En busca de las redes de pesca perdidas en la costa del Baix Empordà

Las redes perdidas pueden capturar organismos durante años —el efecto de la llamada <i>pesca fantasma</i>— y generar un impacto negativo en los ecosistemas oceánicos.
Las redes perdidas pueden capturar organismos durante años —el efecto de la llamada pesca fantasma— y generar un impacto negativo en los ecosistemas oceánicos.
Investigación
(07/10/2019)

El domingo 6 de octubre, la costa litoral de Palafrugell, en El Baix Empordà, fue el escenario de una jornada para luchar contra los efectos de la llamada pesca fantasma, causada por las artes de pesca y las redes perdidas en los fondos marinos.

La jornada consistió en caracterizar y diagnosticar los utensilios de este tipo abandonados en la zona, y en ella participaron expertos la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona. Impulsada por la Federación Catalana de Actividades Subacuáticas (FECDAS), esta iniciativa se incluye en la línea de actuación del Programa de acción marítima de la Generalitat de Cataluña (2018-2021) para mejorar la protección de la biodiversidad de los ecosistemas oceánicos.

Las redes perdidas pueden capturar organismos durante años —el efecto de la llamada <i>pesca fantasma</i>— y generar un impacto negativo en los ecosistemas oceánicos.
Las redes perdidas pueden capturar organismos durante años —el efecto de la llamada pesca fantasma— y generar un impacto negativo en los ecosistemas oceánicos.
Investigación
07/10/2019

El domingo 6 de octubre, la costa litoral de Palafrugell, en El Baix Empordà, fue el escenario de una jornada para luchar contra los efectos de la llamada pesca fantasma, causada por las artes de pesca y las redes perdidas en los fondos marinos.

La jornada consistió en caracterizar y diagnosticar los utensilios de este tipo abandonados en la zona, y en ella participaron expertos la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona. Impulsada por la Federación Catalana de Actividades Subacuáticas (FECDAS), esta iniciativa se incluye en la línea de actuación del Programa de acción marítima de la Generalitat de Cataluña (2018-2021) para mejorar la protección de la biodiversidad de los ecosistemas oceánicos.

Las redes y otros utensilios de pesca que se abandonan o se pierden en los fondos marinos son una amenaza grave para la vida marina en todo el mundo. Además de implicar una pérdida económica directa para los pescadores, que deben reponer el material perdido, las artes de pesca abandonadas afectan de forma negativa a los ecosistemas marinos y los recursos pesqueros, ya que capturan peces de manera pasiva pero sin ningún beneficio para las pesquerías, y además dañan los organismos bentónicos, como las gorgonias corales o las esponjas. Asimismo, las redes pueden crear situaciones de riesgo para la navegación y para los bañistas y submarinistas.

Recuperar las redes perdidas en el mar con criterios científicos

Durante la jornada en Palafrugell, los expertos de la UB y del IRBio proporcionaron formación especializada a más de una veintena de submarinistas para que pudieran caracterizar de forma adecuada las redes abandonadas y su nivel de integración en el medio marino. De este modo les fue posible valorar si la retirada de estas artes podía producir en los ecosistemas efectos más negativos que los derivados de mantenerlas en el fondo.
 
Este año, el proyecto para localizar todas las artes de pesca perdidas o redes fantasma de la costa catalana ha desplegado una primera fase de diagnóstico cualitativo de la situación —hasta los treinta metros de profundidad— a través de encuestas en línea, y una segunda fase de localización y caracterización de las artes de pesca perdidas.

En una tercera fase, el objetivo es caracterizar con detalle la situación y el estado de las artes de pesca perdidas en las áreas más afectadas. Esta información, una vez revisada por el equipo científico (UB-IRBio), facilitará las tareas de la Administración para la correcta extracción de utensilios de los fondos marinos.

En el marco del proyecto, también está previsto organizar unas futuras jornadas con el fin de recopilar información sobre esta problemática en el Camp de Tarragona, El Maresme, La Selva y LʼAlt Empordà. Además, el próximo noviembre se hará una campaña para retirar las artes de pesca localizadas. En ella participará un equipo profesional de trabajos subacuáticos que dispondrá de toda la información sobre la localización y caracterización de los utensilios abandonados, así como de los criterios científicos adecuados para minimizar el impacto de la operación de recuperación.

Cabe recordar que el primer protocolo elaborado en Cataluña para evitar los efectos de la pesca fantasma fue dirigido por Bernat Hereu, profesor del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales de la Facultad de Biología y miembro del IRBio, y coordinado por Joan Ylla, jefe de la Sección de Protección del Litoral y del Medio Marino de la Dirección General de Pesca y Asuntos Marítimos de la Generalitat de Cataluña.