Publicado el decimoprimer ʻInforme de sostenibilitat. El compromís de la UB amb els ODSʼ

Más allá del cambio de nombre, que se debe a la voluntad de adaptarse a la denominación más común para este tipo de documentos y a su vínculo con la recién creada Comisión de Desarrollo Sostenible, el documento presenta otras novedades relevantes. Por un lado, y por primera vez, se han recogido las contribuciones que hace la UB respecto al cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. En ese sentido, el documento recoge las actuaciones que ha llevado a cabo la Universidad con metas y objetivos de desarrollo sostenible concretos a los que se está contribuyendo. Por otra parte, y también por primera vez, se está elaborando una versión en papel del informe que complementará la electrónica. El documento en papel, que se publicará en octubre, ofrecerá la información en un formato más ameno y accesible a los usuarios, y será menos extenso que el informe electrónico que se presenta hoy.

En cuanto a los contenidos del Informe de sostenibilitat 2018-2019, aprobado por la Comisión de Desarrollo Sostenible a principios de julio, cabe destacar que el documento incluye un apartado sobre la Universidad de Barcelona y su gobernanza, otro sobre docencia e investigación, otro sobre compromiso social y otro sobre economía, y facilita información tanto interna (los impactos dentro de la organización) como externa (los impactos fuera de la organización). Este año, debido a la pandemia, el informe no ofrece la información referente al impacto medioambiental y el tratamiento de la seguridad y la salud de la Universidad, dado que en los últimos meses la Oficina de Seguridad, Salud y Medio Ambiente (OSSMA), encargada de suministrar estos datos, ha centrado sus esfuerzos en hacer frente a la crisis generada por la COVID-19 y, por tanto, no ha podido enviar la información solicitada. Por la misma razón, faltan algunas informaciones del Área de Organización y Recursos Humanos.

El informe se ha vuelto a elaborar siguiendo la adaptación completa del conjunto consolidado de estándares de la Global Reporting Initiative (GRI) para la elaboración de informes de sostenibilidad. Dicha adaptación fue fruto del trabajo conjunto del equipo de responsabilidad social de la Universidad de Barcelona y el de la Universidad Pompeu Fabra, con el fin de conseguir unos estándares más adecuados para analizar el impacto de una universidad pública (los estándares originales de la GRI están pensados ​​para aplicarlos a cualquier tipo de organización, pero tienen un sesgo más enfocado a las multinacionales del ámbito privado). Los modelos de la GRI son los más reconocidos en la elaboración de memorias de responsabilidad social y, por este motivo, la UB ha optado por partir de su propuesta de estándares.