Estamos inmersos en la crisis económica. ¿Qué papel tiene en este contexto una Facultad de Economía y Empresa?
De entrada, forma a los estudiantes y debe hacerlo con una visión amplia, con valores, para evitar algunas de las cosas que se han producido en esta crisis financiera. Es importante ofrecer una formación amplia, interdisciplinaria, que creo que las enseñanzas de la Universidad de Barcelona siempre han tenido.
Por otro lado, muchos de los profesores de esta Facultad participan como expertos en el debate sobre las políticas que mejor nos pueden permitir salir de la crisis, desde la reforma del mercado laboral a reflexiones sobre la regulación del mundo financiero. Creo que los académicos que tenemos un compromiso político y social aportamos un poco de rigor académico a la toma de decisiones políticas. Ésta es una característica de la Universidad de Barcelona y de esta Facultad en concreto: ha aportado a la vida social, empresarial y política del país muchos académicos.
Hace un año se unieron la antigua Facultad de Económicas y la Escuela de Empresariales. ¿Qué ha conseguido con este proceso y en qué momento se encuentra el centro?
Con la fusión hemos aprovechado la sinergia de los dos centros anteriores y hemos modernizado la oferta académica de la UB en el ámbito de la economía y la empresa, adaptándola al espacio europeo. Asimismo, tal como enseñamos en los estudios de Economía, hemos aprovechado las economías de escala para los servicios que se pueden prestar a los estudiantes. Y sobre todo, hemos aportado coherencia académica a la oferta de la Universidad de Barcelona en el ámbito de la economía y la empresa.
Como dice muy a menudo nuestro rector, la Universidad de Barcelona combina tradición y modernidad. No hay que olvidar que este centro es el que ha formado a la primera promoción de economistas de Cataluña y, por tanto, tenemos todo el legado de todos los que, como estudiantes o profesores, han pasado por esta Facultad. Esto, combinado con una dimensión que hace que tengamos profesorado especializado en todo tipo de materias y en todo tipo de líneas de investigación, nos permite ofrecer un amplio abanico de conocimientos en todos nuestros estudios. Y además, con la apuesta de siempre por la calidad y, en los últimos años, con un gran impulso de la investigación.
De cara al próximo curso, ¿cuál es la oferta del centro en grados adaptados al espacio europeo de educación superior (EEES)?
Ofrecemos cuatro grados: Administración y Dirección de Empresas (ADE), Economía, Sociología y Estadística (junto con la UPC). La oferta de la Facultad de Economía y Empresa es muy amplia y muy diversa, por ser una facultad grande y formar parte de la Universidad de Barcelona, lo que nos permite aprovechar muchas sinergias con otros centros y servicios. Así, el próximo curso ofrecemos el doble grado con Derecho, pero también otra titulación con una facultad como es la de Matemáticas de la UB, conocida por su nivel de calidad y excelencia: es el doble grado de Administración y Dirección de Empresas y de Matemáticas, pensado para el alumnado muy bueno en matemáticas en bachillerato. En el sector financiero cada vez está más valorada la gente que tiene mucha formación matemática.
En la Facultad, también hay una importante actividad de investigación.
En los últimos diez años se ha experimentado un gran incremento de la actividad de investigación en la Facultad y se ha fomentado la publicación en revistas internacionales indexadas de primer nivel científico. Por poner sólo un ejemplo, este último año 2009 la Facultad logró publicar setenta artículos en revistas internacionales indexadas en el Journal of Citation Reports del Social Science Citation Index, mientras que el año inmediatamente anterior esa cifra estaba en torno a cincuenta.
Otro hecho que denota el salto cualitativo y cuantitativo de la Facultad en los últimos tiempos en el campo de la investigación en economía es que en la convocatoria del año pasado nos concedieron dos premios ICREA Academia, un galardón que entrega la Generalitat de Cataluña (más concretamente, la Institución Catalana de Investigación y Estudios Avanzados, ICREA) en reconocimiento a la calidad investigadora. Y este año volvemos a tener un investigador de la Facultad premiado con el ICREA Academia. El reto que nos proponemos, en definitiva, es que los investigadores publiquen en aquellas revistas de mayor impacto, en las mejores.
¿Qué servicios ofrecen a los estudiantes para apoyarlos?
Un estudiante que llegue a nuestra Facultad se encontrará con un tutor para acompañarlo en los estudios a lo largo de toda la carrera. También se encontrará con una bolsa de trabajo y con una oficina de prácticas que gestiona más de 1.200 convenios con empresas al año. Es la Facultad de toda Cataluña que ofrece más plazas para cursar Erasmus en universidades europeas y cuenta también con convenios con otras áreas geográficas. Tenemos, asimismo, unas 400 plazas para cursar parte de los estudios en universidades europeas, norteamericanas, asiáticas, con diversos programas de movilidad.
Y nuestros estudiantes también pueden utilizar todos los servicios que ofrece una universidad tan grande como la UB (Escuela de Idiomas Modernos, Servicios Lingüísticos, Servicio de Deportes, con las pistas a diez minutos de la Facultad, etc.).
Ahora usted lleva sólo un año y pocos meses de mandato. ¿Cuáles son los principales retos que se ha marcado al frente de la Facultad?
Esta facultad inicia los grados adaptados al espacio europeo de educación superior el próximo curso. El primer reto es que la implantación de los grados se desarrolle con normalidad pero que además se aproveche la implantación de los nuevos grados para ponerse al día en términos de docencia en la Facultad. Con los nuevos grados, los grupos pasan a ser más reducidos. Habrá diferentes actividades, grupos desdoblados, clases de prácticas, seminarios... Se pasará a una docencia más centrada en el trabajo del estudiante, y ya no se verá tanto aquella docencia tradicional de clases magistrales con examen de evaluación única al final. La evaluación será más continua. El primer objetivo es que la implantación de los grados sea un éxito, que suponga una mejora de la docencia de todas las enseñanzas de la Facultad.
El segundo reto atañe a la investigación. Queremos mantener la progresión de los últimos diez años y, si cabe, dar otro salto: la internacionalización no sólo de la actividad del profesorado en términos de publicaciones internacionales, sino la internacionalización también del propio profesorado. Somos una facultad que tiene unos estudiantes muy internacionalizados: recibimos muchos estudiantes de grado de otras universidades del mundo, también en los másteres y el doctorado. Hasta ahora, la mayoría de nuestro profesorado se formaba en la propia Facultad y una universidad de excelencia debe aspirar a que las personas que forma puedan trabajar en todo el mundo, y a que el mejor talento de todo del mundo se sienta atraído por la universidad.
Se han empezado a dar pasos en este sentido: ya hay grupos de investigación y departamentos de la Facultad que están captando talento de fuera. Por ejemplo, contamos con investigadores de los programas Juan de la Cierva; algún profesor que se ha formado en universidades francesas u otros países del mundo; becas posdoctorales Marie Curie; ayudas ICREA para fichar a profesores de mucho nivel de todo el mundo... Este año se incorpora a la Facultad un profesor de sociología austríaco, Peter Wagner, con un ICREA Sénior, que es la parte del programa ICREA para captar profesores ya muy reconocidos en el mundo científico. Y este próximo curso la Facultad ofrecerá también tres contratos Ramón y Cajal de posdoctorado. Se espera que con estas becas vengan profesores formados en otras universidades extranjeras, en las mejores universidades del mundo.
Haciendo un símil con el Barça, se trata de combinar la cantera (profesorado bien formado de la UB) con fichajes que den esa combinación de excelencia característica de una universidad más abierta. Entre los profesionales formados aquí, tenemos también a los que han hecho el doctorado en la Universidad de Barcelona en Economía y que ahora son profesores o investigadores en grandes instituciones foráneas. Por ejemplo, Joan Costa i Font, doctor en Economía por la Universidad de Barcelona y profesor de la London School of Economics. Otro profesor que hizo el doctorado aquí, Carlos Garriga, es investigador en la Reserva Federal de los Estados Unidos. En definitiva, se trata de que seamos tan capaces de importar talento como de exportarlo.
