Pardela mediterránea: un proyecto global para proteger una ave marina en peligro

Esta es una de las aves marinas más perjudicadas por las consecuencias de la actividad pesquera en todo el mundo. Foto: Camil Albert
Esta es una de las aves marinas más perjudicadas por las consecuencias de la actividad pesquera en todo el mundo. Foto: Camil Albert
Investigación
(29/01/2020)

Si el declive de las colonias de la pardela mediterránea se mantiene al ritmo actual, la población reproductora de esta ave marina se podría reducir en más de un 30 % durante los próximos cincuenta años. Este pequeño pájaro, que se distribuye sobre todo por el Mediterráneo oriental, está catalogado como vulnerable en la Lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

 

Impulsar el estudio de la biología y la ecología de esta especie por primera vez a escala global en el Mediterráneo y mejorar su conservación en el medio oceánico son los objetivos principales del nuevo proyecto que lidera el investigador Raül Ramos, de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona.

Esta es una de las aves marinas más perjudicadas por las consecuencias de la actividad pesquera en todo el mundo. Foto: Camil Albert
Esta es una de las aves marinas más perjudicadas por las consecuencias de la actividad pesquera en todo el mundo. Foto: Camil Albert
Investigación
29/01/2020

Si el declive de las colonias de la pardela mediterránea se mantiene al ritmo actual, la población reproductora de esta ave marina se podría reducir en más de un 30 % durante los próximos cincuenta años. Este pequeño pájaro, que se distribuye sobre todo por el Mediterráneo oriental, está catalogado como vulnerable en la Lista roja de especies amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

 

Impulsar el estudio de la biología y la ecología de esta especie por primera vez a escala global en el Mediterráneo y mejorar su conservación en el medio oceánico son los objetivos principales del nuevo proyecto que lidera el investigador Raül Ramos, de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona.

 

En el nuevo proyecto de conservación de la biodiversidad, financiado por la fundación suiza MAVA, participan diversas instituciones y entidades, entre las que destacan SEO/BirdLife, la Iniciativa de Investigación de la Biodiversidad de las Islas (IRBio), el Instituto Nacional Agronómico de Túnez (INAT), BirdLife Malta, la Universidad de Oxford (Reino Unido), la Universidad de Creta y la Universidad Jónica (Grecia), y el Instituto Superior para la Protección de la Investigación Ambiental-ISPRA (Italia), entre otras.

Desde el mar Balear hasta el mar Negro

La pardela mediterránea (Puffinus yelkouan) es uno de los pájaros marinos más perjudicados por el impacto de la actividad pesquera, que cada año llega a capturar de forma accidental más de 5.000 aves pelágicas y costeras en todo el Mediterráneo. A pesar de ser una especie endémica de este mar, esta ave marina del orden de los Procelariformes era considerada hasta hace no mucho tiempo la misma especie que la pardela balear (P. mauretanicus).

«Aún no hay un conocimiento global sobre la pardela mediterránea en la actualidad», detalla Raül Ramos, investigador Ramón y Cajal en el Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales. «Hoy en día, lo que existe sobre todo son trabajos esporádicos que evalúan algunos aspectos sobre colonias o poblaciones de esta especie, pero de forma aislada».

Abordar por primera vez el estudio de la pardela mediterránea a escala metapoblacional en el Mediterráneo —en concreto, en las regiones del mar de Alborán, en el estrecho de Sicilia y en el mar Egeo— es uno de los componentes más innovadores del nuevo proyecto. En el marco del trabajo, durante 2020 los expertos estudiarán de manera simultánea la ecología espacial (con GPS miniaturizados) de cinco colonias de aves marinas, e integrarán datos de estudios previos para generar una evaluación global que incluya hasta ocho poblaciones diferentes de esta ave en el Mediterráneo.

El proyecto aportará datos inéditos que ayudarán a definir las principales zonas de alimentación de la pardela mediterránea en el medio natural, el grado de solapamiento entre las distintas poblaciones, el patrón alimentario y las áreas de coincidencia entre los barcos pesqueros y estas aves marinas. El trabajo también evaluará cuáles son las interacciones entre pesquerías y aves marinas que se producen en el marco de la Red de Áreas Marinas Protegidas (MPA), una figura de protección de la biodiversidad de los ecosistemas oceánicos.



De modo complementario, los expertos aplicarán la tecnología de geolocalización para conocer los patrones de migración y las zonas de invernada de las aves (estimadas principalmente en el mar Negro). El objetivo es perfilar con mayor precisión la distribución anual de cada población y el ciclo biológico general de esta especie amenazada.

«Con esta visión global, las conclusiones derivadas del nuevo proyecto aportarán datos científicos más robustos y relevantes para el conocimiento y la protección de esta especie en peligro», concluye Raül Ramos, que es miembro del Grupo de Ecología de Aves Marinas dirigido por el catedrático Jacob González-Solís.