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La búsqueda pobreza retornó 45 resultados.
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1. - María-Milagros Rivera Garretas. Signos de libertad femenina. (En di&... |
... La pobreza , medida secreta del trabajo 8. La fecundidad y la pobreza 9. Yo en la psique creo muy poco 10. El signo de la libertad femenina hace historia de las mujeres 10.1. Lo universal como mediación 10.2. La libertad femenina 10.3. La amistad polÃtica Consultar texto por: Capitulo : Obra María-Milagros Rivera Garretas. Signos de libertad femenina. (En diálogo con la historia y la política masculinas). ... |
2. Seccion 1 - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’a... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0011:Sección =1:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
3. Seccion 2 - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’a... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0011:Sección =2:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
4. Seccion 3 - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’a... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0011:Sección =3:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
5. Seccion 4 - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’a... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0011:Sección =4:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
6. Seccion 5 - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’a... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0011:Sección =5:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
7. Seccion 1 - Agnès de Peranda. Introducción y edición crí... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0009:Sección =1:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
8. Seccion 2 - Agnès de Peranda. Introducción y edición crí... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0009:Sección =2:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
9. Seccion 3 - Agnès de Peranda. Introducción y edición crí... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0009:Sección =3:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
10. Seccion 4 - Agnès de Peranda. Introducción y edición crí... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0009:Sección =4:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
11. Seccion 5 - Agnès de Peranda. Introducción y edición crí... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2012.03.0009:Sección =5:
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
12. - Luisa Cavaliere. Lia Cigarini. Hay una buena diferencia. Un diálogo. |
... una jaula que trae pobreza e infelicidad. Esto lo dicen también muchos economistas crÃticos con el sistema capitalista. Voces que no son escuchadas y que resultan ineficaces porque denuncian pero no ponen en juego la subjetividad de quien trabaja. Primum vivere . Mi propuesta es, por tanto, decir y ratificar públicamente lo que sabemos sobre cómo queremos vivir y sobre el trabajo necesario para vivir, a partir de la crÃtica de la evidente unilateralidad de la economÃa masculina, sea la dominante o sea la de oposición. Con la conciencia de que lo que se dice y se hace tiene un valor universal: no solo vale para nosotras, no solo para las mujeres. Se trata, pues, una vez obtenido un punto de vista concordante con la experiencia de cada mujer y de cada hombre, de escribir el libro de las subjetividades , o sea, de las vidas implicadas y comprometidas con el trabajo y con la economÃa. Es decir, de poner la experiencia femenina en... |
13. Seccion 3 - Luisa Cavaliere. Lia Cigarini. Hay una buena diferencia. Un di&... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda%3Atext%3A2015.09.0001%3ASección %3D3:
... una jaula que trae pobreza e infelicidad. Esto lo dicen también muchos economistas crÃticos con el sistema capitalista. Voces que no son escuchadas y que resultan ineficaces porque denuncian pero no ponen en juego la subjetividad de quien trabaja. Primum vivere . Mi propuesta es, por tanto, decir y ratificar públicamente lo que sabemos sobre cómo queremos vivir y sobre el trabajo necesario para vivir, a partir de la crÃtica de la evidente unilateralidad de la economÃa masculina, sea la dominante o sea la de oposición. Con la conciencia de que lo que se dice y se hace tiene un valor universal: no solo vale para nosotras, no solo para las mujeres. Se trata, pues, una vez obtenido un punto de vista concordante con la experiencia de cada mujer y de cada hombre, de escribir el libro de las subjetividades , o sea, de las vidas implicadas y comprometidas con el trabajo y con la economÃa. Es decir, de poner la experiencia femenina en... |
14. - Agnès de Peranda. Ordinaciones et constituciones quas venerabilis do... |
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
15. - Agnès de Peranda. Ordinacions i constitucions de l’abadessa de... |
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
16. - Agnès de Peranda. Ordenanzas y constituciones de la abadesa del mona... |
... como la radicalidad de la pobreza de san Francisco , los aspectos de la cura monialium 3 o en el hecho que muchos de los framenores no habÃan sido ordenados presbÃteros, podemos pensar que la necesidad que tuvo la comunidad femenina de dotarse del oficio de hebdomadario o capellán y fomentar la práctica de la institución de las capellanÃas o beneficios eclesiásticos. Las reglas de la orden de Santa Clara (tanto la de Innocencio IV , del 1247 , como la posterior de Urbano IV , del 1263 ) describen al capellán adscrito al monasterio como una persona de buena fama y vida honesta, no muy joven, de edad madura y conveniente. Según la normativa tendrá que comprometerse a permanecer de manera estable en el lugar, haciendo votos de pobreza y castidad ; prometiendo obediencia a la ... |
17. - Laura Minguzzi. Luciana Tavernini. Marina Santini. La práctica de la... |
... los siglos XIX y XX: mucha pobreza , hambre y migración . Italia entera, no solo el Véneto , era una paÃs pobre , y solo después de los años cincuenta ha podido conocer el bienestar y el desarrollo económico e industrial. Hasta los tres años vivà con mis progenitores y con mis hermanas en una zona periférica de San Donà que la gente llamaba con desprecio "Matausen": allà se habÃan refugiado muchas familias, gente de todo tipo, considerada despojos de la guerra . Las casas no eran dignas de este nombre: no habÃa agua ni luz ni cuarto de baño , no habÃa nada de nada. Cuando se nace, como yo, en una familia pobrÃsima –papá peón que ocasionalmente encontraba trabajo y mamá obligada a vivir al dÃa sin saber cómo dar de comer a su familia– se crece creyendo que no tienes ningún derecho. He necesitado tiempo para aprender a protestar y a pedir. Mi familia estaba... |
18. - Laura Minguzzi. Luciana Tavernini. Marina Santini. La pratica della stori... |
... los siglos XIX y XX: mucha pobreza , hambre y migración . Italia entera, no solo el Véneto , era una paÃs pobre , y solo después de los años cincuenta ha podido conocer el bienestar y el desarrollo económico e industrial. Hasta los tres años vivà con mis progenitores y con mis hermanas en una zona periférica de San Donà que la gente llamaba con desprecio "Matausen": allà se habÃan refugiado muchas familias, gente de todo tipo, considerada despojos de la guerra . Las casas no eran dignas de este nombre: no habÃa agua ni luz ni cuarto de baño , no habÃa nada de nada. Cuando se nace, como yo, en una familia pobrÃsima –papá peón que ocasionalmente encontraba trabajo y mamá obligada a vivir al dÃa sin saber cómo dar de comer a su familia– se crece creyendo que no tienes ningún derecho. He necesitado tiempo para aprender a protestar y a pedir. Mi familia estaba... |
19. - Carla Lonzi y otras. Los Manifiestos de Rivolta Femminile: la revoluci&oa... |
... de que el hambre, la pobreza o la renta mÃnima o toda porquerÃa pensable causada por la violencia masculina "tiene rostro de mujer ". ¿Por qué tiene la autenticidad la mágica facultad de acabar con la economÃa de la miseria femenina? Porque en mÃ, en una, en cada mujer , además de los traumas y de los nudos y grumos del desorden simbólico 20 , está el talento: el talento femenino que es a un tiempo decible e indecible, porque ella es la depositaria y autora del orden simbólico de la madre , de la lengua materna, la lengua que hablamos y la voz que tenemos para decir; y la lengua no está nunca quieta. En su búsqueda de la autenticidad , Carla Lonzi tuvo precisamente el talento de partir del reconocimiento a su madre , a su origen , cuna de su originalidad a pesar de las dificultades de relación con ella, mujer concreta y, finalmente, una mujer cualquiera. Dando el doble salto propio de la ... |
20. Seccion 1 - Leonor López de Córdoba. Introducción y edici... |
http://www.ub.edu/duoda/bvid/text.php?doc=Duoda:text:2011.02.0001:Sección =1:
... con la enfermedad y la pobreza , con sus enemigas, con sus propios duendes y demonios. Su vida es testimonio de la época en que el reino de León- Castilla cambió sus sentimientos de admiración hacia el Oriente andalusà por Europa. En el centro de las Memorias está la figura de Leonor, rodeada de las mujeres de su familia y de la Virgen , en la que depositó su esperanza de recobrar su fortuna y de rehacer su vida . Al lado, su padre, cuya memoria cuidó con esmero y cariño. A lo lejos, su marido Ruy que, aunque seguÃa vivo en 1423, apenas aparece –aunque aparece algo- ni en las Memorias ni otras fuentes históricas que se conservan de Leonor López de Córdoba . 93 La libertad de decir y la originalidad de esta autora son fruto de la escuela del dolor , 94 de sus... |