Un estudio científico recomienda excluir y alejar los parques eólicos marinos de zonas protegidas del Mediterráneo

Los parques eólicos flotantes —los que mayoritariamente se implantarían en el Mediterráneo— requieren sistemas de amarres y anclajes de grandes dimensiones que pueden afectar la integridad del fondo marino.
Los parques eólicos flotantes —los que mayoritariamente se implantarían en el Mediterráneo— requieren sistemas de amarres y anclajes de grandes dimensiones que pueden afectar la integridad del fondo marino.
Investigación
(23/02/2022)

Un equipo científico de los ámbitos de las ciencias marinas y la geografía de la Universidad de Barcelona, la Universidad de Girona (UdG), el Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC) y el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC) recomienda excluir y alejar los parques eólicos marinos de las áreas protegidas del Mediterráneo debido a los graves impactos que estas instalaciones pueden provocar sobre la biodiversidad marina y el paisaje. Esta es una de las principales conclusiones del trabajo publicado en la revista Science of the Total Environment por el equipo en el que participa el profesor Jordi Solé, del Departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la UB.

Los parques eólicos flotantes —los que mayoritariamente se implantarían en el Mediterráneo— requieren sistemas de amarres y anclajes de grandes dimensiones que pueden afectar la integridad del fondo marino.
Los parques eólicos flotantes —los que mayoritariamente se implantarían en el Mediterráneo— requieren sistemas de amarres y anclajes de grandes dimensiones que pueden afectar la integridad del fondo marino.
Investigación
23/02/2022

Un equipo científico de los ámbitos de las ciencias marinas y la geografía de la Universidad de Barcelona, la Universidad de Girona (UdG), el Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC) y el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC) recomienda excluir y alejar los parques eólicos marinos de las áreas protegidas del Mediterráneo debido a los graves impactos que estas instalaciones pueden provocar sobre la biodiversidad marina y el paisaje. Esta es una de las principales conclusiones del trabajo publicado en la revista Science of the Total Environment por el equipo en el que participa el profesor Jordi Solé, del Departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la UB.

El estudio presenta una primera evaluación de los impactos ambientales potenciales de los grandes parques eólicos en el Mediterráneo y, en especial, en zonas de gran fragilidad ecológica y alto valor paisajístico. Como caso de estudio, se examina el megaparque eólico marino proyectado en el cabo de Creus y el golfo de Roses, donde confluyen ocho áreas marinas protegidas.

El equipo ha revisado cerca de 150 trabajos de todo el mundo. Este diagnóstico pretende ser útil para otros lugares del Mediterráneo y otros mares y océanos del mundo donde confluyan una elevada biodiversidad, la existencia de áreas marinas protegidas, un paisaje valioso, y unas actividades pesqueras y turísticas importantes a escala local.

En concreto, el estudio analiza por primera vez y de manera integral los impactos que pueden tener estas instalaciones sobre toda la columna de agua: desde el plancton hasta el fondo marino, y desde los peces y crustáceos esenciales para la pesca hasta las especies sensibles y protegidas, como ballenas, delfines, tortugas y algunas aves marinas.

El artículo destaca que los megaparques eólicos marinos pueden comportar «graves riesgos ambientales para el fondo marino y la biodiversidad de muchas zonas del Mediterráneo a causa de las particulares características ecológicas y socioeconómicas y la vulnerabilidad de este mar semicerrado». Asimismo, «no se pueden importar directamente modelos como los del mar del Norte», donde se han instalado muchos parques eólicos marinos. Para el equipo, el Mediterráneo se caracteriza por su «plataforma continental más estrecha, pero más heterogénea y una proporción de especies y hábitats amenazados más elevada que en los mares del norte de Europa».

Los parques eólicos, unas estructuras complejas

Las estructuras de los aerogeneradores son complejas. Bajo el agua, los parques eólicos flotantes — los que mayoritariamente se implantarían en el Mediterráneo— requieren sistemas de amarres y anclajes de grandes dimensiones que pueden afectar la integridad del fondo marino. Los mamíferos marinos pueden chocar o enredarse con este cableado. Además, el ruido generado por los parques eólicos se acumula con otros sonidos procedentes de actividades humanas —como la navegación— e impacta negativamente en el comportamiento de los mamíferos marinos.

Además, estas plataformas flotantes son también una fuente de atracción de especies invasoras o especies oportunistas que pueden alterar el frágil equilibrio local de la biodiversidad. Este fenómeno es especialmente preocupante para los investigadores porque el Mediterráneo es el mar europeo más afectado por la llegada de especies exóticas.

Adicionalmente, los aerogeneradores flotantes — que miden más de 250 metros de altura— pueden modificar la dinámica de corrientes atmosférica y oceánica locales. Esta circunstancia puede afectar la producción de plancton en un mar que es típicamente pobre en nutrientes.

El estudio también reivindica la necesidad de mantener la biodiversidad marina para luchar contra el cambio climático y mitigar sus efectos. Según los autores del artículo, se ha demostrado que los hábitats marinos tienen un gran potencial de almacenamiento de carbono y constituyen una solución de la propia naturaleza para esta problemática. Para el equipo científico, los ecosistemas con mayor biodiversidad son más resistentes a los impactos del cambio climático.

Áreas protegidas en el cabo de Creus

Los impactos ecológicos de los parques eólicos marinos serían «especialmente graves en zonas de gran biodiversidad y fragilidad como el cabo de Creus y el golfo de Roses», alertan los autores. En este punto, confluyen hasta ocho áreas marinas protegidas reconocidas nacional e internacionalmente. Según los acuerdos internacionales, se debe proteger un mínimo del 30 % de los mares y océanos para 2030. Los investigadores recuerdan que, actualmente, en el estado español esta cifra representa el 12 %.

El estudio alerta de los riesgos de accidentes asociados a fenómenos meteorológicos extremos, que cada vez serán más habituales con el cambio climático. También advierte de los problemas inherentes a los propios aerogeneradores, como la caída de la estructura al mar y los choques de barcos. El equipo científico subraya que estos proyectos comportan la industrialización de la costa en zonas de alto valor paisajístico. Por un lado, habría que ampliar la capacidad de los puertos próximos para la logística relacionada con la construcción y el mantenimiento de los parques eólicos marinos. Y, por otro lado, los mismos puertos albergarían las infraestructuras de producción de energía a partir de hidrógeno, que pueden representar riesgos específicos para el medio ambiente relacionados con el uso del agua y del suelo, la liberación de salmuera o las fugas de hidrógeno, entre otros.

Por último, el estudio advierte de que los impactos no se limitarán a la costa, sino que también llegarán a los municipios del prelitoral. Estas poblaciones deberán acoger infraestructuras (carreteras de acceso, subestaciones, líneas de transmisión de electricidad o estructuras temporales) que pueden dañar ecosistemas frágiles como, por ejemplo, los humedales.

Pesca y turismo

El trabajo científico pone de manifiesto que la exclusión de la actividad pesquera —incluida la pesca artesanal— de las zonas afectadas por los parques eólicos marinos puede tener consecuencias económicas, sociales y ambientales para los pescadores, la industria pesquera, las comunidades costeras que dependen de este sector y la sociedad en general. Además, los sonidos, las vibraciones y los campos electromagnéticos de los cables pueden hacer que las capturas mengüen. El debate sobre los impactos potenciales de los parques eólicos marinos sobre el paisaje será mucho más intenso en el Mediterráneo que en los países nórdicos, según los autores, y se relaciona con la relevancia del turismo costero y marítimo en el entorno de este mar. Por ejemplo, el parque eólico proyectado en el cabo de Creus se construiría a entre 8 y 30 kilómetros de la costa, mientras que en 2019 la distancia media de todos los parques eólicos marinos instalados en Europa era de casi 60 kilómetros respecto de la costa. Además, en términos económicos, un trabajo llevado a cabo en la costa catalana calculó una pérdida de ingresos de hasta 203 millones de euros por temporada turística.

Más recomendaciones para proteger el medio ambiente

El estudio concluye con una serie de recomendaciones para los responsables políticos con el objetivo de «racionalizar la carrera de propuestas de eólica marina en el Mediterráneo por parte de empresas energéticas». En primer lugar, según los científicos, hay que aplicar el principio de precaución «para garantizar el nivel más elevado de protección del medio ambiente mediante la toma de decisiones preventivas en caso de riesgos ambientales evidentes, como es el caso de la Costa Brava».

El trabajo también recuerda que se deben cumplir los mandatos de la Unión Europea en relación con la economía azul. Así, los autores apuestan por considerar un enfoque ecosistémico, es decir, que no solo se tengan en cuenta la diversidad de especies y hábitats, sino también las funciones ecológicas para las diferentes especies —zonas de alevines, zonas de alimentación, zonas de puesta, corredores de migración, etc.— y los bienes y servicios de los ecosistemas asociados. Artículo de referencia: Lloret, J.; Turiel, A.; Jordi, S.; Berdalet, E.; Sabatés, A; Olivares, A.; Gili, J.M.; Vila-Subirós, J.; Sardá, R. «Unravelling the ecological impacts of large-scale offshore wind farms in the Mediterranean Sea». Science of the Total Environment, febrer de 2022. Doi: 10.1016/j.scitotenv.2022.153803

 

Artículo de referencia:

Lloret, J.; Turiel, A.; Jordi, S.; Berdalet, E.; Sabatés, A; Olivares, A.; Gili, J.M.; Vila-Subirós, J.; Sardá, R. «Unravelling the ecological impacts of large-scale offshore wind farms in the Mediterranean Sea». Science of the Total Environment, febrero de 2022. Doi: 10.1016/j.scitotenv.2022.153803