El privilegio de vivir en Barcelona
Vivir en Barcelona se ha convertido en un lujo que cada vez menos se pueden costear. Aunque el Ayuntamiento de Ada Colau ha puesto la problemática de la vivienda en el centro de sus políticas de gobierno, sus adversarios le acusan de no haber estado a la altura de lo que la ciudad necesita.
Camila Beraldi
Es un problema para los jóvenes que quieren independizarse, pero también para los adultos que ya no pueden hacer frente a los costos. Vivir en Barcelona se ha convertido en un lujo. El precio del alquiler subió alrededor de un 50% en ocho años y la ciudad se sitúa entre las más caras de toda España. La vivienda es uno de los aspectos que más preocupan a los barceloneses y, en consecuencia, una de las claves de la contienda electoral. En este punto se ve, una vez más, el choque entre los dos modelos de ciudad: el que defiende la actual alcaldesa Ada Colau y el que propone el candidato de Junts, Xavier Trias.
Lucía Martín, concejala de vivienda y ex compañera de Colau en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), destaca que: “Nunca en la historia de la ciudad se habían hecho políticas de vivienda tan valientes y tan transformadoras como los últimos ocho años”. Martín hace especial referencia a la ampliación del parque público de vivienda: “Hoy somos la ciudad del Estado con más parque público de alquiler y eso hace pocos años no era así. En 2015 no era así y ahora lo es”. El parque público sumó aproximadamente 4.600 viviendas de alquiler. Este número, aunque resulta admirable, contrasta con los 8.000 que Ada Colau había prometido cuando asumió su primer mandato.
Delia Ccerare, actual miembro de la PAH, celebra los logros del Ayuntamiento pero, a pesar de haber sido compañera de Colau en la plataforma, no deja de ser crítica con su gobierno: “Se ha creado muchísimo. Son muchísimas viviendas públicas, pero no es suficiente”. Según Ccerare, otro de los grandes problemas de vivienda en Barcelona son los pisos vacíos. “En Barcelona hay miles de pisos vacíos que están cerrados, tapiados. Viviendas que tranquilamente podrían ser destinadas a familias vulnerables”, expresó la activista. Como voz de la Plataforma, Ccerare no manifiesta preferencia por ningún candidato en especial, pero destaca que: “Barcelona lo que necesita es que, quién entre, pueda hacer cambios. Creo que hay mucho por hacer”.
En el 2018, el Ayuntamiento aprobó una regulación que exige que en toda nueva promoción o rehabilitación residencial de superficies superiores a 600 m2 se debe destinar el 30% de la misma a viviendas de protección oficial. Esta medida, aunque bien intencionada, no ha demostrado la eficacia esperada. Desde su aprobación, según la Asociación de Promotores de Catalunya (APCE), se han creado únicamente alrededor de 120 pisos. Para Xavier Trias, estos números equivalen a un fracaso. El candidato de Junts asegura que ha generado el efecto contrario y que, debido al incremento de costes que la regulación supone, ha frenado la construcción. En una reciente entrevista el candidato aseguró que de resultar ganador, la suprimirá de inmediato.
Luego de varias idas y vueltas, esta semana podría ser aprobada la esperada ley estatal de vivienda en el congreso. La futura norma introduce, entre otros puntos, un tope permanente al aumento de los alquileres. Ada Colau afirmó que “Barcelona será la primera ciudad en aplicar la ley de la vivienda”. Para Xavier Trias, el problema del aumento de los alquileres “es un drama, viene de lejos y costará resolverlo”. Durante una intervención en el Fórum Europa Tribuna Catalunya, el candidato de Junts descartó “soluciones mágicas” como esta ley y propuso en cambio “un gran acuerdo” a nivel municipal, para que no cambie la política cada cuatro años.
