Se presentan los resultados del estudio PREDIMED sobre dieta mediterránea, liderado por investigadores de la UB

El estudio constata que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio.
El estudio constata que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio.
Investigación
(25/02/2013)

Los resultados del estudio Prevención con dieta mediterránea (PREDIMED) , publicado en la revista The New England Journal of Medicine, constatan que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio, de accidente vascular cerebral o de muerte por causa cardiovascular. El trabajo ha sido coordinado por el investigador Ramon Estruch, de la Facultad de Medicina de la UB y del Hospital Clínico, centros adscritos HUBc, el campus de salud de la UB. Han participado además la profesora Rosa M. Lamuela y su equipo del Grupo de Investigación de Antioxidantes Naturales, de la Facultad de Farmacia, ubicada en el campus de excelencia internacional BKC, responsables de la determinación de los biomarcadores de consumo de la dieta mediterránea.

El estudio constata que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio.
El estudio constata que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio.
Investigación
25/02/2013

Los resultados del estudio Prevención con dieta mediterránea (PREDIMED) , publicado en la revista The New England Journal of Medicine, constatan que la dieta mediterránea enriquecida con fruta seca y aceite de oliva virgen extra reduce en un 30% el riesgo de infarto de miocardio, de accidente vascular cerebral o de muerte por causa cardiovascular. El trabajo ha sido coordinado por el investigador Ramon Estruch, de la Facultad de Medicina de la UB y del Hospital Clínico, centros adscritos HUBc, el campus de salud de la UB. Han participado además la profesora Rosa M. Lamuela y su equipo del Grupo de Investigación de Antioxidantes Naturales, de la Facultad de Farmacia, ubicada en el campus de excelencia internacional BKC, responsables de la determinación de los biomarcadores de consumo de la dieta mediterránea.

La investigación forma parte del proyecto PREDIMED, un ensayo clínico multicéntrico llevado a cabo entre los años 2003 y 2011 en que se evalúa la eficacia de la dieta mediterránea en la prevención primaria de enfermedades cardiovasculares. El ensayo ha sido financiado por el Instituto de Salud Carlos III por medio de las redes temáticas de investigación cooperativa (RETIC RD06/0045) y del CIBER de Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn).
 
En este estudio de intervención nutricional se han incluido 7.447 personas de alto riesgo vascular, que han sido divididas aleatoriamente en tres grupos: dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva virgen extra, dieta mediterránea enriquecida con fruta seca (nueces, avellanas y almendras) y dieta baja en todo tipo de grasa (animal y vegetal). Los participantes fueron visitados cada tres meses por una dietista y participaron en sesiones educativas en grupo, en las cuales recibieron descripciones detalladas de la dieta mediterránea o de la baja en grasa, así como de los alimentos que contienen. De igual forma, se les proporcionaron menús, listas de compra y recetas adaptadas al grupo de dieta correspondiente y a cada estación del año.
 
Durante el estudio, a los participantes asignados a cada uno de los dos grupos de dieta mediterránea, se les entregó gratuitamente aceite de oliva virgen extra (un litro a la semana) o fruta seca (30 gramos al día: 15 gramos de nueces, 7,5 gramos de almendras y 7,5 gramos de avellanas).
 
Después de cinco años de seguimiento, se ha comprobado que los participantes de las dos ramas de dieta mediterránea presentaban menor frecuencia de infartos de miocardio, de accidentes vasculares cerebrales y de muerte por causa cardiovascular que el grupo de control. Estos resultados se publican hoy en la revista New England Journal of Medicine.
 
Según los investigadores, los resultados del estudio PREDIMED tienen una gran trascendencia; puesto que muestran que una dieta alta en grasa vegetal es más cardiosaludable que una dieta baja en todo tipo de grasas. Según los autores, este ha sido hasta ahora un tema controvertido, y el estudio aporta nuevos datos científicos para desestimar la idea de que es necesario reducir la grasa de la dieta para tener mejor salud cardiovascular.
 
Se espera que los resultados de este estudio aporten elementos de referencia en la práctica clínica dirigida a prevenir enfermedades cardiovasculares. Por otra parte, el diseño de este estudio, su alcance y la metodología empleada a lo largo de una década tienen un alto potencial en traslación al sector biomédico.
 
En el trabajo también han colaborado investigadores del Hospital Clínico, del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), de las facultades de Medicina de las universidades Rovira i Virgili, Navarra, Valencia, Canarias y Málaga, así como del Hospital Universitario Son Espases de Palma, del Instituto de la Grasa de Sevilla y de las redes de atención primaria de Barcelona, Sevilla, Tarragona y Valencia.
 
Artículo
Ramon Estruch, Emilio Ros, Jordi Salas-Salvadó, Maria Isabel Covas, Dolores Corella, Fernando Arós, Enrique Gómez-Gracia, Valentina Ruiz-Gutiérrez, Miquel Fiol, José Lapetra, Rosa Maria Lamuela-Raventos, Lluís Serra-Majem, Xavier Pintó, Josep Basora, Miguel Angel Muñoz, José V. Sorlí, José Alfredo Martínez, y Miguel Angel Martínez-González. «Primary Prevention of Cardiovascular Disease with a Mediterranean Diet». New England Journal of Medicine, 25 de febrero de 2013. DOI: 10.1056/NEJMoa1200303