La Universidad de Barcelona lleva a aprobación unos presupuestos para el mantenimiento del personal de la institución
El Consejo de Gobierno de la Universidad de Barcelona tratará mañana, 29 de mayo, la aprobación de unos presupuestos que aseguran la continuidad de la plantilla de la institución y la convocatoria y renovación de más de 500 becas de colaboración y predoctorales, una partida de becas de más de 3 millones de euros que cubrirán los colectivos más vulnerables de la Universidad de Barcelona. El presupuesto de este año 2013 es de 362,71 millones de euros, cifra que representa un descenso del 1,5 % respecto al presupuesto de 2012, que fue de 368,28 millones de euros, una reducción que se explica por la disminución de las inversiones.
La Universidad de Barcelona, tal como ha manifestado su rector, Dídac Ramírez, en diferentes ocasiones, ha decidido priorizar el capítulo de gasto de personal. Esta prioridad se concreta en la renovación de más de 200 plazas de personal de administración y servicios (PAS), más de 150 contratos de personal docente e investigador (PDI) temporal a tiempo completo, más de 50 contratos de PDI interino, más de 100 contratos para investigadores pre y posdoctorales y más de 50 plazas de los programas Ramón y Cajal y Juan de la Cierva. Las cuentas de la Universidad también incluyen la renovación de las más de 2.000 plazas de profesorado asociado existentes a principios de año.
Mediante la aprobación de este presupuesto, la Universidad de Barcelona también convocará más de 30 plazas de PDI a tiempo completo e indefinido y 50 de profesorado lector e investigador posdoctoral a tiempo completo.
La partida del presupuesto destinada a personal se sitúa en 252 millones de euros (más del 75 % del gasto total no finalista), e iguala la cifra ejecutada en 2012. De esta cantidad, 172 millones de euros corresponden a PDI y el resto, a PAS.
Con respecto al capítulo de ingresos, la financiación de la Generalitat se mantiene en 213 millones de euros, cifra que representa menos del 60 % del total del presupuesto, mientras que los ingresos propios de la Universidad de Barcelona continúan aumentando en peso hasta cerca del 31 %, es decir, 118 millones de euros aproximadamente. El otro 9,5 % corresponde a ingresos vinculados con la investigación.
Asimismo, la Generalitat de Cataluña debe 62 millones de euros a la Universidad de Barcelona, 54 de pagos corrientes y 8 de deuda histórica. De estos 54 millones, la mayor parte (alrededor de 42 millones) se debería haber hecho efectiva en 2011. Esta situación tiene un impacto directo sobre la tesorería de la UB y un efecto en forma de sobrecoste en el gasto financiero.
Se trata de un presupuesto equilibrado que cubre la prioridad del personal y las actividades universitarias. Son un ejemplo de ello algunas novedades de este curso, como por ejemplo la dotación de un fondo de 600.000 euros para un programa propio de becas que complementa la beca Equidad para paliar el incremento de precios de este año académico, o el adelanto de más de 1 millón de euros para proyectos de investigación a fin de reducir el impacto del cambio de criterio en la financiación de las nuevas convocatorias de proyectos por parte del Ministerio de Economía y Competitividad.
El Consejo de Gobierno de la Universidad de Barcelona tratará mañana, 29 de mayo, la aprobación de unos presupuestos que aseguran la continuidad de la plantilla de la institución y la convocatoria y renovación de más de 500 becas de colaboración y predoctorales, una partida de becas de más de 3 millones de euros que cubrirán los colectivos más vulnerables de la Universidad de Barcelona. El presupuesto de este año 2013 es de 362,71 millones de euros, cifra que representa un descenso del 1,5 % respecto al presupuesto de 2012, que fue de 368,28 millones de euros, una reducción que se explica por la disminución de las inversiones.
La Universidad de Barcelona, tal como ha manifestado su rector, Dídac Ramírez, en diferentes ocasiones, ha decidido priorizar el capítulo de gasto de personal. Esta prioridad se concreta en la renovación de más de 200 plazas de personal de administración y servicios (PAS), más de 150 contratos de personal docente e investigador (PDI) temporal a tiempo completo, más de 50 contratos de PDI interino, más de 100 contratos para investigadores pre y posdoctorales y más de 50 plazas de los programas Ramón y Cajal y Juan de la Cierva. Las cuentas de la Universidad también incluyen la renovación de las más de 2.000 plazas de profesorado asociado existentes a principios de año.
Mediante la aprobación de este presupuesto, la Universidad de Barcelona también convocará más de 30 plazas de PDI a tiempo completo e indefinido y 50 de profesorado lector e investigador posdoctoral a tiempo completo.
La partida del presupuesto destinada a personal se sitúa en 252 millones de euros (más del 75 % del gasto total no finalista), e iguala la cifra ejecutada en 2012. De esta cantidad, 172 millones de euros corresponden a PDI y el resto, a PAS.
Con respecto al capítulo de ingresos, la financiación de la Generalitat se mantiene en 213 millones de euros, cifra que representa menos del 60 % del total del presupuesto, mientras que los ingresos propios de la Universidad de Barcelona continúan aumentando en peso hasta cerca del 31 %, es decir, 118 millones de euros aproximadamente. El otro 9,5 % corresponde a ingresos vinculados con la investigación.
Asimismo, la Generalitat de Cataluña debe 62 millones de euros a la Universidad de Barcelona, 54 de pagos corrientes y 8 de deuda histórica. De estos 54 millones, la mayor parte (alrededor de 42 millones) se debería haber hecho efectiva en 2011. Esta situación tiene un impacto directo sobre la tesorería de la UB y un efecto en forma de sobrecoste en el gasto financiero.
Se trata de un presupuesto equilibrado que cubre la prioridad del personal y las actividades universitarias. Son un ejemplo de ello algunas novedades de este curso, como por ejemplo la dotación de un fondo de 600.000 euros para un programa propio de becas que complementa la beca Equidad para paliar el incremento de precios de este año académico, o el adelanto de más de 1 millón de euros para proyectos de investigación a fin de reducir el impacto del cambio de criterio en la financiación de las nuevas convocatorias de proyectos por parte del Ministerio de Economía y Competitividad.