El rector anuncia el impulso de las «prioridades sociales», en el acto de inauguración del curso 2015-2016

Imagen del Paraninfo durante el acto de inauguración.
Imagen del Paraninfo durante el acto de inauguración.
Institucional
(09/10/2015)

El Paraninfo del Edificio Histórico ha acogido esta mañana el acto de inauguración del curso académico 2015-2016 de la Universidad de Barcelona. Durante este acto, el rector, Dr. Dídac Ramírez, ha puesto de manifiesto que «ahora hay cierto consenso entre los expertos en considerar que se vislumbran señales de recuperación». «Si esto es así —ha remarcado—, desde la Universidad insistiremos en que ha llegado la hora de una mejor financiación, y por nuestra parte, de reforzar las prioridades sociales».

 

Imagen del Paraninfo durante el acto de inauguración.
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Institucional
09/10/2015

El Paraninfo del Edificio Histórico ha acogido esta mañana el acto de inauguración del curso académico 2015-2016 de la Universidad de Barcelona. Durante este acto, el rector, Dr. Dídac Ramírez, ha puesto de manifiesto que «ahora hay cierto consenso entre los expertos en considerar que se vislumbran señales de recuperación». «Si esto es así —ha remarcado—, desde la Universidad insistiremos en que ha llegado la hora de una mejor financiación, y por nuestra parte, de reforzar las prioridades sociales».

 

Este año, el encargado del discurso inaugural ha sido Joaquim Prats, catedrático del Departamento de Didáctica de las Ciencias Sociales de la Universidad de Barcelona. También han intervenido en el acto académico Salvador Alemany, presidente del Consejo Social de la Universidad, y Antoni Castellà, secretario de Universidades e Investigación del Departamento de Economía y Conocimiento de la Generalitat de Cataluña.

En su parlamento, el rector Ramírez recordó que «la ciudadanía acaba de expresar en las urnas sus preferencias sobre propuestas que afectan al futuro de Cataluña». «En la inauguración del curso académico 2012-2013 —dijo—, manifesté mi apoyo, como rector, al derecho a decidir del pueblo catalán. Cabe decir que no he variado mi opinión. Ayer, de manera coherente con estos antecedentes, el Consejo de Gobierno de la Universidad de Barcelona emitió un comunicado de apoyo al presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, y al resto de miembros de su Gobierno, ante su imputación».

Ramírez también ha destacado que «la cohesión social constituye uno de los máximos triunfos colectivos de los catalanes y de las catalanas de los últimos cuarenta años, y es un objetivo declaradamente compartido por todas las fuerzas políticas». «Nos gustaría también que fuera un objetivo común la mejora de la financiación de las universidades», remachó.

«Hemos sido tercos en la defensa de nuestro modelo cientificohumanista y en la prioridad de nuestro personal. Asimismo —ha precisado el rector—, hemos insistido en la necesidad de construir una universidad pública y de calidad en medio de recortes y regresiones. Hemos atribuido a la universidad la consideración de cuestión de Estado».

El rector ha reivindicado la cultura como «una herramienta de transformación social» y ha defendido las humanidades y las ciencias sociales. Antes de terminar su discurso ha querido recordar que el año próximo se conmemoran los cincuenta años de la Capuchinada: «La historia ya ha documentado lo que pasó entonces, y la ola de solidaridad que despertó en una ciudadanía —la catalana— que no desfalleció en la reivindicación de un sistema democrático. Traigo el recuerdo de aquellos hechos hoy para reclamar que no podemos olvidar los principios de libertad, democracia, justicia, igualdad y solidaridad que emanan de esta Universidad».

El presidente del Consejo Social, Salvador Alemany, ha iniciado su parlamento señalando la posición de liderazgo de la Universidad de Barcelona en formación, investigación y transferencia de conocimiento, tal como ponen de manifiesto los rankings, incluso en momentos no favorables, como han sido los últimos años. También ha destacado que, en la medida en que la situación del país lo permita, «es el momento de dejar atrás sacrificios y renuncias». Aseguró, además, que la Universidad de Barcelona está ahora más reforzada y mejor preparada para aprovechar las oportunidades de futuro. En este sentido, ha subrayado que el nuevo curso será el de reforma de las estructuras para lograr una institución más flexible y eficiente. Ha concluido que hay que ser «una universidad comprometida con un país que ahora más que nunca debe creer en sí mismo y en su papel en el mundo».

Antoni Castellà también se ha referido a que se viene de cinco años muy complicados y duros para el país, pero que empieza a haber una recuperación, y ha defendido que hay que revertir las restricciones presupuestarias. Castellà ha remarcado que la Universidad de Barcelona no solo ha mantenido sus estándares a pesar de las dificultades, sino que los ha incrementado. También ha mencionado el proceso de reforma de la Universidad de Barcelona y ha afirmado que «la universidad debe poder decidir por sí misma cómo se estructura y se gobierna». Castellano ha terminado su intervención con una referencia al momento político y a la creación de un Estado propio para Cataluña. Ha afirmado que la universidad es necesaria para hacer posible una Cataluña «culta, equitativa, democrática, y donde la justicia social lo abrace todo».

Durante la lección inaugural, titulada «La crisi de l'educació no és tan sols una crisi d'educació», el catedrático Joaquim Prats ha explicado que la crisis de los sistemas educativos es un fenómeno que tiene lugar en varios países y que los cambios sociales «han dejado obsoletos muchos de los planteamientos tradicionales de la educación», en referencia a las transformaciones en el ámbito de la comunicación y la información en un mundo globalizado. Ante esta realidad de cambio, Prats ha sido crítico con «el ruido mediático cuando se habla de educación». Ha afirmado que, «en la mayor parte de las ocasiones, la forma de abordar las cuestiones educativas no ayuda mucho a avanzar», y ha advertido que «la fórmula de importar modelos de otros lugares no suele funcionar».

Joaquim Prats ha explicado también las cinco finalidades que debe tener según él un sistema educativo socialmente justo y democrático: debe garantizar el principio de igualdad de expectativas; propiciar la cohesión social; promocionar el principio de solidaridad; ser un laboratorio privilegiado para practicar la democracia; y ser, por sí mismo, una pieza clave de progreso social y económico. Pese a señalar las antinomias que se dan en el sistema educativo y las dificultades existentes, Prats ha expresado «una profunda convicción en la capacidad regeneradora del sistema a pesar de las actuaciones de las administraciones». Ha asegurado que se deben «repensar los problemas a la luz de los nuevos modelos de organización social, los nuevos sistemas de comunicación e información, de la actual concepción y producción del conocimiento y, evidentemente, de las formas contemporáneas de entender los valores» . Finalmente, ha advertido contra la aplicación de las tendencias neoliberales y ha señalado la necesidad de dar «un nuevo sentido a la educación dentro de una concepción científica humanista de la realidad».

Joaquim Prats Cuevas es catedrático de la Universidad de Barcelona, ​​especializado en didáctica de la historia, análisis de los sistemas educativos e historia de las universidades. En el ámbito de la investigación, es director del programa de doctorado de Didáctica de las Ciencias, las Lenguas, las Artes y las Humanidades de la Escuela de Doctorado de la de la Universidad de Barcelona. También es director del Grupo de Investigación de Didáctica de la Historia, la Geografía y otras Ciencias Sociales (DHIGECS), reconocido por la Generalitat de Cataluña. Es autor de más de 140 publicaciones científicas y de divulgación académica sobre didáctica de la historia, sistema educativo e historia moderna. Ha formado parte de varios grupos de renovación pedagógica en el campo de la enseñanza de la historia (Germania 75, Historia 13-16, Eidos: Didáctica de la Historia del Arte, etc.). Entre otros cargos, ha sido presidente de la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Cataluña (AQU Cataluña) desde 2008 hasta 2013, secretario de Universidades e Investigación de la Generalitat de Cataluña y presidente del Consejo Superior de Evaluación del Sistema Educativo de Cataluña.

En el transcurso del acto, ha habido actuaciones del Coro de la Universidad, y la Dra. Isabel Miralles, secretaria general de la Universidad, ha presentado la memoria del curso académico 2014-2015. Asimismo, se han entregado los premios extraordinarios de licenciatura y de grado y las medallas de la Universidad de Barcelona al profesorado y al personal de administración y servicios jubilado durante el curso 2014-2015.

Es posible acceder a una selección de fotografías de la inauguración a través de este enlace.