Un estudio paleobotánico muestra que La Cerdanya y el Pirineo oriental ya habían alcanzado su altura actual hace al menos 10 millones de años.

Imagen: Hoja fósil de arce (Acer tricuspidatum) del Mioceno de La Cerdanya. Autora: Aixa Tosal.

La Cerdanya es una fosa tectónica pirenaica formada hace unos 10 millones de años, en el Mioceno superior.  Actualmente el fondo del valle cerdano se encuentra a unos 1100 m de altitud media, en plena zona axial del Pirineo. Sin embargo en la última década ha habido cierta controversia científica sobre si esta altura responde a un fenómeno geológico relativamente moderno (cientos de miles de años) o bien resulta del levantamiento original del Pirineo (hace decenas de millones de años) . El trabajo de la investigadora AixaTosal, miembro del Instituto de Investigación de la Biodiversidad de la UB (IRBio), de los fósiles de plantas conservados en los sedimentos de un antiguo lago de la Cerdanya pueden ayudar a resolver este conflicto. El registro fósil del Mioceno de la Cerdanya es bastante completo y se ha estudiado desde principios del siglo XIX hasta la actualidad ininterrumpidamente. Destacan sobre todo los fósiles de plantas e insectos, que se han conservado enterrados en las arcillas que se sedimentaron en el fondo de un lago situado, hace unos 10 millones de años, en los alrededores de Bellver.

 

 

Un equipo del Departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano de la UB dirigido por el Dr. Carles Martín-Closas miembro del IRBio, ha llevado a cabo un estudio de las hojas de las dicotiledóneas fósiles de La Cerdanya basado en el método CLAMP (Climate Leaf Analysis Multivariate Program), que ha permitido conocer los principales parámetros climáticos de ese momento (Tosal et al., 2021). Este método se basa en la comparación de los caracteres adaptativos de las hojas (tamaño, forma, tipos de margen, ápice y base) con los que presentan las hojas de las plantas actuales. La base de datos climáticas de estas plantas actuales se ha obtenido en estaciones meteorológicas distribuidas por todo el mundo y que disponen de registros de más de treinta años consecutivos. Los resultados mostraron que la temperatura media anual era de 11.4 ± 2.1 ºC, la temperatura media del mes más cálido era de 21.6 ± 2.5 ºC la del mes más frío 1.8 ± 3.4 ºC la pluviometría de los 3 meses más lluviosos era de 661 ± 38 mm y la de los 3 más secos equivalía a 194 ± 229 mm. En consecuencia, la Cerdanya presentaba un clima bastante más cálido y húmedo que el actual, correspondiente al clima Cfb de la clasificación de Köppen, es decir un clima templado cálido y muy húmedo, similar al que existe actualmente en determinadas montañas de Japón. Es significativo que estas características climáticas eran más frescas y húmedas que las obtenidas en otras localidades europeas de la misma edad, casi todas situadas a poca altura sobre el nivel del mar del Mioceno superior.

 

 

Es bien sabido que la temperatura decrece en altura según una constante que varía según la latitud. Por lo tanto, si sabemos la temperatura de una estación meteorológica de altura conocida y la comparamos con otra situada a más altura podremos conocer la altitud de la segunda estación. En el caso del Mioceno de la Cerdanya, su temperatura se ha comparado con la obtenida en la antigua línea de costa, que se encontraba hace 10 millones de años en el Vallès, concretamente cerca de Terrassa, donde también se encuentra han conservado numerosos restos vegetales fósiles. El resultado ha sido claro: la Cerdanya ya se encontraba en el Mioceno superior entre 1100 y 1500 m de altitud. Las diferencias con estudios anteriores, que obtenían alturas de pocos cientos de metros por la Cerdanya se han atribuido a sesgos, ya sea en la conservación insuficiente de los materiales utilizados en análisis geoquímicos (el fenómeno que se conoce como diagénesis) o en la precisión del método empleado (indicadores poco específicos, como es el caso del polen fósil). Estudios similares deberían repetirse en otros puntos del Pirineo, donde los resultados pueden ser diferentes, para lograr un conocimiento más general de la altura de la cordillera en el pasado geológico.

 

Referencia

Tosal, A.; Verduzco, O.; Martín-Closas, C. 2021. CLAMP-based palaeoclimatic analysis of the late Miocene (Tortonian) flora from La Cerdanya Basin of Catalonia, Spain, and an estimation of the palaeoaltitude of the eastern Pyrenees. Palaeogeography Palaeoclimatology Palaeoecology, 564: 110186