Píldora formativa: Ejemplo de implementación de un Encuentro Sociodeportivo

En este artículo explicamos brevemente en qué consiste un Encuentro Sociodeportivo, desarrollando su estructura en diez pasos con ejemplos de juegos, retos y dinámicas cooperativas para favorecer la inclusión social de personas en situación o riesgo de exclusión social.

Los Encuentros Sociodeportivos se basan en una metodología desarrollada desde 1993 en la Universitat de Barcelona.

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Encuentros Sociodeportivos

Los Encuentros Sociodeportivos de la Universitat de Barcelona usan la actividad física como herramienta para favorecer la inclusión social y facilitar el bienestar físico y psicológico de las personas en situación o riesgo de exclusión.

La metodología de esta intervención socioeducativa se centra en juegos colectivos y retos cooperativos donde las personas participantes deben colaborar para conseguir el objetivo de cada juego. Estas actividades físicas dejan de lado la competitividad para fomentar vínculos positivos y saludables.

Cada Encuentro Sociodeportivo se diseña seleccionando los juegos y retos más adecuados según el número de personas y sus necesidades, para que todas puedan participar y disfrutar de la actividad de manera inclusiva. Este tipo de intervención se lleva a cabo por profesionales del ámbito del trabajo social, la educación, la pedagogía, la psicología o el deporte.

En esta píldora formativa presentamos un ejemplo de Encuentro Sociodeportivo, incluyendo su estructura y algunas propuestas motrices. No obstante, estos encuentros tienen muchos más juegos y retos que el de este ejemplo, dado que tienen una duración entre 2 y 3 horas aproximadamente. Lo hemos simplificado para que este artículo no sea demasiado extenso.

En publicaciones posteriores de este blog mostraremos más de estas propuestas motrices, hasta alcanzar las 80 que contiene la guía práctica que estamos preparando para los profesionales que quieran implementar Encuentros Sociodeportivos.

1. Acogida

Durante el tiempo destinado a la acogida, dos personas representantes de cada colectivo dan la bienvenida a las personas que participan en el Encuentro.

Los colectivos en nuestro caso son personas refugiadas y estudiantes de universidad, pero este tipo de intervención socioeducativa puede realizarse con otros colectivos en situación o riesgo de exclusión social y otros colectivos de su comunidad.

2. Ritual de inicio

Para empezar la sesión se lleva a cabo un ritual de inicio con el objetivo de que las personas participantes empiecen a conocerse. Para este ejemplo hemos elegido “La ola de nombres”.

La ola de nombres

• Tipología: Ritual de inicio y juego de identificación
• Material: Ninguno
• Descripción del ritual: Todo el grupo forma un gran círculo. Cada persona dice su nombre y lo que más le gusta. Puede ser cualquier cosa: deportes, comida, aficiones… Tras hacerlo, la persona da una vuelta entera corriendo por el interior del círculo, chocando las manos con todos los compañeros y compañeras. El resto, mientras tanto, la animan con entusiasmo. Cuando la persona vuelve a su sitio, la siguiente hace lo mismo, y así hasta que lo haya hecho todo el grupo.

3. Juegos de identificación

Este tipo de juego tiene el objetivo de que las personas participantes se conozcan un poco más, aprendiéndose sus nombres o conociendo algunos detalles de sus personalidades. Para el ejemplo hemos elegido un juego de memoria sobre nombres.

¡Hagamos memoria!

• Tipología: Juego de identificación
• Material: Ninguno
• Descripción del juego: Se forman grupos de entre 6 y 10 personas. Cada grupo se pone en pie, formando un círculo. Una persona empieza el juego diciendo su nombre. La persona que tiene a su derecha continúa diciendo el nombre de la persona anterior y el suyo. Y así, sucesivamente, hasta que la última persona debe decir los nombres de todo el grupo, desde la primera persona al suyo.
• Variante: Hagamos la mochila Esta variante sigue la misma dinámica que la anterior, salvo que se incluye una mochila imaginaria para hacer una actividad como ir a la playa, de excursión o a cualquier otra actividad que se nos ocurra. Se empieza el juego diciendo el nombre y un objeto que se pone en la mochila imaginaria. Se trata de repetir el nombre de las personas y el objeto de forma encadenada. Esta variante añade un poco más de dificultad.
• Observaciones: Si alguna persona no recuerda el nombre o se equivoca, entre todas le ayudan a recordarlo.

4. Juegos colectivos

Ahora que las personas se conocen un poco más, es hora de empezar a jugar y hacer ejercicio físico. De 3 a 5 juegos colectivos son suficientes para una sesión en la que van a realizarse también retos cooperativos.

Sin embargo, se puede modificar la estructura del Encuentro Sociodeportivo para que contenga más juegos y menos retos a discreción del profesional, según las necesidades del grupo. En este ejemplo vamos a mostrar un solo juego. En futuros artículos del blog publicaremos más.

El hechizo

• Tipología: Juego colectivo
• Material: Petos o pelotas
• Descripción del juego: Hay dos figuras en este juego: las personas que persiguen y las que son perseguidas. Las que persiguen llevan un peto o una pelota para ser identificadas y son las personas mágicas. Cuando una persona mágica toca a otra persona, la congela, convirtiéndola en estatua, y esta debe quedarse quieta en el lugar donde fue atrapada. Cada persona congelada puede adoptar la postura que prefiera para representar su estatua y podrá volver a moverse si otra persona que no ha sido atrapada se pone delante de ella e imita su postura con exactitud.
• Variante: Se pueden poner en práctica otras consignas para salvar a las personas que han sido convertidas en estatua: – Chocando las manos con ellas. – Haciendo un baile juntas (la una delante de la otra). – Cantando juntas. – Saludándose de una manera divertida.
• Observaciones: Se debe calibrar bien el número de personas mágicas para que el juego sea dinámico y que todo el mundo disfrute participando en él. Por ejemplo, para un grupo de 20 personas puede ser adecuado que entre 4 y 5 tengan el rol de personas mágicas. Asimismo, se debe observar la dinámica del juego con atención para identificar cuando llega el momento de cambiar los roles.

5. Retos cooperativos

Cuando terminan los juegos colectivos, se llevan a cabo los retos cooperativos. En ellos las personas deben ayudarse mutuamente, aportar ideas y comunicarse para conseguir el objetivo del reto.

Para realizar los retos cooperativos se deben formar grupos de 5 a 8 personas. Uno de los objetivos es que los grupos puedan ponerlos en práctica autónomamente y, una vez conseguido un reto, pase al siguiente. Por tanto, es necesario que haya más retos que grupos, de manera que todos ellos puedan resolver diferentes retos al mismo tiempo y que siempre tengan la opción de encontrar otro disponible.

En este ejemplo vamos a mostrar un solo reto. En futuros artículos del blog publicaremos más.

Superman

• Tipología: reto cooperativo
• Material: 1 colchoneta gruesa de seguridad, como mínimo
• Descripción del reto: ¡Una colchoneta nos permite volar! Debemos transportar a las personas participantes de un sitio a otro sin que toquen el suelo. Se debe utilizar la colchoneta gruesa de seguridad y hacerlo como si las personas se hubieran lanzado a la piscina al estilo de Superman.
• Normas: 1. Todas las personas participantes deben volar en el mismo momento. Nadie puede quedarse fuera de la colchoneta cuando ésta se desplaza. 2. Solo se puede utilizar la colchoneta para desplazarse hacia delante. 3. Todas las personas deben estar al mismo tiempo en la colchoneta.
• Variante: Hacerlo cogiéndose de las manos durante todo el proceso.
• Observaciones: Asegurarse de que el pavimento sea lo suficientemente liso para que la colchoneta resbale sobre él.

6. Juegos de vuelta a la calma

Tras hacer ejercicio, se realiza un juego de baja intensidad para que las personas participantes vuelvan a un estado de reposo.

La fotografía

• Tipología: Juego de vuelta a la calma
• Material: Ninguno
• Descripción del juego: Dos personas son las fotógrafas y el resto del grupo posa, inmóvil, para ser fotografiado. Las fotógrafas tienen un minuto para observar y tratar de recordar las posiciones de todas las personas del grupo. Tras el minuto de observación, las fotógrafas se vuelven de espaldas al grupo y dejan de observarlo. Entonces el grupo puede hacer 5 cambios: de posición entre personas, de posturas, añadir o eliminar elementos de la foto, cambiar expresiones de la cara, etc. Al final, las fotógrafas vuelven a observar al grupo y deben descubrir y corregir los cambios que se hayan hecho respecto a la fotografía inicial.
• Observaciones: Se pueden ir variando las personas que representen el rol de fotógrafas (no importa cuántas haya) y también se puede disminuir o aumentar el tiempo de observación de la fotografía inicial.

7. Ritual de clausura

Para finalizar el Encuentro Sociodeportivo se lleva a cabo una actividad simbólica de despedida, un gesto enérgico con el propósito de afianzar el sentimiento de pertenencia al grupo y de celebrar de forma conjunta el vínculo de equipo forjado entre las personas participantes.

Grito conjunto

• Tipología: Ritual de clausura
• Material: Ninguno
• Descripción del ritual: Es una dinámica que no requiere mucho tiempo y cuyo objetivo es lanzar de forma conjunta un mensaje final. Las personas que han participado en la jornada deciden juntas un lema que gritarán al unísono para ponerle punto y final. Para hacerlo, se sitúan en círculo y se cogen de las manos o por los hombros, creando una gran piña. Se inicia una cuenta atrás y, al finalizarla, todas juntas gritan el lema decidido. Si el grupo es muy numeroso, para evitar que las personas estén muy separadas entre sí, se puede hacer un corro exterior con otros más pequeños dentro del mismo.

8. Espacio de valoración y cierre

Cuando acaban los juegos motores y las relaciones del grupo ya son más fluidas, las personas participantes hacen una valoración en común del encuentro. Es un espacio relajado donde expresar sus sensaciones sobre la experiencia. Su duración depende del número de personas participantes, pero de 15 a 30 minutos suele ser suficiente.

Hay diferentes propuestas para hacerlo que publicaremos en futuros artículos de este blog. Para este ejemplo hemos elegido “Una palabra”.

Una palabra

• Tipología: Dinámica de cierre y evaluación
• Material: Ninguno
• Descripción de la actividad: En corro, cada persona piensa una palabra para definir el Encuentro Sociodeportivo y, una a una, la comparte con los demás.
• Variante: Situación destacada. Cada persona reflexiona sobre alguna situación que haya sido relevante para ella y, aquellas que lo deseen, la comparten con el grupo.

9. Preparación de la próxima sesión

A continuación, se trabaja conjuntamente en el diseño de la siguiente sesión, distribuyéndose los roles de persona dinamizadora de los juegos y el de liderazgo de la sesión tanto entre el estudiantado universitario como entre las personas en situación de riesgo o de exclusión social.

Todas las personas implicadas en la sesión pueden participar en la planificación y la propuesta de actividades para la próxima sesión. Pueden proponer cambios, mejoras o nuevos juegos.

Esta metodología procura que todas las personas participantes (alumnado, profesionales del sector y personas refugiadas) se impliquen en el proceso y se conviertan en agentes activos que proporcionen información adicional sobre el proceso de enseñanza y aprendizaje durante la preparación, el desarrollo y la valoración de los Encuentros Sociodeportivos.

10. Refrigerio

Finalmente llegamos al espacio de refrigerio, que suele durar entre 30 y 60 minutos. Es un picnic informal con comida y bebida donde las personas participantes pueden conversar relajadamente y conocerse mejor.

Este espacio tiene un valor indiscutible para el desarrollo de las habilidades sociales y comunicativas de ambos colectivos (personas en situación de refugio o asilo y estudiantes de universidad, en nuestro caso).