comunidad. Esta crisis de reproducción social tendrá dos vertientes a qué las redes de apoyo mutuo intentarán dar respuesta: económicas y de cuidados. Por lo tanto, a través de la comprensión de las funciones y de los usos que se hizo las redes de apoyo mutuo observamos cómo los procesos de rehogarización cogen formas y prácticas diferentes en función de la clase social y de la posición económica que se ocupa en el mercado de trabajo. Es así, como podemos comprender las redes de apoyo mutuo como mediadoras y amortiguadoras de las desigualdades de género y clase. Precisamente, la rehogarización había descargado ciertas funciones en la familia y en la división social del trabajo. Esto debe ser enmarcado en la dialéctica Estado-mercado-familia-comunidad y cómo se van desplazando ciertas cargas de reproducción social. Las redes de apoyo mutuo funcionaron como el anverso del orden social y de género de nuestra sociedad. Lo resultados provienen de: Domínguez Amorós, Mario; Almeda Samaranch, Elisabet La reorganización social del cuidado en pandemia: Bienestar, comunidad y género. PID2020-118801RB-I00. 01/09/2021-31/08/2025.
“Procesos de cuidado, trayectorias laborales y reorganización social” Màrius Domínguez i Amorós (coordinador de la mesa de trabajo)
“La reorganización social de los cuidados durante la pandemia: género, desigualdad y respuestas comunitarias” Màrius Domínguez i Amorós i Sandra Obiol
El objetivo de esta comunicación es presentar algunos de los resultados de la investigación sobre «La reorganización social de los cuidados durante la pandemia: Bienestar, Comunidad y Género», realizada por varios grupos de investigación de Catalunya, Euskal Herria, País Valencià y Balears. Pretendemos analizar los impactos sociales de la COVID-19 sobre las necesidades de cuidados de los hogares, sus consecuencias sobre las desigualdades de género y la reorganización social del trabajo de cuidados, así como el papel de las organizaciones y redes comunitarias de apoyo y solidaridad. Nuestra hipótesis general es que la pandemia de COVID-19 y las medidas asociadas han provocado el retorno al hogar de ciertas necesidades de cuidados que antes se externalizaban, modificando las estrategias individuales, familiares y colectivas de gestión del trabajo de cuidados. Este cambio ha provocado un agravamiento de la crisis de los cuidados, consolidando y perpetuando las desigualdades sociales, en particular las que afectan al bienestar de los grupos más vulnerables, y también ha impulsado la aparición de iniciativas de solidaridad clave a nivel comunitario. Es evidente la importancia del trabajo de cuidados en el sostenimiento de las actuales estructuras sociales y los retos a los que nos enfrentamos para redistribuir estas tareas hacia un modelo más justo e igualitario. Desde una perspectiva crítica y no androcéntrica, proponemos una estrategia metodológica mixta: por un lado, una aproximación cuantitativa a través de la sistematización y análisis de fuentes de datos secundarias relacionadas con la gestión del tiempo y el trabajo de cuidados, y por otro, una aproximación cualitativa que implica entrevistas en profundidad a mujeres con responsabilidades de cuidados y grupos de discusión con entidades sociales de apoyo a los cuidados. Esta investigación contribuye a una comprensión más profunda de la reconfiguración del cuidado, particularmente en el contexto de unidades familiares cada vez más diversas y complejas.
Segundo Congreso Latinoamericano de Estudios de Género y Cuidados (19-21 de marzo): Miradas Latinoamericanas al Cuidado.
“La articulación de indicadores micro y macrosociales en el análisis comparativo de las desigualdades de género en el trabajo de cuidados” Màrius Domínguez i Amorós
Las transformaciones de las sociedades occidentales contemporáneas, desde el impacto de la crisis económica, han comportado cambios en el modelo de organización social y, concretamente, en las formas de dar respuesta a las necesidades de cuidados y su provisión. El debilitamiento del estado del bienestar, con políticas de ajuste estructural que afectan la oferta de servicios públicos, y la inaccesibilidad de las familias a los servicios que ofrece el mercado, han aumentado el trabajo de cuidados no remunerado realizado en el interior de los hogares.
Estudios recientes muestran, entre sus resultados, la debilidad explicativa de aquellas variables relacionadas con las perspectivas teóricas microsociales así como la importancia de incorporar aspectos “subjetivos” relacionados con las normas y valores sociales de “construcción de género”. Esto es, dando validez a las aproximaciones que confirman la necesidad de incorporar tanto la perspectiva teórica de los «roles de género», así como los factores macrosociales (estructurales, institucionales y culturales) en el análisis de las brechas de género en el trabajo de cuidados.
La relevancia de analizar cómo los factores institucionales y culturales pueden influir en el trabajo no remunerado, permite avanzar en líneas de análisis en diferentes direcciones: como afectan el significado y la magnitud de los efectos de las características individuales en la división sexual del trabajo; y la incidencia de políticas sociales que afecten la estructura del empleo y la prestación de servicios públicos de asistencia social.
El objetivo de esta ponencia es identificar y analizar los principales factores que, tanto a nivel individual como contextual, pueden estar relacionados con la brecha de género en la realización y distribución del trabajo no remunerado y de cuidados dentro de los hogares. Específicamente se presenta la operacionalización de un sistema de indicadores sociales que permita el análisis del impacto de estas formas de organización social del cuidado y bienestar. La propuesta de indicadores sociales se puede utilizar en análisis comparativos entre diferentes países teniendo en cuenta la dinámica social, la especificidad y la comparabilidad de los contextos sociohistóricos y culturales.
Mediante el análisis de las encuestas del uso del tiempo en Argentina, Chile, Uruguay y España, la ponencia pretende ser un aporte a los estudios comparativos, avanzando en el conocimiento de los factores explicativos de la brecha de género en el tiempo de cuidados en el interior de los hogares (i) desglosando las condiciones macrosociales en sus dimensiones fundamentales; (ii) mostrando la influencia de los recursos individuales; e (iii) incorporando algunos indicadores subjetivos que están relacionados con la brecha de género en la asignación y distribución este trabajo.
VIII Seminario Internacional de Desigualdad y Movilidad Social en América Latina (24-26 de marzo).
“Precio, coste y remuneración del trabajo doméstico: un estudio de la plataforma digital brasileña Parafuzo” Màrius Domínguez i Amorís, Lara Campoli
Introducción: presentación y objetivos
Brasil es el país con mayor número de trabajadoras domésticas del mundo. El empleo doméstico representa la mayor agrupación ocupacional de las mujeres brasileñas, especialmente de las mujeres negras con bajos niveles de educación y de familias pobres. En 2019, había 6,3 millones de personas empleadas allí, el 92% de las cuales eran mujeres (IBGE, 2020).
Las trabajadoras domésticas prestan servicios esenciales para el mantenimiento del hogar y de las familias. A pesar del importante valor de estos empleos en la economía y para el desarrollo social de las poblaciones, ese trabajo se caracteriza por la informalidad, la inseguridad y la explotación de profesionales que a menudo se encuentran sin protección legal.
Recientemente, el trabajo doméstico remunerado ha visto la entrada de intermediarios digitales. Las investigaciones sobre la plataformización de los servicios muestran que las implicaciones del trabajo de plataforma son ambivalentes. Por un lado, existe la posibilidad de que los trabajadores obtengan mayores resultados combinados con horarios más flexibles. Por otro, se produce una pérdida de poder como consecuencia de las prácticas de control, vigilancia y gestión desarrolladas por las plataformas (Hunt; Machingura, 2016).
Aunque algunos aspectos de estas observaciones se aplican a todos los tipos de plataformas, otros requieren un examen detallado de las características particulares de cada sector. Un análisis específico de los impactos de las plataformas sobre las trabajadoras domésticas debe tener en cuenta las formas de desigualdad existentes que estructuran ese trabajo, el tipo de actividad que se realiza y las estructuras específicas de los mercados laborales existentes (Van Doorn, 2017).
A la luz de las transformaciones en el mundo del trabajo provocadas por el surgimiento y crecimiento de las plataformas digitales, este trabajo tiene como objetivo, por lo tanto, identificar y analizar los mecanismos desarrollados y utilizados por Parafuzo, empresa brasileña líder en el segmento de plataformas de intermediación de servicios domésticos, para definir los precios de los servicios ofrecidos y la remuneración de las trabajadoras allí registradas, para transferir los costes a ellas y organizar la oferta de trabajo. Desde una perspectiva crítica, esta investigación pretende contribuir a la comprensión de los riesgos y oportunidades que las plataformas representan para las trabajadoras domésticas.
Planteamiento teórico-metodológico
El trabajo se basa en la literatura sobre el proceso de plataformización del trabajo, destacando los estudios críticos de este proceso en el sector de cuidados, como los de Hunt y Machingura (2016); Van Doorn (2017); Ticona y Mateescu (2018); Tandon y Rathi (2021) y Fetterolf (2022).
Se adopta aquí la definición de cuidado propuesta por Pérez Orozco (2014, p. 62): “Cuidados son las actividades que regeneran cotidiana y generacionalmente el bienestar físico y emocional de las personas”. Estas actividades incluyen las tareas de interacción directa entre las personas, la gestión de los afectos y de las relaciones sociales y la producción y reproducción de los bienes materiales necesarios a nuestro mantenimiento físico (las tareas habitualmente asociadas al trabajo doméstico, como la limpieza de las casas).
La definición adoptada para el concepto de plataformas digitales, a su vez, corresponde a una combinación de la concepción de Van Dijck, Poell y Waal (2019) con la de Krein y Manzano (2022). Los primeros autores definen las plataformas como “(re-)programmable digital infrastructures that facilitate and shape personalised interactions among end-users and complementors, organised through the systematic collection, algorithmic processing, monetisation, and circulation of data” (Poell; Nieborg; Van Dijck, 2019, p. 03).
Como entienden Krein e Manzano (2022), más que facilitar o mediar en las interacciones entre los usuarios, las plataformas desempeñan un papel activo en el control y la gestión de la mano de obra. Además de estipular las condiciones necesarias para la inclusión, permanencia o exclusión de cada trabajador, las plataformas pueden definir distintos aspectos del trabajo, como la remuneración y el horario laboral. Es compartiendo de esta visión que analizamos la Parafuzo desde una perspectiva crítica.
Para examinarla, analizamos su página web, su canal de YouTube y realizamos simulaciones en la aplicación. Debido a la escasez de datos disponibles sobre la empresa, complementamos el análisis con una entrevista piloto realizada a una trabajadora registrada en la plataforma. El objetivo de la entrevista es proporcionar un primer esbozo del funcionamiento de la plataforma a partir del uso y de la experiencia de la trabajadora.
Resultados: principales aportaciones, resultados y conclusiones
El principal servicio que ofrece Parafuzo es la limpieza residencial, pero la plataforma también presta servicios de limpieza comercial, planchado y montaje de muebles. La empresa fue fundada en 2014 y hoy opera en más de 160 ciudades de Brasil. En 2019, la plataforma contaba con 3.000 profesionales registrados y, desde entonces, no ha habido actualizaciones del número.
Los trabajos bajo control de Parafuzo pueden clasificarse como «on location based» (OIT, 2021), ya que se trata de trabajos realizados de forma presencial en lugares concretos. También se categorizan como “work-on-demand via apps” (De Stefano, 2016) y sus trabajadores como “just-in-time”, condición en la que, aunque estén constantemente a disposición de la empresa para trabajar, parte de su jornada laboral no se reconoce como tiempo de trabajo, ya que solo se utiliza y remunera en la medida exacta de la demanda (Abílio, 2020).
Según la empresa, Parafuzo es una plataforma que actúa como «facilitadora» y «en colaboración con miles de profesionales» conectando dos extremos: «los usuarios finales que necesitan ayuda para limpiar sus casas y oficinas y los profesionales de la limpieza que realizan esta actividad». En la práctica, sin embargo, es la empresa la que determina concretamente el valor del trabajo y la remuneración de los profesionales y que define y gestiona la distribución de los servicios.
El precio de los servicios depende del tipo de limpieza y del número de horas que se desee contractar. Al solicitar una modalidad de limpieza, el cliente debe informar su dirección, el tipo de alojamiento, el número de habitaciones y si desea solicitar tareas adicionales que no estén incluidas en la limpieza solicitada. A partir de esto, una «calculadora inteligente» estima el tiempo necesario para la limpieza y, así, el precio del servicio.
Los cálculos utilizados para fijar los precios se actualizan diariamente en función de las opiniones de los clientes y los comentarios realizados en las avaluaciones. Se afirma que los precios establecidos incluyen el coste del transporte y la comida del profesional, lo que discrepa la trabajadora entrevistada, para quien el billete de autobús y el coste de la comida forman parte del coste que implica el trabajo.
Los pagos por los servicios se realizan mediante transferencia bancaria, siempre en la semana siguiente a la trabajada. Para recibir el pago, los profesionales registrados deben tener una cuenta bancaria a su nombre en uno de los bancos aceptados por la plataforma. El importe recibido corresponde a la suma de todas las limpiezas realizadas durante la semana, menos la cantidad abonada por la empresa. No se dispone de información reciente sobre qué parte del dinero pagado queda en manos de la empresa.
Parafuzo también cobra una cuota de afiliación de R$90 (16,76€), descontada en tres cuotas de R$30 (5,60€), en las tres primeras limpiezas realizadas, así como una cuota mensual de R$29,90. Otro coste corresponde a los materiales de limpieza utilizados en la modalidad de «Limpieza Post-Obra» y «Limpieza Pre-Mudanza», en las que son los profesionales los que deben comprar y llevar los materiales utilizados.
No es novedad que el trabajo doméstico se caracterice por la invisibilidad, la precariedad, los bajos ingresos y la escasa protección social. Lo que es nuevo es que, con las plataformas, estos elementos son controlados de forma organizada. Desprotegidas socialmente, las trabajadoras no sólo viven en la incertidumbre sobre su propio salario y carga de trabajo, sino que están subordinadas a empresas que organizan, gestionan y controlan su trabajo. Aunque la plataforma Parafuzo se presenta como un «facilitador» que opera en «asociación» con las trabajadoras registradas, la empresa define concretamente el valor de los servicios que ofrecen, así como su remuneración, transfiriéndoles, siempre que es posible, los costes y riesgos que implica su trabajo.
INCASI Conference (21-22 de mayo): Public Policies, Reforms and Innovation in Europe and Latin America.
“The Social Reorganization of Care in Pandemic Times: Public Policies, Gender Inequalities, and Community Strategies in the Spanish State” Màrius Domínguez i Amorós, Carme Vivancos-Sánchez and Elisabet Almeda Samaranch
La crisis sociosanitaria causada por la propagación de la COVID-19 ha expuesto las consecuencias de la mercantilización de la vida pública y las relaciones humanas, enfatizando tanto la importancia como la vulnerabilidad de la organización social de los cuidados, tarea que llevan a cabo predominantemente las mujeres. Este artículo examina el impacto de la pandemia en los cuidados, abordando los retos estructurales, los cambios en las dinámicas familiares y laborales y las estrategias comunitarias emergentes y preexistentes dentro del Estado español. Basándonos en el proyecto de I+D «La Reorganización Social de los Cuidados en la Pandemia: Bienestar, Comunidad y Género-RESCUPAN» (PID2020-118801RB-I00), hemos desarrollado un enfoque metodológico mixto, que incluye entrevistas semiestructuradas con mujeres que llevan cargas de cuidados y grupos Euskadi e Islas Baleares) para la parte cualitativa, mientras que utilizamos el Estado español como referencia territorial con una estrategia comparativa utilizando datos de la UE-27 para la parte cuantitativa. Los hallazgos destacan cambios significativos en la organización del hogar antes y después de la pandemia, que impactan en el tiempo personal y familiar. También descubren experiencias de conflicto y bienestar moldeadas por desigualdades estructurales y contextos de atención específicos. Además, el estudio revela que las políticas gubernamentales priorizaron las soluciones asistenciales y biomédicas, descuidando el papel central de la atención y perpetuando una carga desproporcionada sobre las mujeres, especialmente aquéllas en condiciones precarias, como las trabajadoras migrantes o las madres solteras. Sin embargo, las iniciativas de apoyo comunitario y la solidaridad vecinal surgieron como soluciones parciales a las carencias estatales, demostrando cómo las redes sociales preexistentes facilitaron respuestas locales efectivas y mitigaron parcialmente las desigualdades sociales. El estudio pretende proporcionar herramientas para una mejor comprensión de la situación actual, evaluar la calidad de las políticas públicas y analizar las estrategias de los actores económicos y sociales. Subraya la necesidad de que las políticas públicas integren programas con perspectiva de género para garantizar la sostenibilidad del sistema de atención. En definitiva, este trabajo contribuye al debate internacional sobre los retos a los que se enfrentan los regímenes de bienestar, ofreciendo reflexiones críticas sobre cómo avanzar hacia sistemas más inclusivos y sostenibles en un mundo pospandémico marcado por crisis recurrentes y desigualdades persistentes.
X Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales (9-12 de junio): Horizontes y transformaciones para la igualdad. Democracias, resistencias, comunidades, derechos y paz.
“La reorganizacion social del cuidado en pandemia en España: un retorno al hogar” Màrius Domínguez Amorós, Elisabet Almeda Samaranch i Carme Vivancos
La ponencia va a presentar la investigación que se está realizando en el Estado Español (2021-2024) sobre la reorganización social del cuidado en pandemia (PID2020-118801RB-I00, Agencia Estatal de Investigación de España). El objetivo general del proyecto es analizar el impacto de la COVID-19 sobre las necesidades de cuidados en los hogares, y las consecuencias que ello comporta en las desigualdades de género y en la reorganización social de los trabajos de cuidados en el Estado español, haciendo especial hincapié en el papel de las redes comunitarias de apoyo y solidaridad. La hipótesis general de la investigación es que la pandemia de la COVID-19 y las medidas sociosanitarias asociadas significan un retorno al hogar de algunas necesidades de cuidado que previamente se habían externalizado, modificando las estrategias para dar respuesta a los trabajos de cuidado y atención. Esta reorganización de los cuidados conlleva un doble movimiento. Por un lado, se asiste a un recrudecimiento de la crisis de los cuidados, ya que se acentúan algunas de las tendencias que se estaban produciendo desde la recesión de 2008-2009, consolidando y perpetuando las desigualdades sociales y afectando de forma más gravosa el bienestar de las mujeres, y haciendo más claves las iniciativas de solidaridad a nivel comunitario. Por otro lado, se evidencia la relevancia de los trabajos de cuidado, para mantener la sustentabilidad social, que supone una reasignación de tareas hacia un modelo más igualitario entre mujeres y hombres, y una oportunidad de cambio en las normas, valores e imaginarios sociales que sustentan la organización social del cuidado.
En este marco general, tres son los objetivos de la investigación que se está realizando. El primer objetivo ha sido el analizar el impacto de la COVID-19 sobre las necesidades de cuidados en los hogares y las consecuencias que ello comporta en el conjunto de la organización social de los trabajos de cuidados en el Estado español. En este sentido, se han obtenido en primer lugar, evidencias empíricas, de las estrategias de los hogares en satisfacer las necesidades de cuidados en un contexto precovid 19, y en dónde se generalizaron los programas de austeridad tras la crisis económica y financiera (2008-2009), que comportaron tanto un aumento de la mercantilización de los servicios de cuidados, como una rehogarización y una reestructuración del tercer sector como proveedor de cuidado. Y, en segundo lugar, analizar como todo ello ha cambiado a raíz del inicio de la pandemia en febrero-marzo 2020.
En segundo lugar, se ha profundizado en el impacto de la epidemia de la COVID-19 en las desigualdades sociales, especialmente las de género a raíz de los procesos de (re)organización de los cuidados. Partiendo de la idea de que el género debe entenderse en su complejidad y en interconexión con otras condiciones de identificación y discriminación social según un vector multidimensional (los ingresos, la clase, la situación del mercado laboral, la situación migratoria, la etnicidad, las modalidades familiares y las características del hogar); así como en las dimensiones de las necesidades de dependencia y atención especial.
En tercer lugar, se ha explorado la articulación de las estrategias de cuidados en relación con las redes e interacciones sociales de apoyo y solidaridad; y analizar la respuesta de la sociedad a partir de las redes de apoyo cívicas y comunitarias. En este sentido, se ha obtenido información sobre los recursos que utiliza la ciudadanía en el contexto de confinamiento y pandemia, tanto formales (ayudas públicas, políticas sociales, servicio de salud, ayudas de entidades del tercer sector etc.) como informales (redes familiares y vecinales, entidades sociales de apoyo y autogestión, prácticas informales).
La metodología de investigación ha seguido una estrategia de triangulación secuencial. Una primera fase cuantitativa a partir de las encuestas existentes sobre las consecuencias del covid (Encuesta on-line Living, working and COVID-19, Eurofound, 2020; Estudio sobre Bienestar Emocional y Estudio sobre Efectos y Consecuencias del Coronavirus, Centro de Investigaciones Sociológicas de España, 2020). A partir del análisis cuantitativo, se definen tipologías de organización social del cuidado según los modelos de provisión y las estrategias familiares que permiten aplicar un diseño tipológico de la muestra cualitativa. Concretamente, siguiendo el diseño tipológico identificado en la parte cuantitativa se realizan entrevistas en profundidad aproximadamente a unas 30-35 personas, entre personas individuales, de entidades comunitarias de apoyo o de profesionales sociosanitarios.
Entre algunos de los principales resultados, se destaca como La pandemia de COVID-19 y las medidas restrictivas asociadas significan un retorno al hogar de algunas necesidades de cuidado que se habían satisfecho fuera de casa o por personal externo (personas cuidadoras), modificando las estrategias para dar respuesta a las necesidades de cuidado y atención. Ello ha supuesto incrementos en el volumen de trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, lo que incluye cuidar de menores, una mayor cantidad de tareas domésticas durante el confinamiento (como cocinar y limpiar), y cuidar de familiares enfermos. En estos casos los hogares se han enfrentado a una “nueva” crisis de los cuidados ya que se ha revertido el proceso de externalización de los cuidados. Por su parte, la rehogarización de los cuidados en el contexto de la COVID-19 implica una mayor visibilización y reconocimiento del cuidado, en un «redescubrimiento» del hogar como entorno seguro y de los cuidados como actividades reparadoras y satisfactorias. Aunque las desigualdades de género en los cuidados persisten (las mujeres continúan asumiendo una parte desproporcionada del trabajo de cuidados), algunos hombres le están dedicando más tiempo, por lo que durante el confinamiento se observa una reasignación de tareas hacia un modelo ligeramente más igualitario. Aunque tanto mujeres como hombres se están enfrentando a mayores problemas físicos y emocionales como resultado de la pandemia y las medidas relacionadas para abordarla, esta situación está teniendo un mayor impacto en las mujeres: mayores niveles de ansiedad, depresión, sobrecarga de trabajo, aislamiento o enfermedades físicas por el mayor volumen de trabajo doméstico y de cuidados no remunerado que recae sobre ellas desde que comenzó la pandemia. Además, las mujeres son las principales perjudicadas en términos de su participación en el mercado laboral y la sobrerrepresentación en el desempleo, debido a su mayor presencia los sectores más afectados por la crisis (empleo doméstico, actividades sanitarias y el sector de cuidados en residencias, comercio, turismo e industria manufacturera). Y por último, Aunque el confinamiento ha dificultado el acceso a las redes y las interacciones sociales de apoyo básicas y el encuentro informal en el espacio público, se han seguido dando prácticas de reciprocidad voluntaria y de solidaridad entre vecinos/as y a pequeña escala, que se han organizado de forma más o menos formal dando lugar, en algunas situaciones, a redes organizadas de apoyo mutuo.
7th Transforming Care Conference (25-27 de junio): Social and Human Rights in Care.
“Continuities and Changes in Women’s Discourse on Care in the Context of COVID-19” Sandra Obiol-Francés, Jordi Bonet-Martí, Jokin Azpiazu Carballo, Màrius Domínguez Amorós i Elisabet Almeda Samaranch
En los últimos años, han aparecido diferentes discursos en el imaginario social (los cuidados como responsabilidad colectiva, el autocuidado, la reivindicación del trabajo de cuidados, etc.) que pretendían articular una respuesta basada en derechos a la crisis de los cuidados que afecta a nuestras sociedades. Sin embargo, con el estallido de la pandemia de la COVID-19 y las medidas de distanciamiento social asociadas, estos discursos emergentes entraron en contradicción con los discursos oficiales basados en el modelo médico hegemónico, que promovía la responsabilidad individual y el retorno de la responsabilidad de los cuidados en el hogar. En este artículo, proponemos un análisis feminista de cómo el impacto de la COVID-19 ha llevado a una transformación de los discursos sobre los cuidados, especialmente aquellos que apelan a nuevas formas de entender y organizar los cuidados. Para ello, hemos basado nuestro estudio en el análisis sociológico del sistema discursivo de un corpus de 30 entrevistas en profundidad con mujeres con responsabilidades de cuidados en el hogar en distintas partes de España. Nuestro propósito en estas entrevistas era averiguar cómo habían organizado los cuidados en sus hogares antes, durante y después de la pandemia. El análisis permite identificar la permanencia de los discursos más tradicionales sobre la organización de los cuidados que coexisten –a menudo en conflicto– con referencias discursivas a nuevas formas de cubrir estos cuidados, especialmente en aquellas mujeres con un mayor capital cultural.
XVIII CONGRESO DE MEDICINA SOCIAL Y SALUD COLECTIVA (4-8 de agosto): Por la democracia, los derechos sociales y la salud: Retomar el camino de la determinación social y la soberanía de los pueblos.
“Cambios y continuidades en los discursos emergentes sobre el cuidado en el contexto de la crisis de la COVID-19” Jordi Bonet-Martí
Introducción
La pandemia de la COVID-19 generó un contexto de excepcionalidad que tensionó las formas socialmente organizadas del cuidado. A pesar de las expectativas de avance en la democratización del cuidado tras el ciclo de movilizaciones feministas en el periodo 2017-2019, durante el confinamiento domiciliario se produjo un refuerzo de los discursos tradicionales y una intensificación de las cargas de cuidado sobre las mujeres.
En este trabajo se analizan los cambios y continuidades en los discursos emergentes sobre el cuidado a partir del análisis de un corpus de entrevistas a mujeres cuidadoras en diferentes comunidades autónomas del Estado español. El estudio utiliza el análisis del discurso para identificar las configuraciones discursivas dominantes durante la crisis sanitaria, los efectos de la pandemia sobre las prácticas y significados del cuidado, y el modo en que estos discursos se relacionaron con los marcos institucionales, familiares y comunitarios.
El análisis evidencia la persistencia de desigualdades de género y territoriales, así como la emergencia de discursos híbridos que articulan elementos del cuidado tradicional, profesionalizado, democratizador e individualizado, mostrando la tensión entre la politización del cuidado y su reabsorción en clave individual y emocional.
Objetivo
Analizar los cambios y continuidades en los discursos sobre el cuidado entre mujeres cuidadoras durante la pandemia de la COVID-19, identificando configuraciones discursivas, sus transformaciones y la influencia de los marcos sociales e institucionales.
Metodología
La investigación se basa en el Análisis Sociológico del Sistema de Discursos (ASSD) aplicado a 29 entrevistas a mujeres con cargas de cuidado residentes en Cataluña, Islas Baleares, País Vasco y Comunidad Valenciana. Las participantes fueron seleccionadas mediante muestreo intencional, con diversidad de perfiles laborales, familiares y comunitarios. Las entrevistas, realizadas en el marco del proyecto RESCUPAN, fueron transcritas y codificadas con el software CATMA. El ASSD permitió reconstruir el sentido del discurso en función de las condiciones sociales de producción y las posiciones de enunciación. El análisis se centró en identificar configuraciones discursivas sobre el cuidado y sus desplazamientos durante el confinamiento. Se consideraron también las diferencias territoriales, las mediaciones tecnológicas y el papel del autocuidado en los relatos de las entrevistadas.
Resultados
Las entrevistas revelan que el confinamiento fue vivido mayoritariamente como una intensificación de las cargas de cuidado, aunque algunas entrevistadas lo interpretaron como un periodo de reorganización personal y familiar. Se identificaron cuatro discursos principales:
(1) Discurso tradicional-familiarista: asume el cuidado como obligación femenina, con fuerte presencia en madres.
(2) Discurso modernizador: promueve la profesionalización del cuidado, aunque sin corresponsabilidad masculina.
(3) Discurso democratizador: plantea el cuidado como derecho y responsabilidad colectiva, visible sobre todo en el País Vasco.
(4) Discurso híbrido: combina elementos de los anteriores y articula el cuidado como atención mediada tecnológicamente y como gestión emocional, dando lugar a una forma individualizada del autocuidado.
Los resultados muestran que la pandemia no impulsó un avance generalizado del discurso democratizador. Solo algunos grupos (monomarentales, trabajadoras sexuales) experimentaron un giro en esa dirección, probablemente por la vinculación con redes de cuidado comunitario. El análisis territorial evidencia diferencias: en el País Vasco se destacan redes comunitarias, en Cataluña el papel del vecindario; en Baleares y Valencia, dificultades para acceder a recursos públicos. En todos los casos, persiste la feminización del cuidado y la dependencia del mercado ante la insuficiencia del Estado.
Conclusiones
La pandemia reafirmó la centralidad del trabajo de cuidados en manos de las mujeres, sin generar una transformación estructural de su organización. El discurso sanitario hegemónico identificó el cuidado como una responsabilidad individual. Aunque emergieron discursos que revalorizan el cuidado, estos coexistieron con narrativas tradicionales y formas individualizadas centradas en el autocuidado emocional. El discurso democratizador apareció como horizonte deseable, pero limitado en su implementación. El estudio muestra como las diferencias territoriales en acceso y organización del cuidado deben ser consideradas en el diseño de políticas públicas sociosanitarias. Asimismo, el discurso híbrido plantea nuevos desafíos para la politización del cuidado desde una perspectiva feminista y emancipatoria.