El Parque Científico de Barcelona cumple veinte años como polo de innovación científica y empresarial

El Parque Científico de Barcelona es uno de los ecosistemas de referencia en Europa en cuanto a innovación científica, tecnológica y empresarial en ciencias de la vida.
El Parque Científico de Barcelona es uno de los ecosistemas de referencia en Europa en cuanto a innovación científica, tecnológica y empresarial en ciencias de la vida.
Institucional
(25/09/2018)

La necesidad de dotarse de un ecosistema que facilitara el flujo de conocimiento entre el entorno académico, la comunidad científico-técnica y el sistema productivo para mejorar la calidad de vida de la población llevó la Universidad de Barcelona a constituir en 1997 el Parque Científico de Barcelona (PCB), el primer parque científico de España.

A lo largo de estas dos décadas, el parque ha ampliado su superficie hasta alcanzar los 100.000 metros cuadrados y ha apoyado el proyecto emprendedor de más de trescientas empresas. En su bagaje también destaca haber creado la primera bioincubadora del Estado, en una primera etapa con el apoyo del Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial (CIDEM) de la Generalitat de Cataluña y, posteriormente, con el del Banco Santander.

El Parque Científico de Barcelona es uno de los ecosistemas de referencia en Europa en cuanto a innovación científica, tecnológica y empresarial en ciencias de la vida.
El Parque Científico de Barcelona es uno de los ecosistemas de referencia en Europa en cuanto a innovación científica, tecnológica y empresarial en ciencias de la vida.
Institucional
25/09/2018

La necesidad de dotarse de un ecosistema que facilitara el flujo de conocimiento entre el entorno académico, la comunidad científico-técnica y el sistema productivo para mejorar la calidad de vida de la población llevó la Universidad de Barcelona a constituir en 1997 el Parque Científico de Barcelona (PCB), el primer parque científico de España.

A lo largo de estas dos décadas, el parque ha ampliado su superficie hasta alcanzar los 100.000 metros cuadrados y ha apoyado el proyecto emprendedor de más de trescientas empresas. En su bagaje también destaca haber creado la primera bioincubadora del Estado, en una primera etapa con el apoyo del Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial (CIDEM) de la Generalitat de Cataluña y, posteriormente, con el del Banco Santander.

Veinte años después de que se pusiera la primera piedra, el Parque Científico de Barcelona es uno de los ecosistemas de referencia en Europa en cuanto a innovación científica, tecnológica y empresarial en ciencias de la vida. Es, asimismo, un polo de atracción de talento, donde más de cien entidades públicas y privadas interactúan en un entorno privilegiado. De ese modo se generan sinergias que fortalecen la colaboración y el intercambio de conocimiento para crear un nuevo tejido empresarial basado en las nuevas tecnologías.

El pasado 20 de septiembre, el Parque Científico de Barcelona dio el disparo de salida a las actividades programadas para conmemorar estos veinte años de vida: una gran fiesta de cumpleaños dirigida a los más de 2.700 profesionales que conforman la comunidad del parque. El evento lo inauguraron el rector de la Universidad de Barcelona, Joan Elias, y la directora general del PCB, Maria Terrades.

«Veinte años después de su nacimiento, el Parque Científico representa un orgullo para nuestra institución. En sus instalaciones trabajan algunos de los mejores investigadores de nuestro país. Por tanto, no solo es una pieza clave en el futuro de la Universidad de Barcelona, sino también del ecosistema de investigación catalán y estatal», afirmó el rector.

Para Maria Terrades, «el parque se ha convertido en una referencia de infraestructura científica de investigación pública y privada a escala europea, y es un reto diario y un honor asumir su dirección». «Llegar a estas dos décadas —ha subrayado— ha requerido hacer evolucionar el proyecto constantemente, y queremos celebrar los logros alcanzados con todas las personas e instituciones que los han hecho posibles con el acto festivo de este jueves y un acto institucional que estamos preparando para las próximas semanas».

El evento se llevó a cabo gracias al espónsor de Enantia, Esteve, el Grupo Ordesa, el Instituto de Biología Molecular de Barcelona (IBMB-CSIC) y Qiagen, así como el apoyo de Bellavista, los Centros Científicos y Tecnológicos de la Universidad de Barcelona (CCiTUB), el Instituto Empresarial de Biotecnología (IEB), Ferrer, Iproteos y ProteoDesign, y la colaboración de Estrella Damm, Ferrovial Servicios y Suez.


100.000 metros cuadrados llenos de investigación de excelencia, emprendimiento e innovación

Ubicado en el Campus Diagonal Sur y con una superficie total de 100.000 metros cuadrados, el Parque Científico de Barcelona es un ecosistema dinámico donde convive actualmente una comunidad innovadora integrada por más de cien entidades públicas y privadas y 2.700 profesionales (de los cuales, un 54 % son mujeres) que desarrollan su actividad principalmente en áreas emergentes de las ciencias de la vida.

En sus espacios tienen la sede cuatro grandes centros públicos de investigación: el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC) y el Instituto de Investigación Biomédica de Barcelona (IRB Barcelona) —acreditados como Centros de Excelencia Severo Ochoa—; el Instituto de Biología Molecular de Barcelona (IBMB-CSIC) —con una Unidad de Excelencia María de Maeztu: la Unidad de Biología Estructural—, y el Centro Nacional de Análisis Genómico (CNAG-CRG), que forma parte del Mapa de Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares (ICTS) de España.

En el parque desarrollan su actividad 75 empresas instaladas en él y asociadas (desde departamentos de I+D+ i de grandes compañías, a spin-offs y start-ups); once entidades sin ánimo de lucro, y doce grupos y centros de la Universidad de Barcelona (UB), entre ellos la Fundación Bosch i Gimpera, la oficina de transferencia de conocimiento, tecnología e innovación de la UB.

Otro valor diferencial del Parque Científico de Barcelona es el amplio abanico de servicios científicos y tecnológicos para facilitar la I+D+ i —tanto para las entidades instaladas, como para empresas y grupos de investigación externos, nacionales e internacionales—, que incluyen la oferta de las Plataformas Tecnológicas, la de los Centros Científicos y Tecnológicos de la UB (CCiTUB), y la de la Unidad ICCUB-Tech del Instituto de Ciencias del Cosmos (ICCUB).

Estos servicios se complementan con un programa de dinamización de la comunidad del PCB que busca multiplicar la interacción entre sus miembros y con el ecosistema de innovación.
El Parque Científico Barcelona tiene también entre sus líneas estratégicas la organización de actividades de divulgación científica para acercar la investigación a los ciudadanos, favorecer el diálogo entre el público y los investigadores, y fomentar vocaciones entre los jóvenes. Actualmente, en el marco de su programa Investigación en sociedad, organiza más de cien actividades anuales presenciales en las que participan cerca de 5.000 personas.

El primer parque científico de España

El origen de los parques científicos y tecnológicos está íntimamente ligado a la idea de universidad emprendedora. Nacidos en la década de los 50 en Silicon Valley —donde en 1951 vio la luz el Stanford Research Park de la Universidad de Stanford—, el modelo fue trasladado a Europa a finales de los años 60, concretamente al Reino Unido y Francia. La Universidad de Barcelona fue pionera en España cuando, en 1994, su Junta de Gobierno aprobó la reserva de espacios para la futura creación del primer parque científico de nuestro país. El objetivo era dotarse de un instrumento que facilitara la transferencia de sus capacidades científico-técnicas hacia la empresa y la sociedad en general.

El proyecto se desarrolló a partir de la creación, el 26 de septiembre de 1997, de la Fundación Parque Científico de Barcelona, constituida inicialmente por la Universidad de Barcelona con el apoyo de la Fundación Bosch i Gimpera y Caixa Catalunya. Años después se incorporaron a la Fundación la Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el BBVA y el Banco Santander.

La construcción del proyecto arquitectónico —que se inició en 1998 y se llevó a cabo en varias fases hasta 2012— tuvo el apoyo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), el Ministerio de Economía y Competitividad y el Plan E.

El modelo del PCB —como estructura clave del sistema de innovación, por la que confluyen centros de investigación universitarios, institucionales y empresariales en único espacio equipado con una potente oferta tecnológica— sirvió de referencia a la mayoría de los parques científicos creados en España posteriormente.

Web del 20 aniversario del PCB