lesbiana, como desertora de clase

  • En otros idiomas
    lesbiana, com a dessertora de classe (català)
    lesbian, as a runaway from her own class (English)
  • Tipo de lema
    Conceptos
  • Remisión a conceptos
    paria consciente, transclase, tránsfugas
  • Tipo de figura
    Tránsfugas y parias
  • Motivo de exclusión
    identidad sexual
  • ¿Quién crea el concepto o figura?
    Monique Wittig
  • Autoría de la ficha: Sara Cordero Moll
  • Fecha: 18/11/2022
  • Para citar: Sara Cordero Moll. "lesbiana, como desertora de clase", Tránsfugas y parias, ADHUC-Teoria, Gènere, Sexualitat, Universitat de Barcelona, 18/11/2022. https://www.ub.edu/transfugas-parias/node/99

Las mujeres pueden “elegir” convertirse en fugitivas e intentar escapar de su clase o grupo (como hacen las lesbianas). […] Lo único que se puede hacer es resistir por sus propios medios como prófuga, como esclava fugitiva, como lesbiana

(Wittig 17)

Lesbiana es el único concepto que conozco que está más allá de las categorías de sexo (mujer y hombre), pues el sujeto designado (lesbiana) no es una mujer ni económicamente, ni políticamente ni ideológicamente

(Wittig 44-45)

El transclase sólo puede llegar a ser comprendido en el movimiento del tránsito por medio del cual hace la experiencia de una transidentidad y de la disolución del yo personal y social: se desclasa a riesgo de permanecer para siempre desplazado; está out of place, en la frontera entre el adentro y el afuera, en un entredós que lo expone a la fluctuatio animi

(Jaquet 2)

[Las lesbianas] somos desertoras de nuestra clase, como lo eran los esclavos americanos fugitivos cuando se escapaban de la esclavitud y se volvían libres. Para nosotras, ésta es una necesidad absoluta; nuestra supervivencia exige que nos dediquemos con todas nuestras fuerzas a destruir esa clase —las mujeres— con la cual los hombres se apropian de las mujeres. Y esto sólo puede lograrse por medio de la destrucción de la heterosexualidad como un sistema social basado en la opresión de las mujeres por los hombres, un sistema que produce el cuerpo de doctrinas de la diferencia entre los sexos para justificar esta opresión

(Wittig 45)

Lo sepan las lesbianas o no, su situación, aquí y ahora, en nuestra sociedad, está filosóficamente (políticamente) más allá de las categorías de los sexos. Prácticamente son desertoras de su propia clase (la clase de las mujeres), aunque sea de forma parcial y precaria

(Wittig 74)

Monique Wittig, tal y como constata en El pensamiento heterosexual y otros ensayos (Egales 2006), tiene una visión materialista del feminismo (teorizada, por primera vez, por Christine Delphy). La dominación de los hombres sobre las mujeres (el patriarcado), es analizado como una lucha de clases entre las categorías de sexo ‘mujer’ y ‘hombre’, que, para la autora, no son más que “categorías políticas y económicas” (Wittig 40) que toman sentido únicamente bajo el sistema político, económico e ideológico de la heterosexualidad. De este modo, esta visión rehúye de la esencialización del mito de “la-mujer” como una categoría sexual innata o biológica.

Para Wittig, “las lesbianas no son mujeres” (58), ya que escapan de este mandato de la heterosexualidad obligatoria, y “lo que constituye a una mujer es una relación social específica con un hombre” (45). La dominación de los hombres sobre las mujeres es la que crea la categoría de “sexo”, y a través de la dominación heterosexual, las mujeres (acorde con la división sexual del trabajo) asumen un trabajo reproductivo y de cuidados que genera una plusvalía que es dominada por los hombres a través de la institución de la familia nuclear y del matrimonio. De este modo, Wittig afirma que las lesbianas “somos desertoras de nuestra clase” (Wittig 37).  

La “lesbiana como desertora de clase”, así, es una paria consciente – consciente de su exclusión del mundo social, en términos de Arendt: de su acosmía – y, a su vez, se constituye como una tránsfuga de género y de clase. Como tránsfuga, ocupa un espacio liminar: “una lesbiana debe ser cualquier otra cosa, una no-mujer, un no-hombre” (Wittig 37). También podemos definir a la lesbiana wittigniana tomando el término de Chantal Jaquet “transclase” o “tránsfuga de clase” (acuñado por esta pensadora en 2014). La lesbiana escapa a su medio social, a la economía heterosexual que se impone a la clase de las mujeres, para transitar a otro medio social. Debemos añadir un matiz a la noción de Jaquet, en tanto que la lesbiana no estaría exactamente transitando de una clase (la de mujer) a otra (la de hombre), sino que, para Wittig, “el lesbianismo ofrece, de momento, la única forma social en la cual podemos vivir libremente” (44). De este modo, el transfuguismo que supone el lesbianismo se daría hacia la libertad como consecuencia de un escape de la categoría de los sexos y de la heterosexualidad.

Aun así, podemos justificar que se trata de una tránsfuga por este movimiento, este desplazamiento del sujeto y esta posición liminar que ocupa la lesbiana como desertora. Políticamente, para Wittig, escapa del entre-deux, ya que la lesbiana está “más allá de las categorías de los sexos” (74), pero socialmente sigue estando inscrita entre estas dos categorías de clase (hombre/mujer), sin formar parte de ninguna. La lesbiana como desertora de clase es “un sujeto en fuga” (Balza 110). Es una prófuga, una fugitiva, de la clase mujer que ocupa una posición desclasada, no normativa, lo cual permite poder “pensar un nuevo modo de constitución subjetiva” (Balza 89).

Así como Wittig, Chantal Jaquet pone el foco en “las relaciones interhumanas” (4), que producen los afectos. Los afectos serían, para esta pensadora, los que modifican la determinación social esperada “para desviarse del modelo predominante” (Jaquet 4). Aunque de una manera menos explícita, también en la teoría de Wittig podemos ubicar los afectos, o si más no, las relaciones (no relacionarse heterosexualmente) como el motor inicial del transfuguismo de clase/género que supone la figura de la lesbiana como desertora de clase.

Bibliografía
 
BÁSICA
  • Jaquet, Chantal. “Los transclase: escapar al propio medio social”. Red Universitaria Nómada, 2014.
  • Wittig, Monique. El pensamiento heterosexual y otros ensayos. Egales, 2006.
 
COMPLEMENTARIA
  • Balza Múgica, Isabel. “III. Hacia un feminismo monstruoso: sobre cuerpo político y sujeto vulnerable”, Suárez Birones, Beatriz (ed.), Las lesbianas (no) somos mujeres. En torno a Monique Wittig. Icaria, 2013, pp. 85-115.
  • Mattio, Eduardo. “Cómo ser lesbiana(s). El legado de Monique Wittig en disputa”. Estudios, n. 34, 2015, pp. 227-243.