Menú principal                                                                                                                                 Índice de Scripta Nova
 

Scripta Nova.
 Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales.
Universidad de Barcelona [ISSN 1138-9788] 
Nº 94 (70), 1 de agosto de 2001

MIGRACIÓN Y CAMBIO SOCIAL

Número extraordinario dedicado al III Coloquio Internacional de Geocrítica (Actas del Coloquio)

SEGREGACIÓN RESIDENCIAL Y APROPIACIÓN DEL ESPACIO: LA MIGRACIÓN HACIA LAS URBANIZACIONES CERRADAS DEL ÁREA METROPOLITANA DE BUENOS AIRES (ARGENTINA)

Arq. DPU. Sonia Vidal-Koppmann
Investigadora Adjunta del CONICET
C.I.M. – FADU – Universidad de Buenos Aires
E-mail: svidal@ciudad.com.ar


Segregación residencial y apropiación del espacio: La migración hacia las urbanizaciones cerradas del Área metroplitana de Buenos Aires (Argentina) (Resumen)

A partir de la década de los años 90, un nuevo fenómeno urbano irrumpe en la estructura territorial del Área Metropolitana de Buenos Aires: la construcción de urbanizaciones privadas destinadas a los sectores de población de mayores ingresos.Esta nueva forma de producción del espacio urbano ha generado, por un lado, una corriente migratoria de familias jóvenes hacia la periferia metropolitana, más específicamente hacia los partidos que componen el denominado "tercer anillo" de la región; y por otro, ha creado en el interior de cada uno de ellos, un conjunto de enclaves cercados que evidencian un creciente proceso de "autosegregación".El avance acelerado de estas nuevas formas de apropiación del espacio, nos ha llevado a elaborar algunas consideraciones que deseamos presentar en el Coloquio. Las mismas apuntan a la co-existencia del fenómeno expuesto con otras formas de asentamientos espontáneos; al análisis de la estructura de nuevas centralidades que se empieza a vislumbrar en la región metropolitana de Buenos Aires y al enfoque de la temática de calidad del entorno urbano, que se desprende de esta modalidad de urbanización.

Palabras clave: urbanizaciones privadas / migración elitista / autosegregación / calidad del entorno / crecimiento suburbano


El crecimiento de la periferia metropolitana

El Área Metropolitana de Buenos Aires puede ser definida como un gran escenario urbano, donde un conjunto de centros interactuan alrededor de una ciudad que mantiene desde hace varias décadas una población estable. Dicho sistema, que comprende la Ciudad de Buenos y 31 partidos adyacentes, concentra casi un 30 por ciento de la población total del país y constituye una región que posee un fuerte peso demográfico y económico.

El crecimiento del área no puede resumirse como una simple transformación de la dimensión demográfica; por el contrario, sus consecuencias son mucho más complejas, abarcando el orden político, económico y territorial. Prueba de ello, son el Modelo Territorial propuesto para la Ciudad de Buenos Aires y las alianzas celebradas por un conjunto de partidos de la Zona Norte (Zárate, Campana, Escobar, Pilar, Exaltación de la Cruz, Luján, Gral. Rodríguez y Moreno), que evidencian claramente la necesidad de procesos de gestión considerándola como un sistema integrado.

Sin embargo y pese a los esfuerzos realizados en distintas épocas y en diferentes momentos políticos, el Área Metropolitana de Buenos Aires presenta un desarrollo no planificado que incide, indudablemente, en la calidad del entorno. En efecto, el crecimiento de la urbanización en forma espontánea muestra como resultado un parque habitacional de baja calidad edilicia; carencias en los servicios de infraestructura debido a la dispersión urbana y falta de equipamientos comunitarios básicos.

Es en la segunda y la tercera corona, donde la situación descripta se vuelve más crítica y acompaña al asentamiento de grupos poblacionales con necesidades básicas insatisfechas (NBI) y sin capacidad para mejorar las condiciones físicas de su entorno inmediato.

No obstante, en forma paralela se ha producido un fenómeno urbanístico inusual: el avance de los megaemprendimientos privados. Las nuevas urbanizaciones (clubes de campo, barrios cerrados y clubes de chacras) destinadas a los estratos de población más altos están ocupando un porcentaje de territorio cada vez mayor, en franca vecindad con asentamientos precarios.

Esta situación no debería asombrarnos; puesto que la búsqueda de tierras para las mismas ha apuntado al bajo costo. Por lo tanto, los loteos para barrios privados y countries se han localizado en su mayoría a más de 40 Km. de la Capital Federal.

Como bien señala el investigador H. Torres (1998, p.5/6) estamos frente a un nuevo proceso de suburbanización. En efecto, en la década del 40 fueron los ferrocarriles con tarifas subsidiadas los que alentaron a la población de menores recursos a establecerse en partidos como José C. Paz, Moreno, Tigre, Berazategui o Lomas de Zamora. En la época actual, la traza de las autopistas y la posesión de uno o más automóviles por familia concreta la posibilidad de vivir en la periferia metropolitana, creando una nueva forma de hábitat suburbano: el enclave de lujo.

Dado que los grandes ejes de crecimiento del AMBA se han desarrollado a lo largo de las vías más importantes de penetración a la Ciudad de Buenos Aires; los nuevos emprendimientos se concentran a lo largo del Acceso Norte, del Acceso Oeste, de la Autopista Buenos Aires - La Plata y de la Autopista Ricchieri - Cañuelas. En estos dos últimos ejes, los barrios privados están en constante expansión, por dos motivos: primero, la zona Norte presenta un estado próximo a la saturación; y segundo y como consecuencia de lo anterior, los valores del mercado inmobiliario se han elevado de manera excesiva para una franja de población de un estrato socioeconómico medio.

Asimismo cabe destacar que en la década del 90, las inversiones en obras públicas fueron destinadas al sector de vialidad; de tal forma que la remodelación ampliación y finalización de trabajos en los accesos y la red de autopistas, unido a un descenso en los precios del mercado de los automotores, han incentivado el "retorno" a la vida suburbana. La urbanización, gracias a ello, ha avanzado hacia el límite de la tercera corona del Conurbano; es decir, más allá de los 60 Km. de la Capital Federal. La incorporación al Área Metropolitana de los partidos de Escobar, Pilar, Marcos Paz, Cañuelas y San Vicente confirman la expansión de un territorio urbano creciente y fragmentado.

A modo de síntesis, en el siguiente cuadro se han consignado los emprendimientos en curso, y se ha hecho una estimación aproximada de la cantidad de lotes ofertados para usos de suelo residencial. Hay que señalar, además, que el dato de población estimada está referido a los habitantes que actualmente ocupan las nuevas urbanizaciones y fue obtenido a partir del trabajo de relevamiento de la investigadora D. Szjanberg. (2000, p.4)
 
 
 


Cuadro 1 
Nuevas urbanizaciones en el AMBA
CORREDOR CANTIDAD DE PROYECTOS TOTAL DE LOTES POBL.ESTIMADA EN LOTES OCUP.
NORTE (Acceso norte – Panamericana) 233 59.301 106.716
OESTE (Acceso oeste, rutas 5 y 7) 45 11.342 16.620
SUR (Autopista Bs. As. – La Plata; AU Cañuelas-Ezeiza) 49 15.797 30.432
Fuente: elaboración propia.


Según lo expuesto en el cuadro precedente, los emprendimientos privados en los tres corredores del AMBA han alcanzado una cifra superior a las dos centenas. Muchos de estos proyectos se encuentran totalmente consolidados y han pasado de la categoría de viviendas de fin de semana a la de residencia permanente, situación que también es característica de las urbanizaciones de la década citada y que puede entenderse como el reflejo de las preferencias de una clase social media-alta (ejecutivos, empresarios y profesionales exitosos) que no oculta sus deseos de vincularse con gente de su mismo nivel y que anhela condiciones de seguridad y de privacidad para su vida cotidiana. Por este motivo y ante la imposibilidad de mantener una residencia principal y otra secundaria simultáneamente, han modificado las tendencias de consumo en materia de hábitat.

En concordancia con estos requerimientos, los countries y los barrios cerrados conforman verdaderas situaciones de "enclave" y evidencian un fenómeno de segregación social, que parece ser una de sus características indisociables. Los nuevos "ghettos de riqueza" se van convirtiendo poco a poco, en pequeños fragmentos urbanos esparcidos en la periferia metropolitana como una especie de archipiélago, que no prolonga la estructura urbana actual existente y que crece de manera anárquica. La infraestructura vial, como ya lo señaláramos, constituye un elemento-clave para la ubicación de los proyectos.

Lamentablemente, no existen todavía datos censales para justificar la situación descripta en las líneas que anteceden. El último censo nacional fue realizado en 1991 y los cambios a los que nos estamos refiriendo se han producido justamente en lo que va de esa fecha al presente. El fenómeno de migración suburbana de la clase media más acomodada, se está llevando a cabo de manera gradual y continua; y probablemente, la resultante espacial saltará a la vista, cuando se publique la información del censo a realizarse en el transcurso de este año.

Resumiendo, la globalización impone una nueva impronta al Área Metropolitana de Buenos Aires: la fragmentación y la urbanización difusa. Los grandes equipamientos se distribuyen en la región sin una planificación previa, obedeciendo simplemente a la ley de mercado de oferta – demanda; y los procesos de transformación territorial se plasman de dos maneras: a) la urbanización en segmentos de territorio ocupando fracciones destinadas a usos no urbanos, y b) la extensión caótica del tejido periurbano generando áreas con escasez de servicios y de baja calidad ambiental. En cuanto a la dimensión social se aprecia un nuevo modelo que apunta a sistemas cerrados sin heterogeneidad y sin conexión entre ellos.
 

Una aproximación a los casos de estudio

Para ejemplificar el fenómeno de segregación residencial y apropiación del espacio, y su impacto dentro del Área Metropolitana, se buscaron tres casos – testigo que representaran situaciones bien diferenciadas. Por este motivo se seleccionó el partido de Pilar en la zona Norte, el de San Miguel en la zona Oeste y el de Cañuelas en el Sur.

El primero de los casos puede considerarse como un "pionero" en el fenómeno de radicación de urbanizaciones privadas y, sea por una cuestión de modas o de oportunidad de inversiones, o por otros factores externos, se ha convertido en la "meca" de los clubes de campo y de los barrios cerrados; actualmente, el área está saturada de nuevos emprendimientos.

Su contrapartida es el segundo ejemplo seleccionado: el partido de Cañuelas. Ubicado en el borde sur del AMBA, ha sufrido un proceso de transformación mucho más lenta, atribuible al menor ritmo de las inversiones en infraestructura y obras públicas, que es el componente inseparable de las nuevas urbanizaciones. A la inversa del caso anterior, Cañuelas se encuentra muy lejos de llegar a la "saturación" debida a los proyectos de urbanización.

Por último, el tercer caso se seleccionó dentro de la segunda corona del AMBA. Puesto que, como también surge del primer cuadro, es en este sector donde se ha evidenciado el mayor aumento de proyectos en lo que respecta al corredor Oeste.

A continuación haremos una breve descripción de los tres partidos estudiados.

El partido de Pilar situado en el Noroeste del Área Metropolitana, queda incluido dentro de la llamada tercera corona. Por su situación de borde, la ciudad cabecera si bien participa de la conurbación, posee características que la asemejan a los centros urbanos del interior de la provincia de Buenos Aires.

El partido presenta una extensión de 372,43 Km2, dentro de los que se desarrolla la ciudad de Pilar con 35.855 habitantes; dos localidades con más de 15.000 habitantes (Tortuguitas y Pte. Derqui); otras once con una población que oscila entre los 1.000 y los 10.000 habitantes y tres centros menores de 1.000.

A esta población debe agregarse la que figura censada en 1991 como residentes en country – clubs. En este caso el country con mayor cantidad de habitantes era el de Tortugas (886 habitantes) que contaba con una población superior a la de la localidad de Zelaya.

La cantidad de este tipo de asentamientos que aparecen censados como "Otros asentamientos urbanos" alcanzaba en 1991, las 17 unidades. El tamaño de sus poblaciones oscilaba entre los 6 y los 900 habitantes aproximadamente. Actualmente, en el partido se concentran un total de 104 emprendimientos privados desagregados de la siguiente manera:

a) Dos megaproyectos, ubicados en el noroeste y sudoeste del partido, afectando entre los dos, una superficie aproximada a las 1.000 Has.

b) Treinta y siete clubes de campo con dimensiones que oscilan entre las 6 y las 300 Has.

c) Sesenta y cinco barrios cerrados que van desde 2 Has. hasta 170 Has.

Las vías de comunicación han sido el factor principal de atracción para los nuevos asentamientos.

El Acceso Norte - ramal Pilar y su prolongación por la Ruta Nacional nº 8 dividen el territorio en dirección este – oeste y concentran a lo largo de su recorrido, el conjunto mayoritario de los nuevos emprendimientos. Otro tanto sucede con la Ruta Provincial nº 25, que atraviesa Pilar en el sentido inverso y en sus proximidades se distribuyen countries y barrios privados. Sin lugar a duda, esta situación se ha visto favorecida por la presencia de grandes inversores, que aprovechando la estabilidad monetaria y la fluidez de acceso a líneas de crédito, han hecho realidad "un escenario imaginado" por ciertos sectores de la sociedad: el barrio confortable y seguro.

Si bien las nuevas urbanizaciones difieren en cuanto a su extensión y características, lo que no puede dejar de destacarse es que las mismas ocupan más de un 10 por ciento del territorio del partido. Esto equivale a una cifra superior a los 59 Km2 de tierras que serán destinadas a usos urbanos; más específicamente a usos residenciales.

El segundo de los ejemplos, el partido de San Miguel, surge en 1995 como parte de la división del territorio de Gral. Sarmiento. En esta división se adjudicó poco menos de la mitad sudoriental de los casi 196 Km2 del partido que le dio origen.

Desde un punto de vista funcional, su posición geográfica y su evolución urbanística, le han deparado un destino predominantemente residencial para sectores de población de clase media y baja, con un subcentro comercial de cierta importancia en el Noroeste de la conurbación y con escasa actividad industrial en términos comparativos.

El partido con una extensión de 82,51 Km2 y una población de 212.254 habitantes, presenta una estructura configurada por dos áreas claramente identificadas. Al Norte y al Este una gran extensión libre correspondiente a las instalaciones de Campo de Mayo; y al Sur y al Oeste, un área totalmente urbanizada donde se desarrollan la ciudad cabecera y las localidades de Bella Vista y Muñiz.

Al respecto la percepción local permite destacar en el partido a la localidad de Bella Vista como un segundo subcentro, mientras que Muñiz es considerado como una prolongación del "centro" de la ciudad cabecera.

Las comunicaciones viales con el resto del Gran Buenos Aires dependen fundamentalmente de las rutas nacionales nº 8 y nº 202, las que convergen en las proximidades de la cabecera del partido.

El ferrocarril que fue uno de los grandes impulsores del crecimiento urbano de esta zona, atraviesa el partido con las líneas del ex – Gral. Urquiza y del ex – Gral. San Martín, dando lugar a numerosas estaciones. La primera de las líneas mencionadas constituye una frontera entre el sector perteneciente a Campo de Mayo y el resto del partido.

La avenida Gaspar Campos divide la zona urbanizada en sentido NO –SE y establece un límite virtual para la localización de los emprendimientos.

En efecto de los 16 proyectos que figuran en la actualidad, sólo dos se ubican entre las vías del Ferrocarril San Martín y la mencionada arteria, en la localidad de Muñiz. El resto se dispone al Sur de dicha avenida; especialmente en las proximidades de su intersección con la ruta provincial nº 23, en la zona denominada San Miguel Oeste ( 7 barrios).

Otra arteria sobre cuyo recorrido se disponen nuevas urbanizaciones es la avenida Pardo. A lo largo de la misma se observa la aparición de tres nuevos barrios privados.

Como características generales se verifica que la mayoría de los emprendimientos en marcha no poseen grandes dimensiones. Se trata de barrios cerrados que no superan las 20 Has. El tamaño promedio ronda las 10 Has. Sólo en los clubes de campo se superan las dimensiones mencionadas.

Su distancia respecto a la Capital Federal es de alrededor de 35 Km.. La mayor parte de los barrios están emplazados en áreas categorizadas por el municipio como semi-urbanizadas. Esto implica la ausencia de infraestructuras básicas de servicios; no obstante, en este sector se ha previsto la localización de barrios privados debido a que la normativa de zonificación impone bajas densidades.

En el partido de San Miguel se reconocen bolsones de pobreza. Las dos áreas en donde se sitúan poblaciones carenciales, son la cuenca del río Reconquista (zona baja e inundable) y un amplio sector comprendido entre la Av. Chapeaurouge y el límite con el partido de Moreno.

En este sector en proximidad con la ruta provincial nº 23, se verifican asentamientos marginales. Sin embargo, en vecindad casi inmediata aparecen los nuevos barrios (Los Plátanos, Los Berros, entre otros). Asimismo, lindante con el Golf Club Buenos Aires, se ubica otra franja de asentamientos marginales.

La localización de clubes de campo en un partido de la segunda corona puede ser bastante atractiva para los potenciales habitantes, que deseen localizarse cerca de la ciudad de Buenos Aires.

Sin embargo, hay que señalar que los nuevos barrios se insertan dentro de un área semiurbana preexistente, pudiendo producir discontinuidades en el tejido urbano. Asimismo su localización implica reforzar el perfil de "áreas dormitorio", que ya poseen algunas de las localidades del partido.

Finalmente, en el sur del Area Metropolitana y formando parte también de la denominada tercera corona, está el partido de Cañuelas. Al igual que Pilar, comparte una situación de "borde"; pero, además, presenta una serie de características particulares.

En primer lugar, se ubica dentro de la cuenca deprimida del Salado, con áreas aptas para el desarrollo de la agricultura y la ganadería; pero sujeta a situaciones de anegamiento, que constituyen su principal factor de atraso. Dentro de las características agropecuarias de la zona, Cañuelas se destaca en la cuenca lechera del Norte.

En segundo lugar, participa de las características de la Zona del Abasto; es decir, de un área con forma de semicírculo que rodea a la Capital Federal, con un radio de extensión de 150 Km. En esta área se concentran las explotaciones agrícolas intensivas, la actividad tambera, la producción de aves y porcinos y el cultivo extensivo de cereales y oleaginosas.

Cañuelas es aún un partido poco urbanizado a pesar de su proximidad a la ciudad de Buenos Aires. Debido a sus características rurales y a su baja cantidad de población (30.900 el total del partido y 25.400 la población urbana), la ciudad cabecera presenta una caracterización funcional que la asemeja al resto de las ciudades del interior bonaerense.

En efecto, la ciudad de Cañuelas según el último censo contaba con 18.733 habitantes y el resto de la población urbana se distribuía en localidades menores: Máximo Paz (1.900 habitantes), Vicente Casares y Uribelarrea (600 y 850 habitantes respectivamente) y un conjunto de barrios con menos de 500 habitantes cada uno.

La superficie total del partido es de 1.187,22 Km2, de los cuales sólo una pequeña parte tiene características urbanas o semi-urbanas.

Cañuelas y las pequeñas localidades están enlazadas a lo largo de las principales vías de comunicación. Al respecto merecen mencionarse la ruta nacional nº 3, que conecta a la ciudad cabecera con La Matanza y que atraviesa el partido de Norte a Sur. En este corredor se localizan seis de las localidades menores.

Otra vía de importancia es la ruta provincial nº 205, que por el oeste la conecta con la provincia de La Pampa y por el este con otros partidos del AMBA, empalmando con la ruta nacional nº 5 y también con la Capital Federal y el Aeropuerto de Ezeiza. Cabe agregar que el avance de la Autopista Cañuelas-Ezeiza mejorará la accesibilidad de la zona. Sobre este corredor se ubican varias localidades menores.

Asimismo el sur del partido es atravesado por la ruta nacional nº 215, vinculándose con Monte, San Vicente y Gral. Paz.

La ubicación de casi todos los proyectos que se desarrollan en la actualidad es sobre el recorrido de la ruta 205. A lo largo de esta vía se concentran cuatro clubes de campo y un barrio cerrado.
 

Las urbanizaciones privadas y su impacto local

Cuando hablamos de impacto en el orden local, es necesario, en principio definir la naturaleza y la magnitud del fenómeno que ocasiona el posible conflicto; y en el caso de las urbanizaciones cerradas existen diferencias entre ellas y muchos puntos en común.

Básicamente las diferencias están referidas al tamaño de los conjuntos residenciales, a la capacidad locativa de los mismos y al grado de equipamiento, infraestructura y servicios que poseen. No es lo mismo el impacto que surgiría de la implantación de un barrio cerrado de 2 Has., que el ocasionado por un emprendimiento de 1500 hectáreas. Por otra parte, tanto los conjuntos pequeños como los grandes tienen en común el ser fragmentos segregados de la estructura urbana existente. Segregación que no es sólo virtual, sino que se plasma físicamente por medio de la muralla perimetral, que encierra a estas unidades.

Para mostrar la incidencia de este fenómeno en lo que respecta a apropiación del espacio, hemos elaborado un cuadro sobre la base de información publicada en los medios, dado que el mercado inmobiliario es muy dinámico y no existe información estadística para medir el avance de estos nuevos productos urbanos.

Como los porcentajes de tierra ocupada, no constituyen por sí solos un buen indicador para medir el impacto territorial de las nuevas urbanizaciones; es que se estimó la cantidad de población posible que podrían albergar los proyectos en curso. Para realizar esta proyección se aplicó la siguiente metodología:

Primero se calculó la cantidad potencial de lotes. A esta cifra se arribó dividiendo la cantidad total de hectáreas de cada proyecto por el tamaño del lote promedio, datos que aparecen en la Guía de Barrios Cerrados y Countries, publicada semanalmente en los diarios de circulación nacional.

En segundo término, el resultado obtenido fue modificado según la tipología de los proyectos. Consideramos que los porcentajes de suelo para usos residenciales equivalían en los barrios cerrados al 70 por ciento del total de la superficie; y en los clubes de campo, este porcentaje se estimó en un 60 por ciento. El criterio planteado para hacer estas disminuciones, se basó en considerar las necesidades de tierra para otros usos, por ejemplo vías de comunicación e instalaciones sociales y deportivas.

El tercer paso consistió en calcular la población potencial de las nuevas urbanizaciones. Con este fin se multiplicó en cada caso la cantidad de lotes por una constante (4,5) que representaba el número de habitantes de la "familia tipo". Y posteriormente, se procedió a la sumatoria de población en los tres partidos analizados.

Por último, se calculó el aumento de población en porcentajes, relacionando la población proyectada con la población actual de cada partido. Los resultados se exponen en el cuadro  2, que sigue a continuación:
 
 
 


Cuadro 2 
Incidencia de las urbanizaciones privadas en los casos de estudio
PARTIDO CANTIDAD PROYECT. SUPERFIC. (hectáreas) % TIERRA OCUPADA POBLAC. ESTIMADA  PORCENT. POBLAC. ESTIMADA
PILAR (Zona Norte) 104 – 2 megaproy. 6085 16,33 165.720 127,28
S. MIGUEL (Zona Oeste) 16 355 4,30 10.082 4,74
CAÑUELAS (Zona Sur) 9 2238 1,88 13.669 44,21
Fuente: elaboración propia.


En principio, debemos afirmar que los valores absolutos de superficies destinadas a usos residenciales no parecen altos. Sin embargo, en términos relativos la cantidad de hectáreas en el partido de Pilar, supera la superficie de la ciudad cabecera. En el caso de San Miguel esta superficie representa un tercio del área urbanizada. Y en el partido de Cañuelas estas más de 2.000 hectáreas equivalen a dos veces y media de la superficie de la ciudad principal.

Por otra parte, los dos megaproyectos de Pilar se perfilan como dos nuevos pueblos. Pilar del Este, a escasa distancia de la localidad de Villa Rosa, podrá albergar más de 25.000 habitantes y contará con escuelas, centros de abastecimiento y otras amenidades, proyectadas para cubrir la demanda de los catorce barrios que incluye esta mini-ciudad. Algo similar sucede con el emprendimiento denominado Estancias del Pilar, que se sitúa en las proximidades de la localidad de Manzanares, pequeño pueblo de 4.000 habitantes. En este caso la ciudad-pueblo nueva tendrá una capacidad para alojar alrededor de 20.000 habitantes. Cabe agregar que en su conjunto la población de las urbanizaciones cerradas representaría un aumento de más del 100 por ciento de la población actual del partido mencionado.

En el partido de San Miguel, los emprendimientos privados aún no han adoptado dimensiones llamativas, con excepción del Buenos Aires Golf, que cuenta con una superficie de 200 hectáreas y en cuyo loteo podrían asentarse alrededor de 3.500 habitantes. La cantidad total de hectáreas afectadas a los nuevos proyectos, sólo representa un 4 por ciento del territorio del partido. Asimismo en términos de población, el crecimiento no sería tan impactante: un 5 por ciento en relación a la población total. Tal vez, el aspecto que debería demandar mayor atención es la inserción de los conjuntos cerrados dentro de tejidos urbanos ya consolidados.

Por último, se desprende de la lectura del cuadro que la situación de Cañuelas no es tan ventajosa, como parecería. En efecto, si bien las nuevas urbanizaciones no llegan a ocupar un 2 por ciento de la superficie total del partido, la población potencial a localizarse en estos proyectos supondría un aumento superior al 40 por ciento de la población existente. Si se analiza el efecto que puede producir el crecimiento de la población y de la superficie urbanizada, en lo que respecta a la planificación de los servicios de infraestructura, a los equipamientos comunitarios y a la relación urbano-rural del uso de la tierra, es válido afirmar que el impacto a nivel local de este nuevo producto urbano, podría ser bastante negativo.
 

Segregación, accesibilidad y marginalidad en el nuevo mosaico urbano

La accesibilidad máxima es la condición necesaria para trabajar en la ciudad y residir en los suburbios. De tal forma que la proximidad a vías de tránsito rápido, es requerida para promocionar "urbanizaciones a 20 minutos del centro". El eje de crecimiento Norte fue el primero en consolidarse gracias a la traza del Acceso Norte – Panamericana (posteriormente convertido en autopista), en especial el ramal Pilar que en las últimas tres décadas, ha impulsado las inversiones inmobiliarias. Los partidos de Tigre, Pilar y Escobar, son los que se sitúan a la cabeza en la aparición de grandes emprendimientos.

El Acceso Norte en el triángulo formado por su bifurcación en los ramales Panamericana a Pilar y Panamericana a Campana, concentra casi el 80 por ciento de los clubes de campo y barrios cerrados de los partidos mencionados. En Pilar el resto de las urbanizaciones se localiza a lo largo de la Ruta Provincial nº 25 y la Ruta Nacional nº 8.

En el partido de San Miguel, casi el 90 por ciento de los proyectos está situado en un polígono delimitado por las vías del ex – FFCC Gral. Sarmiento, la Ruta Provincial nº 23 y el Camino del Buen Ayre. En este caso se combina la buena accesibilidad con la disponibilidad de tierras para ensanche urbano, englobadas dentro del Área Complementaria según el Código de Zonificación vigente.

En lo que respecta al partido de Cañuelas, la totalidad de los asentamientos privados se encuentran ubicados en vecindad con la Ruta Provincial nº 205 y con la traza de la nueva autopista Ezeiza – Cañuelas.

Sintéticamente, puede afirmarse al estudiar el plano del Área Metropolitana que alrededor de los tres ejes viales de mayor importancia (hacia el norte, hacia el oeste y hacia el sudoeste), se disponen las nuevas urbanizaciones en forma de "racimos", ignorando cualquier otro aspecto urbanístico que no sea el de una buena conectividad con el centro de Buenos Aires. La localización de los emprendimientos privados está concentrada a partir de los 40 Km. y hasta los 70 Km. de la Capital Federal.

La situación expuesta precedentemente es uno de los incentivos básicos para que ejecutivos, profesionales jóvenes bien remunerados y empresarios decidan formar parte de la "corriente de población" que cotidianamente se mueve desde las áreas suburbanas al centro para realizar sus actividades. En los últimos años, la posibilidad de contar con más de un auto por familia (hablando siempre de un nivel socioeconómico medio – alto) y de la modalidad de transporte tipo "charter" ha fomentado su radicación definitiva en los partidos de la segunda y tercera corona.

La fluida comunicación, como se dijo, es un requisito muy apreciado para la realización de ciertas actividades: dirigirse a los centros de abastecimiento, a los lugares de estudio, de trabajo, o de recreación. No obstante, la conexión con el resto de los barrios que integran "la ciudad abierta" tradicional, no es una condición tan indispensable. En este punto priman las necesidades de seguridad y privacidad.

Por este motivo, es que los proyectos más recientes tratan de incluir dentro del perímetro amurallado una variedad de servicios cada vez mayor. Así como a los countries de los años 70, les bastaba con poseer espacios para la práctica de deportes de fin de semana (canchas, piletas, etc.); los megaproyectos buscan recrear fragmentos de ciudad.

De tal forma que el nuevo mosaico urbano de los partidos que rodean a la ciudad de Buenos Aires, puede vislumbrarse como un conjunto de enclaves residenciales para grupos familiares de clase media-alta, bordeados por asentamientos (muchos de ellos ilegales) de muy baja calidad edilicia y carentes de infraestructuras básicas.

Este fenómeno es posible explicarlo también en función de las variables de accesibilidad, marginalidad y valores del suelo. En efecto, así como las autopistas son la base para la localización de las urbanizaciones privadas, los ferrocarriles suburbanos y el transporte público han facilitado que la población de bajos recursos esté instalada en la 2ª. y 3ª. corona del Área Metropolitana, donde el precio de los lotes es más bajo, por carecer de servicios. Asimismo el porcentaje de tierras suburbanas vacantes es alto, situación que ha favorecido el asentamiento de villas de emergencia.

Con respecto a los valores del suelo, los promotores inmobiliarios afirman que las tierras son baratas cuando la zona no es buena; es decir, que carece de infraestructuras básicas y/o es baja e inundable. El negocio consiste entonces en rellenar, fraccionar y colocar los servicios mínimos indispensables. De esta forma un lote puede costar a razón de 10 a 20 dólares el metro cuadrado, aunque este precio aumentará en función de los planes de financiación.

En síntesis, tierras de bajo costo inicial, ubicadas en zonas alejadas de los centros urbanos, pero con posibilidad de buena accesibilidad atraen a grupos de población diametralmente opuestos: la familia del empresario exitoso y la del desocupado.

Para demostrar el nivel de pobreza existente en los partidos que integran las dos coronas mencionadas, recurrimos al cuadro que sigue a continuación, que hemos elaborado en base a estadísticas censales provistas por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.
 
 
 


Cuadro 3 
Población con NBI residente en viviendas deficitarias
PARTIDOS PILAR SAN MIGUEL CAÑUELAS
POBL. TOTAL DEL PTDO. 130.195 212.254 30.900
POBL. c/ NBI 36.729 55.186 5.435
%POBL. c/ NBI 28,3% 26,3% 17,7%
POBL. EN VIV. DEFICITARIAS 49,1% 43,6% 34,1%
JEFES DE FLIA. S/ 

INSTRUCCIÓN

17,5% 16% 14,6%

El indicador de Necesidades Básicas Insatisfechas confeccionado por el Indec permite distinguir a la población que no tiene acceso a una vivienda digna, a un nivel de educación elemental y/o a un empleo formal. Este indicador nos ha resultado bastante útil para poder describir la composición de los habitantes de los partidos seleccionados.

Del cuadro nº 3 se desprende que en Pilar casi la tercera parte de la población no alcanza a cubrir sus necesidades básicas; en San Miguel esta cifra representa una cuarta parte y en Cañuelas, a pesar de contar con el menor porcentaje, el número de habitantes en condiciones de pobreza es alto (14,6%).

Los porcentajes de jefes de familia que no han tenido acceso a un nivel elemental de enseñanza y que además residen en viviendas deficitarias es muy semejante en los tres partidos. Es razonable suponer que estas personas no podrán acceder a puestos de trabajo medianamente calificados debido a su falta de instrucción, y que por ende sus salarios serán muy bajos; por lo tanto, tampoco con estos ingresos podrán mejorar las condiciones de su vivienda.

En los tres casos de estudio el indicador referido a la calidad del parque habitacional muestra una situación bastante crítica. En efecto, casi la mitad de las viviendas de los partidos de Pilar y de San Miguel no reúnen las condiciones básicas de habitabilidad. En cuanto a Cañuelas, más de una tercera parte del parque habitacional es deficitario.

Resumiendo, éste es el escenario urbano común a todos los partidos de la segunda y tercera corona del Área Metropolitana donde se implantan las urbanizaciones privadas, algunas de ellas con la dimensión demográfica de una ciudad mediana. Los denominados pueblos privados, como por ejemplo Pilar del Este, han sido concebidos como conjuntos de barrios cada uno de ellos cerrados y con seguridad propia; conectados con equipamientos comunes tales como centro de compras, escuelas, centros de esparcimiento, etc. Debe destacarse que en esta mini – ciudad los equipamientos de salud y de educación son privados y solamente accesibles para población de un estrato socioeconómico elevado.

Al respecto, sobre esta fragmentación del espacio urbano, el geógrafo D. Harvey (1997, p.12) reconoce que dicha situación esta llevando a la creación de compartimentos estancos para determinados grupos sociales, que ignoran lo que sucede en otras partes de la ciudad.

El fenómeno de segregación socio - espacial es totalmente necesario para mantener la utopía de la perfecta ciudad privatizada, cuyas características son la exclusividad social, la seguridad, la calidad ambiental, la funcionalidad y la autosuficiencia. (Cabrales Barajas, 2000, p.11)
 

A modo de conclusión

El crecimiento urbano de un área tan compleja como la región metropolitana de Buenos Aires no puede ser obra del azar o menos aún producto exclusivo del libre juego de la oferta y la demanda.

En los casos que hemos mostrado puede advertirse que el rol del estado es casi nulo. Los inversionistas y los promotores inmobiliarios han lanzado al mercado un nuevo producto urbano que ha tenido una muy buena aceptación por parte de grupos de población de altos recursos económicos; y en consecuencia se ha producido una transformación acelerada del territorio, contraria a toda normativa urbana.

Se hace difícil pensar que el resultado espacial de esta forma de crecimiento residencial pueda acarrear efectos positivos. Como señaláramos anteriormente, desde el punto de vista sociodemográfico, la segregación de los emprendimientos privados atenta contra la integración de los nuevos habitantes con los antiguos moradores de la zona. La autosuficiencia de los megaproyectos no contribuye a acrecentar la relación con los núcleos urbanos tradicionales, ni tampoco sirve para aumentar la oferta de servicios para estos últimos.

Asimismo la relación urbano-rural va quedando desdibujada, ya que ninguno de estos nuevos fragmentos de ciudad pueden formar parte de un proceso de crecimiento armónico de los centros urbanos existentes. Como se ha podido apreciar en algunos de los ejemplos, la población potencial duplicaría la existente y otro tanto sucede con la superficie urbanizada. En la actualidad, se están empezando a estudiar los efectos ambientales del aumento de las zonas urbanizadas. Los resultados de estas investigaciones seguramente serán de suma utilidad para elaborar una estrategia de planificación adecuada.

En síntesis, la situación de los partidos de la segunda y de la tercera corona presentan un escenario caótico: ciudades pequeñas y medianas con altas carencias de infraestructura y servicios y con sectores periurbanos dominados por la pobreza y la marginalidad; en medio de los mismos se levanta un conjunto de islotes de residencias de lujo rodeadas por murallas.

No creemos que ésta sea la mejor fórmula para descongestionar el Área Metropolitana ni tampoco que los beneficios de la localización de estos enclaves se expandan hacia la región circundante. La falta de un encuadre de planeamiento está mostrando como resultante espacial un conjunto de fragmentos de ciudad esparcidos dentro de áreas semi-rurales, sin poseer ningún principio ordenador en común con la estructura urbana y regional existente. Por lo tanto, sería aconsejable la implementación a corto plazo de una estrategia de planificación urbana, que permita organizar estos "fragmentos" de ciudad, creando escenarios más coherentes y adecuados al desarrollo local, y que además favorezca la expansión equilibrada y la desconcentración de la región metropolitana de Buenos Aires.
 

Bibliografía

CABRALES BARAJAS, L. Segregación residencial y heterogeneidad urbana. Los fraccionamientos cerrados en Guadalajara. II Encuentro Internacional Humboldt, Mar del Plata (Prov. Buenos Aires), 2000.

FRAGA, R. Un fenómeno sociocultural. Seminario de Barrios Cerrados, Documento de Memoria, Partido de Malvinas Argentinas (Prov. Buenos Aires), 1999.

HARVEY, H. Las ciudades fragmentadas. Reportaje del Diario Página 12, Buenos Aires 1997.

ROBUTTI, M. Y MORALES, B. Barrios Cerrados y Clubes de Campo. Problemática legal y administrativa. Buenos Aires: Seminario Internacional de Gestión urbana y de Ciudades, Universidad de Buenos Aires, 2000.

SZJANBERG, D. Urbanizaciones Cerradas en la Región Metropolitana de Buenos Aires. Jornadas Platenses de geografía, La Plata: Universidad Nacional de La Plata, 2000.

TAUBER, F. Cañuelas. Reflexiones y datos para una estrategia de desarrollo. Publicación de la Municipalidad de Cañuelas, Prov. Buenos Aires, 1995.

TIZADO, R. El barrio cerrado como oferta espacial. Seminario de Barrios Cerrados, Documento de Memoria, Partido de Malvinas Argentinas (Prov. Buenos Aires), 1999.

TORRES, H. Procesos recientes de fragmentación socioespacial en Buenos Aires. Suburbanización de las elites. Buenos Aires: Seminario de Investigación Urbana, Instituto de Investigaciones Gino Germani, 2000.
 

© Copyright: Sonia Vidal-Koppmann, 2001
© Copyright: Scripta Nova, 2001



Volver al principio de la página

Menú principal