«¿Por qué ha decidido Banipal volver la vista ahora hacia el mundo hispanohablante?» Así abre Margaret Obank el número cero de la revista Banipal en lengua española. Banipal es una revista de divulgación sobre la traducción de la literatura árabe contemporánea, que nació en lengua ingl esa el año 1998, y que en este 2020, a pesar de la adversidad de la pandemia, estrena sus primeros números en castellano. Obank, directora de la revista, responde a su propia pregunta apoyándose en las tres razones que justificaron el nacimiento de Banipal en su versión inglesa: en primer lugar, debido a la centralidad de la literatura árabe en la cultura universal y la civilización humana; en segundo lugar, porque la literatura, y su traducción, sirven para difuminar las fronteras y fomentar el diálogo cultural, y en tercer y último lugar, por el mero placer de leer un buen poema o texto literario.
Visto así, una no puede evitar sentir resentimiento ante la propuesta de la nominación de Donald Trump para el Premio Nobel de la Paz, y no a la nominación de la editora de esta revista, que lleva fomentando el diálogo cultural desde 1998, el mismo año por cierto en el que él conoció a Melania en una fiesta neoyorquina, pero este es otro asunto.
En lo que a la traducción literaria se refiere, la revista no solo pone entre las manos del lector fragmentos literarios de los mundos árabes sino que, además, visibiliza un inmenso colectivo de traductoras/es, arabistas, académicos y expertos, que, al igual que Obank, ponen empeño en enseñarnos las distintas voces y los distintos matices que conlleva la etiqueta «árabe». Entre ellos destacan: Ignacio Gutiérrez de Terán Gomez-Benita, Joselyn Michelle Almeida, Maria Luz Comendador, Antonio Martínez Castro, Pilar Garrido Clemente y Ahmed Yamani.
La revista presenta una amplia variedad de textos. Desde El dinorafa, cuento infantil ilustrado, hasta la nueva traducción de Adonis, pasando por textos literarios entre los que destacan el realismo mágico de Raja Alem, la experimentación de Sargon Boulus, los cuerpos rotos de Rasha Omran, las aventuras de los chicos de Yasmeen Hanoosh, el laberinto Borgiano de Ahmed Abdulatif o la amargura de la primavera árabe de Sofiene Rajab, entre otros. Autores de diferentes generaciones reúnen vivencias extraordinarias alimentadas por el mismo ímpetu de expresar las experiencias humanas en tiempos de tumultuosa deshumanización.
Junto a los autores y traductores, la revista reserva un espacio para un/a autor/a o traductor/a invitado/a español/a donde se destaca su obra en homenaje a su trayectoria literaria e intercultural. Así, el último número resalta la obra de Clara Janés, Premio Nacional de Traducción en 1997 y referente literario en nuestra actualidad. Además, la revista cuenta con la colaboración de varios artistas árabes que muestran sus cuadros y fotografías entre los textos.
Otra de las curiosidades de Banipal es que cita en su título al rey Asurbanipal, el último gran rey de Asiria, fundador de la gran biblioteca de Nínive y defensor de la cultura y de las artes. De este modo, la revista se presenta como un espacio de convivencia cultural como se hizo hace siglos en la península ibérica, con plena conciencia de que la coexistencia literaria es la manera de autoalimentarse mutuamente de solidaridad y de respeto. Banipal es, en suma, un proyecto que apuesta por la literatura como instrumento de justicia social e intercambio cultural. Cabe decir que se trata de una apuesta valiente, principalmente porque procura minuciosamente no tomar partido en el debate y las polémicas políticas, una actitud que es, como se dice en árabe, una espada de doble filo.
*Estatua de Asurbanipal por Fred Parhad, San Francisco. Cortesía de sutori.com