Conocimiento de un nuevo virus en murciélagos del Mediterráneo
Imagen:PauBalartiGarcia
Un equipo internacional de investigación, con participación destacada del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona, ha identificado una nueva especie de virus en murciélagos insectívoros del Mediterráneo.
El estudio, publicado en la revista PLOS Neglected Tropical Diseases, describe por primera vez el Mediterranean Bat Virus (MBV), un nuevo miembro del género Vesiculovirus.
Murciélagos como reservorios de virus emergentes
Los murciélagos son los huéspedes naturales de una amplia variedad de virus, en particular los que pertenecen a la familia Rhabdoviridae, que incluyen los lyssavirus, los agentes etiológicos de la rabia. Esta familia vírica es una de las más abundantes y diversas, con 434 especies oficialmente reconocidas. Sin embargo, la diversidad actual de estos virus en los murciélagos sigue siendo poco conocida.
La investigación, liderada por el Instituto Pasteur de París, ha contado con la colaboración del Dr. Jordi Serra-Cobo y Marc López-Roig, investigadores del IRBio se ha basado en el análisis de casi 2.000 muestras recogidas entre 2007 y 2019 en nueve países de Europa y África, incluyendo muestras de sangre, cerebro e hisopos orales de diversas especies de murciélagos.
Los resultados muestran que el MBV circula en poblaciones de murciélagos del género Rhinolophus y Miniopterus schreibersii a ambos lados de la región Mediterránea. Además, el virus ha sido detectado tanto en sangre como en saliva, lo que sugiere posibles vías de transmisión por vía hematógena u oral. La presencia del virus en muestras de sangre hace pensar que podría tratarse de un virus transmitida por artrópodos. La mayoría de las especies de vesiculovirus se transmiten por artrópodos, principalmente insectos, que se alimentan de la sangre de los vertebrados infectados.
Este descubrimiento amplía el conocimiento sobre la diversidad vírica en murciélagos y subraya la importancia de estos animales como reservorios naturales de virus emergentes. También pone de manifiesto la necesidad de continuar con la vigilancia activa y la investigación sobre el potencial zoonótico de estos virus.
"Este trabajo es un ejemplo de cómo la colaboración internacional y la recogida sistemática de muestras a lo largo del tiempo pueden dar lugar a descubrimientos relevantes para la salud pública y la conservación de la biodiversidad", destaca el Dr. Sierra-Cobo.
Nuevas técnicas moleculares
El estudio también ha permitido validar una nueva técnica molecular (pan-rhabdo RT-nqPCR) para la amplia detección de virus de la familia Rhabdoviridae. Esta nueva metodología puede rastrear múltiples especies víricas a la vez, incluso en muestras con poca carga viral. Esto puede ser clave para futuras investigaciones en este campo para tener un conocimiento más profundo de la biodiversidad vírica presente en la fauna salvaje, siendo especialmente útil para detectar virus emergentes antes de que puedan representar un riesgo para la salud pública.
