Barcelona ante el futuro

La nueva Rambla tendrá más espacio para los peatones

Tras 2.028 días de retraso, el Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado esta semana la reurbanización de la Rambla de Barcelona.

MIKEL ELKOROBEREZIBAR BELOKI

Un tramo de la Rambla de Barcelona se reurbanizará en el año 2022. Desde que se aprobara el plan especial para su reurbanización en el 2016 y tras procesos participativos, concursos públicos y múltiples negociaciones políticas, el Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado esta semana la reurbanización de la Rambla, con un costo de 44,56 millones de euros que se incluirá en los presupuestos municipales de 2022. La oposición ha criticado el retraso: “¡Son ya 2.028 días los que marca el contador!”, denunció el concejal de ERC Jordi Coronas en la última Comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del ayuntamiento. Sin embargo, todos los grupos políticos han aprobado el proyecto por unanimidad. “Se prevé que en el 2022 se inicien las obras para convertir la vía en un paseo más confortable, verde, amable y cultural, con más espacio para los peatones y una mejora de la ordenación de los usos”, ha declarado el gobierno municipal mediante un comunicado.

“La Rambla será un espacio más ciudadano”, ha dicho la teniente de alcalde Janet Sanz en la última Comisión de Ecología, Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad del ayuntamiento. La obra comenzará por el lado más cercano al mar, exactamente, entre la estatua de Colón y Santa Madrona. Aunque la reurbanización no seguirá el modelo del urbanismo táctico, sí fomenta el mismo modelo de ciudad: “La futura Rambla reduce el espacio destinado al vehículo y da más al peatón”, ha asegurado el ayuntamiento. Los vehículos solamente podrán circular en vías de 3,5 metros de ancho en los laterales de la Rambla, y solo podrán pasar los vecinos, autobuses, bicicletas y los vehículos de mercancías. Todo el espacio ganado se destinará a los peatones.

La nueva Rambla tendrá tres plazas peatonales que se integrarán a la calle: el Espai Moja-Betlem, el Pla de la Boqueria y el Pla del Teatre. En la parte más cercana al mar, se ampliará la zona de paseo donde se juntan la Rambla, la plaza de Colón y la avenida Drassanes. Plantarán más árboles en la nueva zona y el pavimento tendrá un único nivel de un lado de la Rambla al otro.

El objetivo de la reurbanización de la Rambla es “promover la diversificación comercial, potenciar la vivienda, impulsar actividades culturales y remodelar el ámbito para favorecer el paseo y los encuentros”, según el Ayuntamiento de Barcelona.

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