Investigadores y representantes de la Administración proponen una nueva tipología de los ríos temporales para poder garantizar su conservación

Los ríos temporales —uno de los ecosistemas de agua dulce más comunes— son hábitats naturales de gran interés ecológico y paisajístico.
Los ríos temporales —uno de los ecosistemas de agua dulce más comunes— son hábitats naturales de gran interés ecológico y paisajístico.
Investigación
(04/05/2018)

Cerca de setenta gestores, investigadores y ciudadanos se han reunido en Barcelona del 3 al 4 de mayo en la conferencia final de LIFE+ TRivers, un proyecto financiado por la Unión Europea (UE) que ha desarrollado herramientas para diagnosticar el estado hidrológico y ecológico de los ríos temporales y mejorar su gestión de acuerdo con los objetivos de la Directiva marco del agua (DMA) de la UE. Entre las recomendaciones finales del proyecto, destaca la necesidad de crear una nueva clasificación de los ríos temporales, caracterizados por una gran variabilidad en el régimen hídrico (desde el flujo abundante de la primavera hasta épocas en que se llegan a secar completamente), que tenga en cuenta estas características especiales para poder mejorar la gestión y garantizar su conservación.

Los ríos temporales —uno de los ecosistemas de agua dulce más comunes— son hábitats naturales de gran interés ecológico y paisajístico.
Los ríos temporales —uno de los ecosistemas de agua dulce más comunes— son hábitats naturales de gran interés ecológico y paisajístico.
Investigación
04/05/2018

Cerca de setenta gestores, investigadores y ciudadanos se han reunido en Barcelona del 3 al 4 de mayo en la conferencia final de LIFE+ TRivers, un proyecto financiado por la Unión Europea (UE) que ha desarrollado herramientas para diagnosticar el estado hidrológico y ecológico de los ríos temporales y mejorar su gestión de acuerdo con los objetivos de la Directiva marco del agua (DMA) de la UE. Entre las recomendaciones finales del proyecto, destaca la necesidad de crear una nueva clasificación de los ríos temporales, caracterizados por una gran variabilidad en el régimen hídrico (desde el flujo abundante de la primavera hasta épocas en que se llegan a secar completamente), que tenga en cuenta estas características especiales para poder mejorar la gestión y garantizar su conservación.

LIFE TRivers es una iniciativa impulsada por un consorcio que integran el Grupo de Investigación FEHM (Freshwater Ecology, Hydrology and Management), de la Facultad de Biología de la Universidad de Barcelona, el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC), la Agencia Catalana del Agua (ACA) y la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).

Según las conclusiones recogidas al final de la primera jornada, en la que también han participado representantes de la Comisión Europea y varios gestores del agua de países como Portugal o Chipre e investigadores expertos de otros proyectos y países, la clasificación actual de los ecotipos de los ríos no incluye las características singulares de los ríos temporales, con un régimen hidrológico variable a lo largo del año y que, por tanto, presenta comunidades biológicas diferentes a las de los ríos permanentes. «Esta variabilidad significa que los indicadores que marcan el estado ecológico de los ríos temporales son diferentes de los indicadores de los ríos permanentes. Por lo tanto, es necesario establecer unos ecotipos que tengan en cuenta la hidrología de los ríos, de mod que las exigencias de conservación y los indicadores para poder evaluarlos se adecuen a las características de los ríos temporales», explica Narcís Prat, investigador principal del proyecto y director del Grupo de Investigación FEHM del Instituto de Investigación del Agua (IdRA) de la UB.

TREHS, un software para ayudar a los gestores

El primer problema de la clasificación y gestión de los ríos temporales es el desconocimiento de su régimen, ya que tienen una gran variabilidad hidrológica que dificulta diagnosticar su estado ecológico con las metodologías habituales, más pensadas para los ríos permanentes. Para solucionar esta problemática, LIFE TRivers ha desarrollado el software TREHS (Temporary Rivers Ecological and Hydrological Status), con el objetivo de ayudar a diagnosticar el estado ecológico de los ríos temporales. TREHS incorpora los datos históricos disponibles sobre los caudales de cada río, datos de simulaciones hechas a partir de modelos de escorrentía de agua e información adicional proveniente de fotografías aéreas y de observaciones puntuales de muestreos biológicos.
Además, LIFE TRivers ha integrado los conocimientos de la población sobre la hidrología de los ríos temporales utilizando encuestas a vecinos. «No solo el científico tiene información relevante; los vecinos pueden tener un conocimiento del régimen del río útil para gestionarlo, que supla las carencias de la información instrumental. Se trata de una metodología para empoderar a las personas», asegura Francesc Gallart, investigador del IDAEA-CSIC.

«El uso de TREHS ha permitido conocer el régimen hidrológico real y clasificar de nuevo las masas temporales, y a partir de esta información, rehacer las rutinas de muestreo y de evaluación», explica Carolina Solà, del Departamento de Control y Calidad de las Aguas de la ACA.

Detección del impacto humano en los ríos temporales

Durante la jornada, representantes de la ACA y la CHJ han presentado los primeros resultados de la aplicación del software TREHS a la gestión de los ríos de las respectivas cuencas. La información obtenida con TREHS ha servido para establecer que el 40 % de los ríos de las cuencas interiores de Cataluña tienen cierta estacionalidad, pero que el 31 % han de considerarse temporales o efímeros. Además, el software ha permitido comparar el régimen real del río con el régimen actual para averiguar cuál ha sido el impacto humano: «Los resultados muestran que aproximadamente un 15 % de los ríos están alterados por causas antrópicas, tanto por la extracción de agua —que transforma ríos permanentes en temporales— como por el vertido en exceso, que transforma ríos temporales en permanentes», destaca Carolina Solà.

En el caso de los ríos de la demarcación del Júcar, según Sara Jiménez, jefa del Servicio Técnico de la Oficina de Planificación Hidrológica de la CHJ, se ha establecido que un 23 % de los ríos de esta cuenca son temporales, y que un 15 % de estos lo son por causas antrópicas.

Refugios para la biodiversidad

Una vez establecido el régimen hidrológico del río, los investigadores han señalado la importancia de desarrollar indicadores adaptados a los ríos temporales para poder evaluar su estado ecológico. Entre los resultados del proyecto cabe mencionar que se ha comprobado si los indicadores del estado ecológico utilizados en ríos permanentes funcionan también en ríos temporales y se ha llegado a la conclusión de que estos indicadores deberían calibrarse para ríos temporales. Según la investigadora del FEHM Núria Cid, los ríos temporales presentan «una fauna única, y muchas veces en peligro por la falta de protección de las balsas que quedan durante la época de verano, refugios para la biodiversidad y muy importantes para la conservación de los peces».

Participación ciudadana en la evaluación de los ríos


Por último, durante la jornada también se han presentado las acciones sociales que se han desarrollado a lo largo del proyecto con el objetivo de sensibilizar sobre los ríos temporales a la ciudadanía y las partes interesadas. En primer lugar, se ha detallado el proceso de participación que implicó a los ciudadanos en el diagnóstico de los ríos temporales y en la elaboración de propuestas de gestión y conservación.

«Este proceso es importante porque obtiene el conocimiento de la gente del territorio, ayuda a buscar soluciones, fomenta el interés por la preservación de los ríos temporales y contribuye a la valoración de estos ríos», explica Alba Ballester, experta en procesos de participación ciudadana y gestión del agua que ha coordinado el proceso.

También se ha destacado la implicación de la ciudadanía mediante RiuNeT, una app de ciencia ciudadana que incorpora una versión simplificada de TREHS. Esta aplicación permite a cualquier persona con un teléfono inteligente evaluar el estado hidrológico y ecológico de un río. Una evaluación que luego es validada por los investigadores del proyecto. Hasta ahora, se han registrado en RiuNeT más de quinientas personas y ya se han validado 533 evaluaciones enviadas a través de la aplicación.

Curso sobre el software TREHS


La conferencia se ha cerrado con un curso sobre el software TREHS que ha tenido lugar en la sede de la Agencia Catalana del Agua. La formación ha incluido casos de estudio preparados para los participantes y también ha ofrecido la posibilidad de trabajar con datos propios.