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06-05-2024

Las cofradías de pescadores inician el proceso de regreso al mar de corales, gorgonias y esponjas recuperados por el proyecto LIFE ECOREST

Las cofradías de pescadores de Blanes y Llançà que participan en el proyecto LIFE ECOREST -una iniciativa para proteger los ecosistemas marinos- han iniciado el proceso de retorno al mar de corales, gorgonias, esponjas y otros organismos sésiles que habían sido capturados de forma accidental por las artes de pesca. Tras ser rescatados de las redes de pesca, estos organismos fueron recuperados en los equipamientos de los acuarios instalados en cofradías de pescadores de Girona y Vilanova y la Geltrú (Barcelona).

El proyecto LIFE ECOREST cuenta con la participación de un equipo de expertos encabezado por Cristina Linares y Andrea Gori, del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales de la Facultad de Biología y el Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona.

Esta iniciativa, coordinada por el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC) hasta 2026, tiene como objetivo restaurar cerca de 30.000 hectáreas de hábitats marinos profundos en Cataluña con la participación activa del sector pesquero. LIFE ECOREST tiene como socios la Universidad de Barcelona, la Federación Territorial de Cofradías de Pescadores de Girona, la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y el Fondo Mundial por la Naturaleza-España (WWF), y cuenta con el soporte financiero del Programa LIFE de la Unión Europea.

Restauración de los hábitats marinos profundos

En el marco del proyecto, los pescadores comienzan ahora a liberar organismos rescatados de las redes de pesca y recuperados en los equipamientos de los acuarios instalados en cofradías situadas en la provincia de Girona y en Vilanova i la Geltrú. Las primeras devoluciones han tenido lugar en Blanes y Llançà. Estos organismos se devuelven al mar en las zonas de veda permanente donde actúa el proyecto mediante el método Bádminton, una técnica que consiste en fijar los organismos a un lado rodado y devolverlos al mar desde la cubierta de los barcos pesqueros. Este proceso permite que los organismos lleguen al fondo marino y se mantengan en una posición erecta, que es óptima para su supervivencia.

Hasta ahora, esta metodología se ha empleado en campañas oceanográficas previas desarrolladas con éxito por la UB y el ICM-CSIC en el marco del proyecto, en el que se han liberado un total de 451 organismos en cuatro zonas de veda, en una profundidad entre 90 y 140 metros. Durante estas campañas, se ha utilizado de forma pionera un bioliberador (BiLi), diseñado para adaptar el método Bádminton a gran profundidad y así poder soltar un mayor número de individuos. Las gorgonias Eunicella cavolini, Eunicella singularis affita y Leptogorgia sarmentosa (briozous), el coral blando Alcyonium palmatum, así como diferentes especies de demosponjas han sido los principales organismos devueltos a las campañas oceanográficas. Gracias a las imágenes obtenidas a través de un vehículo submarino operado remotamente (ROV, por sus siglas en inglés), se ha podido comprobar el éxito de supervivencia de las gorgonias restauradas, que alcanza el 95% un año después de la primera devolución.

Tras el éxito en las campañas oceanográficas, en la nueva etapa iniciada ahora en el proyecto, la devolución de organismos se lleva a cabo desde los barcos de pesca. Las cofradías de pescadores de Blanes y Llançà han sido las primeras en devolver al mar a los organismos que quedaron enmallados en redes de pesca de forma accidental. Trasladados a los acuarios instalados en sus cofradías, estos organismos marinos se han mantenido y recuperado gracias al trabajo coordinado entre el equipo científico de la UB, el ICM-CSIC, las cofradías que participan en el proyecto. Hasta ahora, esta labor conjunta ha permitido rescatar de las redes de pesca y recuperar en los acuarios a más de 750 organismos.


Además de las acciones de investigación y conservación, también se está potenciando la gestión participativa de los pescadores que forman parte del proyecto, el fortalecimiento de los mecanismos de gobernanza y la sensibilización de la población sobre la importancia de conservar los profundos hábitats marinos.

Fuente: Prensa UB