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¿Las bibliotecas del futuro o el futuro de las bibliotecas?

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Assumpta Bailac
Biblioteques de Barcelona


Future Libraries Programme (2012). Museums, Libraries and Archives Council (MLA) and the Local Gouvernment Association (LGA). 27 June 2012. London: LGA. <http://www.local.gov.uk/web/guest/culture-tourism-and-sport/-/journal_content/56/10171/3510698/ARTICLE-TEMPLATE>. [Consulta: 11/07/2012]. 


"The future libraries Programme" es una nueva iniciativa, promovida por el MLA -el departamento de museos, bibliotecas y archivos del gobierno- y la administración local inglesa, a través del Local Government Group, con el objetivo de proponer criterios y soluciones imaginativas para abordar la necesidad de reducir las aportaciones públicas locales en las bibliotecas. No sólo se ha buscado el ahorro, el concepto clave de todo el proceso ha sido "racionalizar".

El Programa se construye a partir de una convocatoria para proyectos de "mejora" municipales, estimulando la cooperación entre diferentes entidades locales. Se 'n presentan más de 50, con la participación de más de 100 ayuntamientos. De éstos 50 se seleccionan 10. Las ayudas del Programa son de apoyo técnico y económico a la formulación e implementación inicial de los proyectos seleccionados.

El informe se estructura en dos partes. La primera parte está orientada a remarcar criterios, en los ámbitos donde introducir cambios y con los elementos claves que hay que garantizar en el proceso. La segunda incluye la información concreta de los 10 proyectos seleccionados.

Los cuatro ámbitos donde se recomienda situar los procesos de cambio son:

1. - Los puntos de servicio
2. - Los nuevos modelos de provisión de servicio
3. - La cooperación, más allá de las divisiones administrativas
4. - La implicación de la comunidad en la gestión

Muchos ayuntamientos han empezado por racionalizar y adecuar el parque de equipamientos, identificando aquellos servicios ineficientes o analizando los usos de las bibliotecas para aplicar reducción horaria.

Los ayuntamientos tienen que poder demostrar que, con la racionalización propuesta, se continúa dando respuesta a las necesidades de los usuarios de la biblioteca, especialmente en las de aquellos colectivos más necesitados. Para hacer este análisis es básico trabajar con datos objetivos.

Buscar nuevas formas de provisión de servicio, con nuevos colaboradores en el tercer sector o en el ámbito privado, o buscando alianzas con municipios vecinos, básicamente servicios internos, técnicos o de gestión, han sido también líneas de trabajo iniciadas por los ayuntamientos ingleses . En estas actuaciones hay que asegurar que se cumplan las obligaciones que la Ley (Public Libraries and Museum Act 1964) fija para los ayuntamientos.

Las 10 condiciones necesarias para generar el cambio -tal y como las clasifica el informe-, que podemos agrupar en organización estratégica, capacidades internas, información de base y relación con el comunidad, son:

1. - Liderazgo e implicación política y directiva del proceso, con comprensión de lo que quiere la comunidad y la valoración de las necesidades, en el contexto de ajustes y en el marco legal.
2. - Nuevo modelo de gobernanza, con transparencia y evaluación ("accountibility"). Hay que asegurar bien el marco de cooperación y los sistemas de gestión y económicos que se utilizarán.
3. - Conexión de los servicios bibliotecarios con las prioridades de las políticas locales. Hay que demostrar que la biblioteca pública puede contribuir a los objetivos estratégicos del territorio.
4. - Capacitación interna. Hay que reforzar la capacidad de gestión, financiera y legal de los gestores. Los equipos y los representantes sindicales deben estar informados y conocer las implicaciones del cambio.
5. - Las oportunidades digitales, en aspectos como el carné único, las estrategias de marketing de servicios, el libro electrónico y los servicios en línea o la vinculación de los usuarios en el proyecto de la biblioteca.
6. - Conocimiento de experiencias de otros servicios en relación a cómo han abordado la situación.
7. - Análisis de las necesidades de la comunidad, especialmente de determinados colectivos. Debemos disponer de datos objetivos y poder hacer proyección de futuro.
8. - Conocimiento de los costes de cada servicio, con datos e indicadores que permitan la comparación.
9. - Vinculación con los usuarios y la comunidad, con un buen plan de comunicación y un sistema de información de todo el proceso. Es importante priorizar la información de los beneficios al objetivo de ahorro.
10. - Implicación de todos los agentes vinculados a la biblioteca (usuarios, trabajadores, proveedores...) en el proceso.

La información de los 10 proyectos, con la participación de 39 ayuntamientos, que conforma la segunda parte del informe, incluye un resumen de las propuestas, así como las respuestas a un cuestionario con 8 preguntas de valoración de todo el proceso.

Las propuestas que han emergido del trabajo tienen que ver con:

Prestar servicios en red de formas diferentes a los puntos de servicio convencionales
Buscar proveedores externos diferentes a los actuales (sector privado o tercer sector)
Compartir servicios con otros gobiernos locales
Facilitar a las comunidades la implicación en la gestión de la biblioteca

Para asegurar los diferentes proyectos es necesario:

Tiempo para implementar y consolidar los cambios
Compromiso de los responsables locales del servicio, políticos y gestores
Calidad en la gestión de los procesos
Análisis estratégico de las necesidades
Compromiso y comunicación con la comunidad y los medios de comunicación del entorno
Buscar apoyo externo para el cambio
Identificación clara de los costes y beneficios de las nuevas propuestas

Es relevante tener presente que algunas iniciativas pueden suponer una inversión inicial, pero que hay que valorar que este esfuerzo puede racionalizar después los gastos de funcionamiento.

Del Informe me gustaría destacar dos aspectos: el valor de la metodología utilizada, basada en la cooperación y la participación de los implicados en el servicio bibliotecario, y la constatación de que muchos de los proyectos proponen acciones que en Cataluña, y muy especialmente a la provincia de Barcelona, son realidades muy consolidadas (trabajo en red, servicios de apoyo centralizados...).

Sin embargo, el documento puede ayudar a inspirar a los responsables políticos y directivos de nuestro sistema. La necesidad de control del gasto afecta a todos los servicios públicos.

Las bibliotecas públicas creemos en la necesidad de contención y control, pero teniendo muy presente que los 15 euros por habitante, que es lo que cuesta el funcionamiento de las bibliotecas en la ciudad de Barcelona, son costes equilibrados teniendo presente el impacto social que tiene el servicio, especialmente en las actuales circunstancias.

Queremos y podemos hacer más con lo mismo, sería nuestra máxima en estos momentos.

En nuestro entorno hay espacio para la racionalización en la gestión de las bibliotecas. Y este proceso de mejora se debe hacer con todas las administraciones públicas implicadas. También hay espacio para la mejora de los servicios y de las fuentes de financiación, abriendo más vías de cooperación con otros agentes, públicos y privados. Las ciudades han de analizar y proponer iniciativas partiendo de su propia realidad, racionalizando los recursos del conjunto de sus redes. Y no podemos olvidar que la gran oportunidad de mejora debe venir del entorno digital. La dimensión virtual de los recursos y servicios nos ha de orientar en este camino que debemos recorrer. Y el Informe recoge algunas propuestas en esta dirección.