Adolescencia es una serie que ha llegado más lejos por el boca a boca que por la promoción que le haya podido hacer la plataforma Netflix. La manera en la que está grabada, con cuatro planos secuencia, uno por episodio que hay, lo rápido que se ve la serie y la problemática real que ha expuesto a muchos hace que en lo que llevamos de año se haya convertido en la serie revelación. La manosfera, el conflicto que expone Adolescencia, es el espacio en Internet del discurso machista y antifeminista. Red Pill o Incel son algunos de los conceptos clave de este fenómeno, que están presentes en la serie de tendencia este 2025.
Una de las figuras referentes de este movimiento es Andrew Tate, antiguo kickboxer y una personalidad mediática en las redes sociales donde se proclama líder de este movimiento. También aparece referenciado en la serie. Además de fomentar los roles de género tradicionales y pensar que las mujeres pertenecen a los hombres ha dicho frases como: “No importa lo que una mujer quiera ser, si no tiene a un hombre dirigiéndola, la va a cagar. No están hechas para ser criaturas completamente independientes”. Esta persona estuvo en la cárcel, pero según él, eso le hace una persona más fuerte y lo convierte en un afortunado. Tanto a él como a su hermano se les acusa de formar parte de un grupo criminal organizado, tráfico de menores, agresiones sexuales a una menor entre los años 2012 y 2015, trata de personas y blanqueo de capital. ¿Se sentirá igual cuando sea extraditado a Reino Unido después de que acaben los procesos judiciales en Rumanía para cumplir su pena de cárcel?
En España, Amadeo Lladós (Llados) es uno de los referentes del movimiento en este país que presume de dinero, de mujer y coches. Además, pese a que no todos los jóvenes son así, hay mucho contenido en redes sociales donde los creadores son chicos menores de edad. Comparten las mismas ideas conservadoras sobre cómo debe ser un hombre y qué buscan en las mujeres. Un ejemplo de ello es el pódcast Punto de Vista, con cuentas de Instagram y TikTok para difundir su contenido. No solo hay hombres o niños fomentando este discurso sobre cómo debería ser una mujer. Martina Erregue es una influencer que dice que el dinero de la mujer es para ella, mientras que el del hombre es para los dos.

Jamie Miller, el protagonista de Adolescencia, es un chico inglés de 13 años que se declaró a Katy, su compañera de clase, después de que se difundieran fotos íntimas suyas por todo el instituto. Según él confiesa en el episodio cuatro: “Ahora está vulnerable, podré cazarla”. Katy lo rechazó y empezó a llamarlo incel (acrónimo para celibato involuntario en inglés) por redes sociales, cosa que lo hizo sentir todavía más avergonzado. La trama de la serie gira alrededor de la detención policial de Miller por haber asesinado a Katy. Son los adolescentes de la serie quienes explican a los adultos los conceptos de la manosfera y junto con las declaraciones de Jamie Miller, se llega a conocer un poco más los motivos por los que lo hizo.
La historia de la serie no está basada en hechos reales, pero uno de los creadores y al mismo tiempo el actor que interpreta al padre del protagonista, Stephen Graham, asegura que se inspiraron en varios casos reales. El otro creador de la serie, Jack Thorne, dice que su principal objetivo era plasmar el tema de la ira masculina. En el evento de Netflix Tudum se dijo que la serie se inspira en el libro Cries Unheard: Why Children Kill de Gitta Sereny.
En una entrevista con la investigadora predoctoral de la Facultad de Información y Medios Audiovisuales en la UB, Anna Iñigo, comenta que los contenidos de la manosfera buscan restablecer los valores tradicionales de la mujer. Es decir, que esté en casa, que provea al marido y que se dedique a cuidar su estética. Estos valores son muy antiguos y responden a la estructura del capitalismo. Este movimiento, igual que el fenómeno de las Trad Wifes, es un reaccionarismo hacia el feminismo y todo lo que ha conseguido. Sobre todo en los años 2017 y 2018 con la gran cantidad de asistentes a la manifestación del 8M y a partir de la Ley Trans en 2023.
El algoritmo de las redes sociales premia los contenidos más polémicos por encima de los críticos. El principal responsable de promover la ideología detrás del acto de Jamie Miller en Adolescencia es la estructura patriarcal. También existe una responsabilidad colectiva que consiste en no dar visibilidad a estos discursos y generar contenido crítico. Anna Iñigo menciona a Panatube como un creador de contenido que contrasta este tipo de discursos.

Lo que se comparte en internet, relacionado con la manosfera atenta contra la realidad de colectivos reprimidos. Esto se debe a que la gente que está a favor de estos discursos, no tienen interiorizado una mirada crítica contra la violencia sexual hacia la mujer. Los hombres jóvenes que son interpelados por estos discursos requieren unas expectativas de privilegios por ser hombres, cis, heteros y blancos. Es decir, el colectivo que no se siente representado con la lucha feminista, pese a que esta incluye a toda la sociedad. Al vivir en el momento de crisis que estamos atravesando, los jóvenes son el grupo social a los que más les puede apelar este tipo de discurso. Por lo que la manosfera es una alternativa xenófoba, racista y antifeminista que ofrece seguridad e individualización.
Desde el activismo feminista se debería hacer que el conocimiento de género llegue hacia toda la sociedad. Es complicado, como se ha dicho anteriormente, ya que el contenido de odio se viraliza más que el feminista. Una consecuencia a nivel social de priorizar la difusión de estos mensajes es que los avances que ha conseguido el feminismo se vean atacados y se desinformen a las diferentes capas de la sociedad. La sociedad no debe entender que el feminismo solo busca favorecer a las mujeres, sino que busca favorecer a toda la sociedad. Según Anna Iñigo esta sería la consecuencia más peligrosa. Otro ejemplo, comenta la experta, sería que se normalicen los delitos de odio y ese odio traspase de Internet a la realidad. Como pasa en Adolescencia, que no es solo una serie. Plasma una situación de la que los directores han encontrado casos reales para inspirarse y una ideología que les ha permitido crear toda una narrativa alrededor de la realidad desde la pantalla.