Análisis del ISBN en Iberoamérica

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Isabel-Cristina Arenas S.
6.ª promoción de la Escola de Llibreria
Universitat de Barcelona (UB)


González M., José Diego (2021). El espacio iberoamericano del libro 2020. Bogotá: Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc). 109 p. ISBN: 978-958-671-226-2. Disponible en: <https://cerlalc.org/publicaciones/el-espacio-iberoamericano-del-libro-2020/>. [Consulta: 18/03/2022]. 


Abrir hoy una nueva librería sin tener en cuenta a los compradores en línea representa el riesgo de dejar confinados los libros una vez se acaba el horario de trabajo y se cierra la puerta física del negocio. Al comienzo del 2020, muchas librerías ya tenían a disposición de los clientes la venta por Internet de libros impresos, pero otras tuvieron que reaccionar lo más rápido posible y adaptarse a lo que estaba sucediendo debido a la pandemia del COVID-19. «Aunque sea demasiado pronto para saber cuán duraderos serán determinados cambios experimentados en este tiempo, lo menos aconsejable para el sector sería actuar esperando un retorno a la vieja normalidad», se lee en El espacio iberoamericano del libro 2020 (p. 18), el nuevo informe del Cerlalc, que comienza con un análisis de la coyuntura que vivía el mundo en el momento de su publicación. El confinamiento general, el miedo al contagio, los cierres de fronteras, etc., llevaron al quiebre de muchos negocios, nos preparábamos para el peor de los panoramas en casi todos los sectores. ¿Qué sucedió con la publicación de libros en Iberoamérica? 

Desde el 2006, el Cerlalc da al sector editorial la oportunidad de conocer los datos relevantes relacionados con el ISBN (número normalizado internacional del libro) para tomar las mejores decisiones y emplear buenas prácticas tanto privadas como públicas. Cada dos años, desde 2006, publica en abierto el resultado de estos análisis. Si alguien desea leer una reseña del informe de 2016, puede hacerlo aquí

Andrés Ossa, director del Cerlalc, resalta en la presentación del informe de 2020 que, durante los meses de confinamiento, los diferentes actores del sector (libreros, editoriales, distribuidores, autores, etc.), se dieron cuenta que fue necesario acudir a diversos formatos, canales de comunicación y, en general, a la creatividad para adaptarse al momento. «Forjar comunidades de lectores es una apuesta segura» (p. 10), afirma. Además, se lamenta de que el registro sistemático y periódico sobre la producción y venta de libros no sea la regla en todos los países, pues esto impide el avance del mercado editorial.

El panorama comparativo de los registros del ISBN son la base de este informe que permite a los interesados conocer diferencias y similitudes entre los países, agentes editores y demás variables de análisis, y así crear proyectos y alianzas que contribuyan al desarrollo del sector. ¿Qué pasó en América Latina?: «Los ISBN asignados […], contando los solicitados por los autores-editores, ascendieron a 217.049, un aumento del 1,64 % respecto a 2019» (p. 24). Vale la pena detallar la siguiente gráfica incluida en el informe:

¿Qué países fueron los que más solicitaron nuevos ISBN? Se explica en el informe que Brasil realizó la mitad de las peticiones, seguido de Argentina y Colombia, que se mantuvieron estables. México, disminuyó un poco respecto a 2019, pero este país, junto a los tres antes mencionados, aportó el 85 % de los ISBN en Latinoamérica. Es importante hacer una inmersión en cada una de las gráficas que se incluyen en la publicación para conocer en detalle cómo se comportaron los demás países de la región.

Por otra parte, también se analizan los ISBN según el agente editor (editoriales comerciales, universitarias, entidades privadas no editoriales, entidades públicas), según su formato (digital o impreso) y por número de edición y los respectivos detalles por países. Se destaca que los autores-editores (personas naturales que editan ocasionalmente un libro de su autoría por decisión propia) son analizados en un capítulo independiente. Se aclara que la razón obedece a que estos se publican sin que una editorial sea la intermediaria, por lo que el proceso de selección obedece a otros criterios y por tanto merece un análisis aparte. 

Cabe resaltar que el Cerlalc ha cumplido cincuenta años trabajando en diversos proyectos que buscan fortalecer el sector del libro y que el informe aquí reseñado es solo parte de su inmenso trabajo. Es interesante consultar aquí otras publicaciones de esta productiva y útil entidad.

Esta reseña se publica simultáneamente con el Blog de l’Escola de Llibreria.

© Imagen inicial de Kertty en Pixabay