Lletra de dona es un espacio de publicación y difusión de reseñas de obras escritas por mujeres, dentro de los ámbitos tanto de la creación literaria (narrativa, teatro, poesía, ensayo, autobiografía) como de la teoría crítica
“Y allí estaba ella, sonriendo, los brazos descubiertos, el cuerpo expuesto. Rápidamente repasó en la memoria las veces que ella, a impulsos del amor, le había dicho pastel, casi con deseo de comérselo.” (144)
Ja ha quedat clar que no me’n vaig ensortir, m’he quedat sense casa sense dents sense mobles i sense la meva dona. Però el pardal és aquí sencer, dur com una mala cosa, la llengua també, i vaig llepant la figueta de l’Eulália, el foriol, i ella fa un crit fi, dur, un fuet, un os.
El vicario me dijo que una mujer no puede tener dos hombres. Que debe ser solo del esposo. Me dijo todo esto cuando yo fui a confesarme para el casamiento. Habló de una tal fidelidad o felicidad. Es una palabra que se parece a mi nombre. Que la tal fidelidad valoriza a las mujeres. (458)
On frappe. Un homme entre : 'Allez vous planquer, vous êtes sur la liste, vous et vos six enfants'. (…) Sans finir notre bouillon de légumes, sans tout à fait réaliser ce qu'avait dit l'inconnu, nous partons chez elle. Une station de métro sépare la rue Ordener et la rue Labat. Entre les deux, la rue Marcadet : elle me paraît interminable et je vomis tout le long du chemin.
La mujer enigmática no habla ni «se traiciona» por ninguno de sus poros. Le importa poco que el psicoanalista le niegue su ternura, ella no tiene cura, se basta a sí misma.