Un estudio en el que participa la UB revela las tendencias recientes en la evolución de la nieve en el Pirineo oriental

La investigación analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán.
La investigación analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán.
Investigación
(07/05/2021)

Un estudio publicado en la revista International Journal of Climatology, en el que han participado investigadores de la UB, analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán. La investigación muestra que, en los últimos veinte años, a más de 2.000 metros de altitud no ha disminuido la nieve, sino que ha habido un aumento de precipitaciones en forma de nieve durante el invierno.

La investigación analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán.
La investigación analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán.
Investigación
07/05/2021

Un estudio publicado en la revista International Journal of Climatology, en el que han participado investigadores de la UB, analiza por primera vez la evolución reciente de la nieve en las cotas elevadas del Pirineo catalán. La investigación muestra que, en los últimos veinte años, a más de 2.000 metros de altitud no ha disminuido la nieve, sino que ha habido un aumento de precipitaciones en forma de nieve durante el invierno.

En el artículo se han evaluado las tendencias de acumulación de la nieve desde 2000 hasta 2020, y desde 1985 hasta 2020 en el caso de la estación meteorológica de Núria (Vall de Núria, 1.971 metros). El estudio se ha basado en los registros meteorológicos de las estaciones de montaña del Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC), situadas a más de 2.000 metros.

A más de 2.000 metros, la investigación ha detectado un aumento de la precipitación en forma de nieve durante el invierno. Esta tendencia se ha observado tanto desde el año 1985 como desde principios de los 2000, hasta el 2020. En el resto de la temporada, es decir, excluidos los meses de invierno, la mayoría de las estaciones también muestran una tendencia ligeramente positiva, mientras que en las estaciones situadas en la cara norte del Pirineo occidental la acumulación de nieve muestra una ligera tendencia negativa.

Sobre la relación entre este aumento de precipitaciones de nieve y el contexto actual de cambio climático, los autores exponen: «Si bien la cuenca Mediterránea es una de las zonas del planeta que más se ha calentado en las últimas décadas, como consecuencia del incremento de gases de efecto invernadero en la atmósfera, a la altitud en la que se ha centrado el estudio las temperaturas son lo bastante bajas durante los meses de invierno como para propiciar precipitaciones en forma de nieve de diciembre a marzo». Según estos expertos, el manto nivoso —la nieve acumulada— responde a esa presencia de precipitaciones.

Respecto a las causas del aumento de las precipitaciones de nieve en el periodo estudiado, el fenómeno podría responder a «la variabilidad en el régimen pluviométrico característica del clima mediterráneo». En conclusión, «los datos del estudio demuestran la sensibilidad climática del Pirineo catalán, con sectores donde ha aumentado la precipitación en forma de nieve en las últimas décadas a pesar del contexto climático global».

En cuanto a la evolución en un futuro, los investigadores señalan que los escenarios climáticos proyectados por los informes internacionales apuntan «hacia una disminución de la duración de la temporada nival por los extremos (inicio y final de temporada), más acentuada en cotas medias y bajas, en buena parte debido al calentamiento global». Las últimas proyecciones de la Agencia Estatal de Meteorología para el Pirineo oriental prevén un ligero aumento de la precipitación (en torno al 10 %). «Sin embargo —subrayan los expertos—, hay que seguir tomando datos y ampliar ese trabajo a sectores del Pirineo donde la disponibilidad de datos es escasa, para monitorizar mejor los efectos del calentamiento global en el paisaje de montaña y la repercusión que tiene en las actividades socioeconómicas que dependen de la nieve».

El estudio también revela cómo las estaciones situadas en la vertiente norte del Pirineo occidental catalán acumulan prácticamente el doble de nieve por temporada que las situadas en los sectores orientales del Pirineo catalán. En este sentido, la configuración orográfica tiene un papel importante.

El estudio es el resultado del trabajo conjunto de técnicos e investigadores encabezados por el Grupo de Investigación Antarctic, Arctic and Alpine Environments (ANTALP) de la Universidad de Barcelona. El trabajo ha sido coordinado por Josep Maria Bonsoms (CESBIO, Universidad de Toulouse, CNES/CNRS/IRD/UPS); Sergi Gonzàlez (técnico e investigador de la Agencia Estatal de Meteorología); Marc Prohom y Pere Esteban (técnicos del SMC y miembros del Grupo de Climatología del Departamento de Geografía de la UB); Ferran Salvador-Franch (profesor e investigador de Geografía Física del Departamento de Geografía de la Universidad de Barcelona); Juan Ignacio López-Moreno (investigador del Instituto Pirenaico de Ecología, IPE-CSIC) y Marc Oliva (investigador Ramón y Cajal y profesor del Departamento de Geografía de la Universidad de Barcelona).

Referencia del artículo

Bonsoms, J.; González, S.; Prohom, M.; Esteban, P.; Salvador-Franch, F.; López-Moreno, J. I., y Oliva, M. (2021). «Spatio‐temporal patterns of snow in the Catalan Pyrenees (NE Iberia)». International Journal of Climatology, abril de 2021. DOI: https://doi.org/10.1002/joc.7147